El presidente de Aguas de Valencia asegura que la empresa iniciará su expansión por el resto del territorio nacional
Mié, 19/09/2007
El presidente de Aguas de Valencia, Eugenio Calabuig, aseguró hoy que la "intención" de Inversiones Financieras Agval --accionista mayoritario de la sociedad con un 60,7 por ciento del total-- es "consolidar el mercado actual del grupo e iniciar definitivamente su expansión por el resto del territorio nacional", según informaron fuentes de la empresa en un comunicado.
El Grupo Aguas de Valencia está presente en ocho comunidades autónomas --Aragón, Cantabria, Castilla La Mancha, Cataluña, Comunitat Valenciana, Murcia, Navarra y País Vasco-- donde presta diversos servicios relacionados con el ciclo integral del agua a más de dos millones de personas.
Respecto a la creación de Agval, desde la empresa destacaron que "ha contribuido a la valencianización definitiva del Grupo Aguas de Valencia". En esta línea, Calabuig subrayó que "este escenario" supone "devolver a los valencianos el control de una de sus empresas de renombre, así como la unificación de criterios para lograr su crecimiento definitivo".
Asimismo, indicó que la "cohesión" de los accionistas locales era "la única opción que nos permitiría acometer las iniciativas necesarias para lograr que Aguas de Valencia fuera una empresa moderna y adaptada a las nuevas tendencias del sector".
Aguas de Valencia ha incorporado a su gestión la electrodiálisis reversible, un proceso electroquímico que permite desnitrificar una corriente acuosa mediante el uso de la corriente eléctrica. La empresa ha aplicado esta nueva tecnología en Gandia (Valencia) y en Corbera d'Ebre (Tarragona) mediante la construcción de dos plantas que garantizan diariamente el suministro de más de 32.000 metros cúbicos de agua potable de máxima calidad, eliminando así los problemas de acumulación de nitratos que presentaban sus acuíferos.
En cuanto a las líneas de negocio, Calabuig indicó que el grupo se centrará, principalmente, en todos los servicios relacionados con el Ciclo Integral del Agua --abastecimiento, depuración, desnitrificación, desalobración y gestión de regadíos--, aunque también invertirá en otras actividades complementarias que "nos permitan aportar valor a nuestros diferentes grupos de interés", destacó.
Valoró también los "nuevos retos" que podrán acometerse "gracias a los notables resultados económicos obtenidos durante los últimos años", ya que la empresa logró un resultado neto de 11,8 millones de euros, superior en un 12,4 por ciento al año anterior; así como una cifra de negocios del 127,4 millones, lo que supone un incremento del 8,9 por ciento respecto al periodo anterior.
En cuanto a las previsiones para este año, Calabuig indicó que son "igualmente halagüeñas si atenemos a los resultados y a las contrataciones obtenidas en los primeros meses del año". En este sentido, remarcó que "nuestro crecimiento como empresa irá en beneficio de un mejor servicio obtenido por nuestros más de dos millones de clientes".
DOS NUEVOS CONTRATOS.
El Grupo Aguas de Valencia ha logrado dos importantes contratos en cuanto a depuración y tratamiento de aguas residuales, afirmaron desde la compañía. El primero de ellos es la gestión de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Pinedo para los próximos dos años, un tiempo durante el que "contribuirá a la mejorar la calidad de las aguas empleadas por más de 916.000 habitantes".
Esta instalación depurará y hará tratamiento terciario a alrededor de 128 millones de metros cúbicos, lo que supone una producción diaria de aproximadamente 350.000 metros cúbicos, señalaron.
Complementariamente, esta empresa ha sido la seleccionada para realizar el mantenimiento y la gestión de 45 depuradoras en las comarcas alicantinas de El Comtat y la Marina Alta, tras la reciente adjudicación pública realizada por la Entitat Pública de Sanejament d'Aigües Residuals (EPSAR).
Al respecto, apuntaron que estas plantas "mejorarán la calidad de las aguas empleadas por más de 60.000 habitantes de estos municipios al depurar anualmente alrededor de 3,2 millones de metros cúbicos", según los datos de licitación. Al mismo tiempo, el tratamiento de este agua residuales supondrá la generación anual de más de 368 toneladas de fangos de materia seca que, posteriormente, recibirán el pertinente tratamiento y uso secundario, manifestaron.
El presidente del grupo señaló que con las últimas adjudicaciones la sociedad gestionará un total de 256 depuradoras en cinco comunidades autónomas, al tiempo que subrayó que el "reto" de la empresa para este año es "implantarnos en otras regiones donde podamos aportar valor a la gestión de las aguas residuales".
NUEVAS ADJUDICACIONES.
Durante el pasado ejercicio, el Grupo Aguas de Valencia añadió a su gestión 60 nuevos contratos relacionados con las diversas líneas de negocio que desarrolla. Del total de las nuevas adjudicaciones, 49 corresponden a la Comunitat Valenciana, seis a Cataluña, tres a Aragón y una a Navarra, la misma cifra que al País Vasco.
En cuanto al número de abonados logrado, totalizando los 60 contratos adjudicados, manifestaron que durante el año 2006 el Grupo Aguas de Valencia incorporó más de 290.000, el 46,6 por ciento en Navarra, el 25,52 por ciento en la Comunitat Valenciana, el 25,5 por ciento en el País Vasco y el 2,3 por ciento en Cataluña.
El Grupo Aguas de Valencia está presente en ocho comunidades autónomas --Aragón, Cantabria, Castilla La Mancha, Cataluña, Comunitat Valenciana, Murcia, Navarra y País Vasco-- donde presta diversos servicios relacionados con el ciclo integral del agua a más de dos millones de personas.
Respecto a la creación de Agval, desde la empresa destacaron que "ha contribuido a la valencianización definitiva del Grupo Aguas de Valencia". En esta línea, Calabuig subrayó que "este escenario" supone "devolver a los valencianos el control de una de sus empresas de renombre, así como la unificación de criterios para lograr su crecimiento definitivo".
Asimismo, indicó que la "cohesión" de los accionistas locales era "la única opción que nos permitiría acometer las iniciativas necesarias para lograr que Aguas de Valencia fuera una empresa moderna y adaptada a las nuevas tendencias del sector".
Aguas de Valencia ha incorporado a su gestión la electrodiálisis reversible, un proceso electroquímico que permite desnitrificar una corriente acuosa mediante el uso de la corriente eléctrica. La empresa ha aplicado esta nueva tecnología en Gandia (Valencia) y en Corbera d'Ebre (Tarragona) mediante la construcción de dos plantas que garantizan diariamente el suministro de más de 32.000 metros cúbicos de agua potable de máxima calidad, eliminando así los problemas de acumulación de nitratos que presentaban sus acuíferos.
En cuanto a las líneas de negocio, Calabuig indicó que el grupo se centrará, principalmente, en todos los servicios relacionados con el Ciclo Integral del Agua --abastecimiento, depuración, desnitrificación, desalobración y gestión de regadíos--, aunque también invertirá en otras actividades complementarias que "nos permitan aportar valor a nuestros diferentes grupos de interés", destacó.
Valoró también los "nuevos retos" que podrán acometerse "gracias a los notables resultados económicos obtenidos durante los últimos años", ya que la empresa logró un resultado neto de 11,8 millones de euros, superior en un 12,4 por ciento al año anterior; así como una cifra de negocios del 127,4 millones, lo que supone un incremento del 8,9 por ciento respecto al periodo anterior.
En cuanto a las previsiones para este año, Calabuig indicó que son "igualmente halagüeñas si atenemos a los resultados y a las contrataciones obtenidas en los primeros meses del año". En este sentido, remarcó que "nuestro crecimiento como empresa irá en beneficio de un mejor servicio obtenido por nuestros más de dos millones de clientes".
DOS NUEVOS CONTRATOS.
El Grupo Aguas de Valencia ha logrado dos importantes contratos en cuanto a depuración y tratamiento de aguas residuales, afirmaron desde la compañía. El primero de ellos es la gestión de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Pinedo para los próximos dos años, un tiempo durante el que "contribuirá a la mejorar la calidad de las aguas empleadas por más de 916.000 habitantes".
Esta instalación depurará y hará tratamiento terciario a alrededor de 128 millones de metros cúbicos, lo que supone una producción diaria de aproximadamente 350.000 metros cúbicos, señalaron.
Complementariamente, esta empresa ha sido la seleccionada para realizar el mantenimiento y la gestión de 45 depuradoras en las comarcas alicantinas de El Comtat y la Marina Alta, tras la reciente adjudicación pública realizada por la Entitat Pública de Sanejament d'Aigües Residuals (EPSAR).
Al respecto, apuntaron que estas plantas "mejorarán la calidad de las aguas empleadas por más de 60.000 habitantes de estos municipios al depurar anualmente alrededor de 3,2 millones de metros cúbicos", según los datos de licitación. Al mismo tiempo, el tratamiento de este agua residuales supondrá la generación anual de más de 368 toneladas de fangos de materia seca que, posteriormente, recibirán el pertinente tratamiento y uso secundario, manifestaron.
El presidente del grupo señaló que con las últimas adjudicaciones la sociedad gestionará un total de 256 depuradoras en cinco comunidades autónomas, al tiempo que subrayó que el "reto" de la empresa para este año es "implantarnos en otras regiones donde podamos aportar valor a la gestión de las aguas residuales".
NUEVAS ADJUDICACIONES.
Durante el pasado ejercicio, el Grupo Aguas de Valencia añadió a su gestión 60 nuevos contratos relacionados con las diversas líneas de negocio que desarrolla. Del total de las nuevas adjudicaciones, 49 corresponden a la Comunitat Valenciana, seis a Cataluña, tres a Aragón y una a Navarra, la misma cifra que al País Vasco.
En cuanto al número de abonados logrado, totalizando los 60 contratos adjudicados, manifestaron que durante el año 2006 el Grupo Aguas de Valencia incorporó más de 290.000, el 46,6 por ciento en Navarra, el 25,52 por ciento en la Comunitat Valenciana, el 25,5 por ciento en el País Vasco y el 2,3 por ciento en Cataluña.