Las Palmas de Gran Canaria, 25 abr (EFE).- El África Subsahariana contará con un pabellón propio en la Expo de Zaragoza, donde estarán representados catorce países de esa área del continente africano, en un espacio que destacará la importancia que el agua tiene en esa zona del mundo debido a su escasez.
El agua y el desarrollo sostenible son el motivo central de la Expo de Zaragoza, que se celebrará del 14 de junio al 14 de septiembre.
El pabellón de África Subsahariana, de 2.752 metros cuadrados, cuenta con catorce espacios dedicados a cada uno de los países que lo integran: Mali, Namibia, Senegal, Mozambique, Guinea Ecuatorial, Tanzania, Sudán, Uganda, Cabo Verde, Camerún, Kenia, Etiopía, Níger y Sudáfrica, informaron hoy sus organizadores.
Los catorce espacios del pabellón se distribuyen equitativamente a lo largo de un eje central de circulación principal y cada país se divide en tres zonas simbólicas: Vía Fluvial, Paisaje y Cultura, tres ámbitos que describen desde el ámbito urbano del interior del país hasta el espacio rural y las vías fluviales, indicó el coordinador del Pabellón de África Subsahariana, Ferrán Casanova, durante una rueda de prensa.
La Vía Fluvial es el espacio compartido por todos los países que forman el pabellón, un lugar común dedicado al agua.
En él se parte de la corriente del agua y, a partir de ella, los espacios de cada país adoptan formas aerodinámicas, que luego desembocan en la Vía Fluvial central, columna central del pabellón.
Asimismo, el espacio Paisaje se caracteriza por su variabilidad y está dedicado a la topografía, la agricultura, la flora, la fauna y los recursos naturales de un país.
La configuración de los módulos se deriva de formas geométricas irregulares, tal como se pueden encontrar en los mapas de las zonas agrícolas parceladas, explicó Casanova.
Así, las vitrinas en el mobiliario muestran, por ejemplo, los abundantes recursos presentes en el suelo o los hallazgos arqueológicos de un país.
El espacio dedicado a la Cultura sigue una arquitectura irregular, variable en altura, anchura y tamaño. En él hay ángulos rectos que forman elementos con contenidos diversos, desde cuestiones relacionadas con los núcleos de población, hasta la cultura, la religión, las etnias, el arte o la tradición.
Uno de los principales atractivos del Pabellón de África Subsahariana es su fachada, semejante a una cortina de lentejuelas, que, al recibir la luz del sol y el movimiento del viento, produce un mar de reflejos.
El juego sinuoso del viento sobre esa capa resulta en dibujos sugestivos sobre su superficie que recuerdan a la superficie del agua, mientras que el movimiento recuerda la fuerza de los elementos del ciclo ecológico, como el viento o el sol, dijo Casanova.
La importancia que el agua tiene en África Subsahariana como consecuencia de la escasez que sufren la mayoría de sus habitantes, es una constante a lo largo del Pabellón.
Según datos del Banco Mundial, 753 millones de personas, el 11,6 por ciento de la población mundial, viven en el África Subsahariana, mientras que el continente sólo posee el 8 por ciento de las reservas mundiales de agua dulce.
La grave carencia de infraestructuras hidráulicas convierte a esa área geográfica en uno de los espacios más expuestos a la sequía, con un amplio porcentaje de población rural que depende directamente del agua de lluvia para usos domésticos y agrícolas.
Asimismo, un 58 por ciento de la población rural no tiene acceso a un suministro mínimo de agua de 20 litros por persona y día de procedencia segura (agua corriente, fuente o pozo protegido) a menos de un kilómetro de distancia de la vivienda familiar.
El 72 por ciento de la población rural carece de acceso a las instalaciones de saneamiento, y solamente el 53 por ciento de la población urbana dispone de ellas.