Vuelve el fantasma de la sequía

Mar, 21/10/2008

El Correo Gallego

La sombra de la sequía planea de nuevo sobre el país del agua. El pasado año por estas fechas las cosas en Galicia no estaban mucho mejor que ahora y nada más comenzar el mes de noviembre, la Confederación Hidrográfica del Norte tuvo que activar la prealerta por una eventual sequía y, con ella, puso en marcha un plan especial de actuación en el Miño.
Los datos de Aguas de Galicia, a la espera de su actualización esta semana, ya sitúan la ocupación media de los embalses (54%) en un nivel muy similar, e incluso inferior, al del pasado año (54,31%) por estas mismas fechas. Las cuencas del Miño-Sil y Limia registran hasta cuatro puntos menos que a mediados de octubre de 2007. Así, en la primera, el agua embalsada representa el 54,84% del total de su capacidad (59,70% el año anterior) y en A Limia la ocupación de los embalses está en un escaso 31% (en 2007 el registro estaba en 35,6%).
A estas alturas del anterior ejercicio eran un total de once las presas que almacenaban aguas en el entorno de su tercera parte de capacidad. Este año presentan una situación similar (por debajo del 35% de ocupación) una decena de pantanos.
En esta situación se encontraban en 2007 dos embalses destinados al suministro de agua a poblaciones: el de Cachamuíña para Ourense y el de Vilagarcía. Actualmente, solo el que abastece a la Ciudad de As Burgas se cuenta entre estos a un 6,27% (6,55% el pasado año). Del conjunto de pantanos del que se nutren las ciudades, los que están más bajos son Caldas de Reis (42,41%), Baiona (50%) y Vilagarcía (50,4%).
La Consellería de Medio Ambiente manejaba el pasado año unas previsiones de un otoño muy seco, mientras que en este ejercicio, de momento, no se ha perfilado el escenario esperado. En todo caso, este octubre está siendo más seco y cálido de lo habitual y excepto las lluvias pronosticadas para hoy, a medio plazo, las previsiones no vaticinan nuevas precipitaciones para elevar las reservas de agua.