La Xunta dice que la sequía en Galicia "es preocupante pero no alarmante"

Mar, 13/11/2007

ABC

El consejero de Medio Rural, Alfredo Suárez Canal, aseguró ayer en La Coruña que Galicia atraviesa «una situación preocupante, pero no alarmante» en relación con una posible sequía, tras más de dos meses sin lluvia. Suárez Canal informó de que la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno regional está tomando medidas sobre el abastecimiento de agua. En este sentido, anunció que se está efectuando un análisis de la actual situación que permita «tomar medidas cuando sea necesario», pero insistió en que lo que ocurre en Galicia «se sitúa en el terreno de la preocupación, no de la alarma». Con respecto a las explotaciones ganaderas, el consejero dijo que, en este momento, algunas de ellas tienen problemas para alimentar a su ganado y se ven obligadas a recurrir al ensilado que tienen almacenado, pero aclaró que «en un horizonte inmediato, no hay grandes problemas en este terreno». Al ser preguntado sobre las críticas vertidas por el Partido Popular de Galicia sobre la supuesta inoperancia del Plan contra incendios forestales de la Xunta, el titular de Medio Rural dijo ignorar esas críticas y puntualizó que «lo que conoce todo el mundo son los datos sobre el número de incendios y de detenidos de este año». Dispositivos Asimismo, el consejero gallego declaró que ese plan «tiene dispositivos para reaccionar cuando sea necesario» y aseguró que «en estos momentos, está actuando sin ningún tipo de problemas». Como ya informó ABC, la Confederación Hidrográfica del Norte activó la semana pasada el Plan Especial de Actuación en situaciones de Alerta y Eventual Sequía en la cuenca del Miño. La CHN comunicó a los responsables de los principales abastecimientos la necesidad de limitar los consumos de agua urbanos, aunque el organismo de cuenca asegura que los abastecimientos están garantizados. La CHN ya pidió la pasada semana a los ayuntamientos que disminuyan el uso del agua para riego de jardines, baldeo de calles y resto de usos urbanos, al tiempo que se reduzca la presión nocturna del agua.