El director del Pabellón de Tailandia en Expo Zaragoza 2008, Supon Soolsoon, indicó en declaraciones a Europa Press que su país busca enseñar al mundo sus "humildes ideas" acerca de la gestión del agua, que consisten en la utilización de la planta vetiver, que conserva la humedad en la tierra.

Según se puede conocer en los paneles explicativos del pabellón, esta planta, considerada mala hierba porque no es comestible, sólo crece a través de sus raíces, con lo que va acumulando capacidad para retener el agua en el suelo, así como nutrientes, con lo que se incrementa la fertilidad de los terrenos de cultivo, en los que predominan los campos de arroz.

Gracias a ello, se evita la erosión y degradación del suelo, ya que las largas raíces de dicha planta, que alcanzan una longitud de varios metros en pocos meses, ofrecen mayor sujeción al suelo. El hecho de que vetiver sólo crezca en el subsuelo, a través de sus raíces, la hace especialmente resistente a los cambios meteorológicos.

En definitiva, esta planta está ampliamente integrada en el plan de gestión de aguas de Tailandia, "ya que con una inversión baja en capital, aporta enormes beneficios en los usos agrícolas", según comentó una de las responsables del pabellón; por lo que hace honor al significado de Tailandia, 'tierra de la abundancia'.

HOMENAJE AL REY DE TAILANDIA

Supon Soolsoon manifestó que el pabellón, diseñado bajo el lema 'Agua es vida. Los proyectos reales', es un "homenaje al rey actual de Tailandia, Bhumibol Adulyasej, debido a su importante trabajo sobre la conservación del agua, su gestión de los recursos hídricos y su labor para mejorar la calidad de vida de gente".

"Por ello, en la parte central del pabellón hay una réplica de un trono dorado, que es típico de los templos del país, en los que se suelen depositar objetos valiosos, generalmente religiosos. Está réplica representa un premio al Rey por su trabajo", aclaró Soolson.

Además, en las paredes del espacio central del pabellón, donde está ubicado el trono, se pueden ver unas pantallas de gran tamaño, en las que se proyecta un audiovisual que versa sobre la vida del Rey, y en concreto de sus acciones encaminadas a mejorar la gestión de los recursos hídricos del país.

PABELLÓN BIODEGRADABLE.

Las paredes y suelos del Pabellón de Tailandia se han realizado con contrachapado de vetiver, un material bello y natural que no requiere ningún tipo de revestimientos ni tratamientos químicos con sustancias contaminantes. Por lo tanto, el pabellón cuenta con materiales biodegradables y reciclables.

Un 80 por ciento del contrachapado de vetiver empleado en la creación del pabellón podría ser reutilizado, lo que serviría para sustituir 177 árboles, cada uno con un diámetro de 4 pulgadas y 2 metros de largo, que hubiesen necesitado dos años de crecimiento. Los constructores del pabellón se sirvieron de un total de 1.808 pies cuadrados de contrachapado de vetiver, que pesó 4 toneladas.

Por otro lado, según relató Soolsoon, el pabellón es iniciativa del Departamento de Recursos Hídricos, perteneciente al Ministerio de Recursos Naturales de Tailandia. Este departamento contrató a una empresa hídrica, denominada CM Organization, encargada de diseñar el contenido expositivo del pabellón. "Sin embargo, no podemos decir que la idea principal sea de esta empresa, porque es un trabajo conjunto entre más de 20 autoridades estatales", aclaró el director de este espacio.