Expertos abogan mejorar la información, afrontar los retos como el cambio climático o riesgo de pandemias.

Mar, 11/09/2007

EFE

Representantes de los organismos internacionales integrantes del Grupo de Observación de la Tierra (GEO), reunidos en Sevilla, abogan por mejorar la información y la transmisión sobre los diferentes indicadores terrestres para afrontar retos como el cambio climático o el riesgo de epidemias.
Delegados de 71 países, de la Comisión Europea y de 46 organizaciones internacionales dedicados a la observación de la Tierra participan en Sevilla en el primer simposio del GEO, iniciativa creada en 2005 para mejorar la información sobre la evolución de la Tierra, así como el acceso y la transmisión de estos indicadores.
Uno de los objetivos del GEO es consolidar un Sistema de Sistemas de Observación Global de la Tierra, denominado GEOSS, que coordinaría las informaciones que actualmente se obtienen por instituciones y asociaciones a través de satélites, estaciones meteorológicas y otros métodos.
El director del secretariado del GEO, Jose Achache, destacó en rueda de prensa que sólo los países europeos invierten anualmente unos cuatro millones de euros en el mantenimiento sus sistemas de observación de la tierra, aunque la información que obtienen no se coordina adecuadamente.
El representante de España en el GEO y director general del Instituto Nacional de Meteorología, Francisco Cadarso, subrayó que este organismo ha elaborado una predicción sobre la evolución de las temperaturas y de las precipitaciones en este siglo, dentro de las actuaciones relacionadas con el cambio climático, pero advirtió de que la mayoría de los países carece de este tipo de estudios, lo que dificulta afrontar un problema que es de carácter planetario.
Señaló también que muchos de estos indicadores planetarios no son homogéneos y que no existen series históricas suficientes para elaborar estudios fiables lo que, en su opinión, realza el carácter estratégico del GEO y de su sistema GEOSS.
Tanto Achache como Cadarso señalaron la importancia de consolidar esta iniciativa, no sólo para conocer mejor y afrontar el cambio climático sino ante posibles epidemias de gran magnitud, un riesgo que la Organización Mundial de la Salud ha identificado como un de las principales amenazas para la salud mundial.
También destacaron que el conocimiento e intercambio de los indicadores meteorológicos resulta crucial para prevenir epidemias de enfermedades como el cólera o la meningitis y advirtieron, a modo de ejemplo, que algunos sistemas de información meteorológica no comparten sus datos con organismos sanitarios similares.
Otro campo de actuación estratégico es el del conocimiento de las fuentes energéticas y de las reservas de agua, aspecto éste último sobre el que algunos países asiáticos se niegan a facilitar información.
Achache puso como ejemplo del GEO el convenio que previsiblemente se firmará la próxima semana para facilitar información en tiempo real a través de internet sobre la evolución de las selvas amazónicas y de los bosques tropicales africanos.
Cardarso recordó que otro objetivo del GEO es enseñar a los responsables públicos y a los ciudadanos a usar los sistemas de información de la Tierra para ayudarles en la toma de decisiones y para preparar planes de reducción de desastres, mejora de la salud, gestión de recursos energéticos e hídricos, predicción meteorológica, gestión y protección de ecosistemas, agricultura sostenible, adaptación al cambio climático o conservación de la biodiversidad.
La representación de España en este grupo intergubernamental se realiza a través del Instituto Nacional de Meteorología (INM) y también participan otros organismos e instituciones españolas. EFE am/jrr/ero