Nuevas tecnologías de reciclado podrían reducir un 48 por ciento el consumo de agua en España

Lun, 23/07/2007

Diario de Mallorca

Los españoles podrían reducir su consumo de agua doméstica más de un 48 por ciento con la aplicación de las últimas tecnologías de reciclado y de reducción del caudal para duchas y grifos, según el Informe sobre el consumo de agua en los hogares españoles, realizado por Hansgrohe.

En este sentido, el estudio advirtió que España es uno de los cinco países de la Unión Europea, junto con Bélgica, Luxemburgo, Alemania e Italia, que más agua consume por habitante, cifrándose el gasto diario por individuo en 171 litros, 121 más del establecido por la Organización Mundial de la Salud como el volumen mínimo para cubrir las necesidades básicas.

Así, el análisis determinó que con la utilización de equipos de reciclado de agua doméstica una familia de cuatro miembros podría ahorrar más de 90.000 litros al año, un 48 por ciento de su consumo actual, mientras que con la aplicación de sistemas de reducción de caudal se podría reducir hasta en un 25 por ciento el consumo actual en las duchas y un 20 por ciento en los grifos.

El precio del agua

De esta forma, las nuevas tecnologías permitirán a los usuarios reducir su factura del agua, cuyo precio se incrementará alrededor de un 30 por ciento en los próximos años para incluir todos los costes de abastecimiento y tratamiento del agua, tal y como establece la Directiva Marco del Agua Europea.

Al respecto, según el último informe publicado por el Ministerio de Medio Ambiente titulado Precios y Costes de los Servicios del Agua en España, los españoles pagan 1,08 euros por metro cúbico de uso doméstico cuando el coste del abastecimiento y saneamiento es notablemente más alto, lo que se debe a que estos costes están financiados en gran medida por las administraciones públicas y no se cargan completamente en la factura de los usuarios.

Sin embargo, según este estudio, en los próximos años el coste del agua experimentará una subida sustancial en España, ya que la Directiva Marco del Agua Europea establece que antes de 2010 el recibo del agua que pagan los ciudadanos europeos deberá incluir todos los costes de suministro, incluyendo el tratamiento y gestión de las aguas residuales.

Ante esta situación el uso de nuevas tecnologías aplicadas están experimentando una importante demanda.