Las obras incluidas en el Pacto del Agua y pendientes de ejecución suman --sin incluir las que han sido descartadas-- un presupuesto conjunto de casi 1.500 millones de euros, según el listado de actuaciones que maneja la Comisión Mixta de Seguimiento del histórico acuerdo hidráulico.
El PAR insiste en reclamar al Gobierno central que traspase su ejecución a la DGA mediante el sistema de encomienda por convenio incluido en el Estatuto, tal y como ha hecho con la construcción de las depuradoras del Pirineo, un programa que ha empezado a desarrollarse después de ser transferidas, a los quince años de que el Ejecutivo central las declarara de interés general.
Por su parte, el PP tiene viva en el Congreso una proposición de ley cuya aprobación supondría que el grueso de esas obras se ejecutaría en dos años al ser declaradas de emergencia mientras el resto contaría con un calendario y con asignación presupuestaria. Sin embargo, el Gobierno no la ve con buenos ojos y el PSOE se opone abiertamente por considerarla inviable.
La ejecución de esas obras pendientes lleva, ya sea por una o por otra vía, camino de convertirse en uno de los temas centrales del debate político en Aragón a partir de este otoño, en el que, además, la crisis económica hace que diversas fuentes prevean un recorte de la obra pública como consecuencia de la reducción de los ingresos del Estado.
El grueso de la inversión pendiente de ejecutar se encuentra en el capítulo de embalses, cuyo presupuesto supera los 700 millones de euros. Tres de las obras superan los cien millones de presupuesto: el recrecimiento de Yesa, que se encuentra en ejecución aunque pendiente de que varios estudios permitan definir su viabilidad geológica; la construcción de Mularroya, en el que los trabajos comenzaron en el mes de mayo, y Biscarrués, pendiente de redefinición tras el descarte del primer proyecto.
REDES DE TRANSPORTE Le sigue en importancia presupuestaria el apartado de los canales, que suma más de 620 millones de euros. La mitad de esa cantidad --320 millones-- está consignada para intervenciones y mejoras en la red de Riegos del Alto Aragón, aunque también sigue sobre la mesa la puesta en marcha de nuevos sistemas de regadío como los de La Hoya y la Litera Alta, presupuestados, respectivamente, en 27 y 70 millones. Su viabilidad será debatida durante la elaboración del Plan Hidrológico del Ebro. También destaca la consignación de más de 40 millones para los regadíos del Bajo Gállego.
Restituciones territoriales --otra de las actuaciones que específicamente quiere asumir el Departamento de Medio Ambiente-- y obras complementarias suman algo más de 100 millones, con el grueso en las carreteras que bordearán el futuro embalse de Yesa --más de 50-- y en el plan de Montearagón --29--.
Las actuaciones en materia de abastecimientos suman otros 53 millones: 22 en la provincia de Teruel, 19 en Zaragoza y 12 en Huesca.