El Presidente de la Confederación Hidrográfica del Norte (CHN), Jorge Marquínez, manifestó hoy su confianza en que la lluvia de primavera sea suficientemente abundante para que los embalses puedan llegar al verano con un buen nivel. Marquínez no estima que se deba de preocupar por la situación, aunque es consciente de la dependencia de la región de las lluvias. "Desde ahora a final de la primavera es habitual que las lluvias sean abundantes y copiosas y a pesar de que no tengamos nieve, confío en que las precipitaciones permitan abordar el verano con los embalses a buen nivel", aseguró el Presidente de la CHN.


El presidente de la Confederación Hidrográfica espera así que las lluvias permitan también recuperar manantiales y cauces que sirven para el abastecimiento a poblaciones que no están conectadas al sistema general de aguas.


Marquínez tiene la esperanza de que éste no sea una año crítico para la región, pero es consciente que desde la Confederación "no se pueden dormir". "Las soluciones no se improvisan en dos meses, tenemos que pensar que este tipo de situaciones van a ser más frecuentes y que tenemos que poner en marcha acciones que garanticen el suministro", dijo el presidente de la Confederación Hidrográfica.


Según explico el responsable de la CHN este invierno y otoño han sido "extraordinariamente" secos. "Se han batido récords, aunque los problemas en Asturias son menores que en otras comunidades autónomas como Galicia donde han vivido problemas incluso con la ganadería", dijo Marquínez.


Además el presidente comentó que los embalses, después de un verano muy lluvioso, estaban a niveles altos. "Aunque las aportaciones actuales hayan sido pequeñas no estimo que debamos preocuparnos", expuso.


Jorge Marquinez realizo estas declaraciones en el marco de la reunión e coordinación del Sistema Automático de Información Hidrológica que se celebró en el Palacio Ferrera.


El presidente de la Confederación Hidrográfica explicó que en esta legislatura en la zona Norte se van a producir cambios sustanciales. Uno de ellos hace referencia a la "Cuenca Norte" que incluye al Miño, con su afluente el Sil, zonas con un importante consumo de regadío, aunque diferentes, según el experto, a la de las cuencas cantábricas que van desde el Eo al Bidasoa. Marquínez explicó así, que lo que se ha hecho es segregar estas dos zonas en dos unidades de gestión, creando dos confederaciones con sus demarcaciones respectivas. "Esto es un avance que permitirá hacer una gestión más detallada, más pormenorizada de problemas que son muy diferentes", dijo.


La evidencia de que el cambio climático puede agudizar y hacer mas frecuentes los fenómenos de sequía, debe alertar según dijo Marquinez a los gestores para poner en marcha las soluciones que, en muchos casos, tardan años en llevarse a la práctica. "En esta legislatura hemos luchado por reforzar los abastecimientos, se han hecho obras en Cantabria y estamos haciendo una pequeña presa en Tolosa", comentó el presidente de Hidrográfica.


De esta manera lo que se ha puesto en marcha en esta legislatura es un conjunto de obras cuyo objetivo es tener un "futuro inmediato" de garantías para conseguir agua suficiente y de una calidad adecuada. En este contexto, según dijo Jorge Marquinez, la zona central de Asturias requiere un mayor refuerzo de su abastecimiento. "Esta en discusión saber cuál es la mejor alternativa, hay estudios de mucha profundidad sobre aguas subterráneas, que es la alternativa mas importante, cuando concluyan los estudios tomaremos la decisión mejor para resolver un problema importante", aseguró el Presidente de la Confederación Hidrográfica.