IU aconseja no acercarse al embalse del Umia por la microcistina
Vie, 10/10/2008
Ante la situación que atraviesa el río Umia, Izquierda Unida ha encargado a la Universidade de Santiago sus propios análisis sobre la presencia de la microcistina tanto en el embalse, como en la zona de captación de agua potable de Caldas, como en el grifo de una vivienda de la villa. Aunque los parámetros de esta toxina están dentro de lo permitido por la legislación, el documento recomienda no acercarse a las márgenes de la presa, pues allí se detecta una elevada presencia de células que podrían ser inhaladas por los que visiten la zona. Según el análisis encargado por IU, en el embalse se detectaron 1,1 millones de células de microcistina en cada mililitro y 0,59 picogramos por cada litro. Unos niveles que, según los técnicos, «recomendan non facer actividades no contorno do encoro por risco de inhalación», explicó Mariano Ibáñez, responsable de medio ambiente de la formación. Tanto en la captación de agua de Caldas, como en el grifo de una vivienda, los límites están dentro de lo permitido por la legislación, «pero son importantes como para que se tome nota», añadió Juan Fajardo, responsable de IU en Vilagarcía. Considera que el gobierno de la capital arousana está actuando con total «deixadez» en lo que se refiere a este tema. Prueba de ello, asegura, es que nadie informó a los vecinos del riesgo que corrían al acercarse al embalse. Además, afirma que el concejal de Medio Ambiente, Marcelino Abuín, está incumpliendo un acuerdo plenario de hace cinco meses que solicitaba que se realizaran análisis diarios del río y se informara a todos los grupos. Estado del agua Fajardo recuerda que, aunque los límites de la microcistina estén dentro de la legalidad, «o certo é que existe microcistina na auga», afirma. Por eso considera que los vecinos deberían saber, en todo momento, los niveles de esta toxina. «Cando mercamos auga mineral hai unha etiqueta que di a composición. Na auga da traída tamén é necesaria esa información», añadió. Por otro lado, el portavoz vilagarciano asegura que la depuradora de Vilagarcía, al contrario que la de Caldas, carece de un tratamiento de ozono, para eliminar esa toxina. «O Concello ten que preocuparse e ter como prioritario dotar á depuradora deses tratamentos», añadió. Fajardo acusó al gobierno vilagarciano de andar más preocupado de «pasear por París» que del problema del Umia. Al mismo tiempo, argumentó que quien debería acometer la reforma de la depuradora es la empresa que explota el embalse. Porque el responsable de la existencia de esta toxina, «é o propio encoro construido pola forza bruta polo PP», aseguró Cristina Barros, de IU en Caldas. Esta retó ayer a los populares a emular a Manuel Fraga con el baño en Palomares para demostrar la salubridad del agua de la presa.