El tamaño de un colector dificulta la evacuación de la lluvia en los nuevos barrios de Valencia

Lun, 24/09/2007

Levante

El retraso acumulado en el inicio de las obras de ampliación del colector norte de Valencia ha dificultado que la red de saneamiento de nuevos barrios de la ciudad pudiera absorber de forma inmediata el agua de lluvia caída durante los últimos días. Las inundaciones de aparcamientos subterráneos ocurridas, por ejemplo, en los nuevos edificios de las inmediaciones de la avenida de las Corts Valencianes podrían haberse evitado si el colector, ubicado bajo la avenida de Pío Baroja, ya hubiese doblado su capacidad. La propia concejala de Ciclo Integral del Agua del Ayuntamiento de Valencia, Maria Àngels Ramón-Llin, aseguró ayer que la ampliación de las instalaciones, cuya ejecución corresponde a la Conselleria de Medio Ambiente, «reducirá cualquier riesgo en el futuro».

Los propios vecinos del inmueble de la zona más afectado por las precipitaciones, el situado en el número 5 de la calle Marina Baixa, atribuyen la inundación de su aparcamiento al retraso de la ampliación del colector, según constató ayer el administrador de la finca, José Sales Rodríguez, quien describió lo ocurrido como un suceso «lamentable, pero evitable». De hecho, la gota fría de 2004 ya supuso una advertencia de lo que podía ocurrir. Pocos meses después de que los primeros propietarios recibieran las llaves, el agua de lluvia inundó por completo el segundo piso del aparcamiento subterráneo. Los escasos propietarios trasladaron los vehículos al primer piso para evitar daños. En esta ocasión, sin embargo, el agua ha afectado al menos a 25 coches y cinco motos, según los datos facilitados por Sales, quien avanzó que la comunidad de propietarios solicitará en breve una reunión con el ayuntamiento.

De momento, Ramón-Llin ya ha avanzado que los técnicos municipales revisarán esta semana la red de saneamiento de las zonas afectadas por las inundaciones, en especial la de la avenida Levante UD, en la que también se inundó un garaje a pesar de que el colector de Vera es de gran capacidad. La edil también anunció que en noviembre estará acabado el desdoblamiento del colector norte, que da servicio a la zona de la avenida de las Corts Valencianes.

La ampliación del colector está prevista desde hace años, pero, a pesar del crecimiento de los barrios a los que da servicio, no se empezó a ejecutar hasta principios del pasado mes de julio. La introducción de una modificación en el trazado reclamada por Rain Forest, la empresa concesionaria del Biopark en el colindante Parque de Cabecera, y la disputa entre la Generalitat y la compañía concesionaria del desdoblamiento de las instalaciones han supuesto un retraso de tres años desde que la Generalitat incluyó la obra en sus presupuestos de 2004.

Por otra parte, vecinos de Massarrojos denunciaron ayer que la acequia de Moncada lleva varios días vertiendo el agua de lluvia al barranco del Palmaret, un ramal del barranco del Carraixet, a su paso por la pedanía valenciana. Los regantes suelen abrir la compuerta de la presa una vez a la semana, coincidiendo con el aumento del volumen de la acequia en los días de riego. La compuerta permanece subida desde su última apertura, con lo que toda la lluvia caída el fin de semana ha sido desaprovechada y ha ido directamente al barranco. El agua transportada por la acequia alcanza los 30 centímetros de altura en el tramo anterior de la compuerta. Después, la conducción continúa totalmente seca.

Xàbia y Calp también vivieron este fin de semana las consecuentes inundaciones. En la Avenida de la Libertad y el camí dels Tamarits de l'Arenal de Xàbia el agua se quedó estancada durante gran parte de la mañana y hasta se quedaron bloqueados varios vehículos. En Calp, varios vecinos de la zona del Pla del Mar optaron por denunciar por segunda vez al ayuntamiento porque el agua alcanzó hasta los 45 centímetros en en interior de sus viviendas. Tanto el alcalde de Calp, Luis Serna, como el concejal de Xàbia, Rafa Bas, responsabilizaron a los promotores que están ejecutando actuaciones urbanísticas en la zona y aludieron a que en estos emplazamientos la cota de tierra es inferior al nivel del mar.

La provincia de Alicante continuó sufriendo en la jornada de ayer los efectos del temporal de lluvias. Las fuertes precipitaciones causaron el descarrilamiento de un tren de FGV en el término municipal de Altea. El incidente se produjo en torno a las nueve y media de la mañana, en una zona escarpada próxima a los túneles del Mascarat. El desprendimiento de una roca de grandes dimensiones sobre la vía debido a las lluvias del sábado provocó el descarrilamiento del automotor. Ninguno de los 19 pasajeros del tren sufrió daños, pero el tráfico ferroviario estuvo interrumpido entre Altea y Dénia durante toda la jornada.