Regantes dicen que la solución a la sequía pasa por los trasvases, pero 'no a cualquier precio'

Jue, 03/04/2008

Europa Press

La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) insistió hoy en que la solución al déficit estructural y de lluvias existente en España pasa por la realización de obras de regulación y trasvases intercuencas que garanticen el abastecimiento de agua para los distintos usos, pero "no sin limitación ni a cualquier precio" sino garantizando que exista siempre agua sobrante en la cuenca cedente.


De esta forma, la Federación de Regantes sale así al paso de la polémica suscitada en estos últimos días sobre el trasvase del Segre al Llobregat propuesto por la Generalitat de Cataluña para paliar la sequía en la región, al cual han manifestado su oposición el Gobierno central y los propios regantes del Segre que temen no disponer de caudal suficiente para acometer el riego de sus cultivos en esta temporada.


Fenacore explicó que la documentación técnica previa a la elaboración de los planes hidrológicos demuestra que los trasvases -siempre y cuando haya excedente de agua en la cuenca cedente- es la "mejor solución" para resolver la escasez de lluvias e infraestructuras hidráulicas existente en la mayor parte de las cuencas de España y, principalmente, en la zona del Levante y Noreste peninsular, como se está poniendo de manifiesto con falta de abastecimiento de agua que padece la ciudad de Barcelona.


Asimismo, la Federación precisó que si se hubieran ejecutado las obras de regulación en la cabecera del río Ebro contempladas en el Plan Hidrológico Nacional (PHN) y que fue asumido, con modificaciones, por el Programa Agua -una vez derogado el trasvase del Ebro- la sequía en la margen izquierda sería menos grave para los agricultores.


El presidente de Fenacore, Andrés del Campo, recordó que los regantes del Ebro votaron en su día a favor del trasvase siempre y cuando se ejecutaran las denominadas obras de compensación en la cabecera de la cuenca del río Ebro contempladas en el Pacto del Agua de Aragón (embalses de Yesa, Santaliestra, Biscarrues, San Salvador, etc.) y que hubieran permitido menor conflictividad para trasvasar agua del Segre al Llobregat sin perjuicio para la cuenca cedente.


Según Del Campo, "resulta paradójico que las lluvias estén provocando inundaciones en la cabecera del río Ebro por exceso de caudal con riesgo para las instalaciones de la Expo de Zaragoza y, mientras tanto, exista un déficit hídrico en la margen izquierda del Ebro o una crisis en la propia ciudad condal motivada por la falta de agua para abastecimiento".


En este sentido, explicó que la alternativa de la desalación por la que apuesta el Gobierno no es la "panacea" a los problemas de falta de abastecimiento, y apuntó que cualquier solución que no esté basada en la realización de trasvases o en la construcción de embalses -como llevar agua en barco desde la desaladora almeriense de Carboneras- es una solución complementaria pero no definitiva ni concluyente al problema de la sequía cíclica que azota a España históricamente.


AGILIZAR LAS OBRAS HIDRÁULICAS.


Por ello, Del Campo solicitó al Ministerio de Medio Ambiente que agilice las obras hidráulicas contempladas en el Plan Hidrológico Nacional (PHN), con el fin de despejar la incertidumbre existente entre los agricultores sobre el futuro de su actividad y dar una respuesta lo más temprana posible al problema endémico de la sequía en España.


En este sentido, la Federación de Regantes lamentó la parsimonia con que se está planteando la ejecución de las obras de regulación contempladas en el Pacto del Agua de Aragón y calificó de inadmisible que cuatro años después de la derogación del trasvase del Ebro sigan todavía en proceso de estudio la mayor parte de estas actuaciones.