El 'samaruc' se ahoga
Vie, 08/06/2007
La sequía o las obras. Estos son los dos posibles orígenes de la acuciante desecación de las acequias del distrito marítimo de Castellón, de El Grau. La desecación de estos caminos de agua está provocando, según los ecologistas, la desaparición del marjal y, por extensión, de una de las especies en peligro de extinción tan autóctona como es el samaruc. La fiscalía ha abierto diligencias para determinar la posible existencia de un delito.
El teniente alcalde en funciones del Grau, Joaquín Torres, ha apuntado que la desecación de este marjal es consecuencia de la sequía o de las obras de la autovía al puerto, inaugurada hace un año. Por su parte, el Grupo para el Estudio y la Conservación de los Espacios Naturales (GECEN) asegura que las obras que se realizan actualmente en esa zona de la ciudad para la ampliación de una de las industrias del polígono energético de El Serrallo y la construcción de un hotel en las inmediaciones son las verdaderas causas de la desaparición del agua. Por ello, y tras decenas de denuncias vecinales, el pasado mes de abril el colectivo presentó un escrito ante la fiscalía de Castellón, que ha abierto diligencias para determinar el origen del hecho e investigar si existe un posible delito ante la afección no sólo a una sino a dos especies en peligro de extinción (samaruc y fartet), y la extinción de ambas, un delito tipificado en el artículo 325 del Código Penal.
La Confederación Hidrográfica del Júcar también considera que la desecación de las acequias no se debe a causas naturales pero, de momento, está recogiendo informes con el fin de exponer una conclusión determinante. Mientras tanto, los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza también han visitado la zona para investigar si ha sido la acción humana la que ha provocado la desecación y, para los ecologistas, la afección 'drástica' al equilibrio del sistema natural y al hábitat de especies catalogadas en peligro de extinción 'eliminando sus poblaciones'.
Tras la apertura de las diligencias, GECEN ha aportado nueva documentación. Si en un principio sostuvo que la desecación se debía al bombeo de agua para la ampliación de Iberdrola en el Polígono el Serrallo, ahora considera que las obras de construcción de un nuevo hotel en la Avenida del Mar, que discurre entre el casco urbano de la capital de La Plana y El Grau, son las causantes de la desaparición el agua de las acequias. GECEN ha trasladado además a la fiscalía a decreto de protección especial del samaruc, especie sobre la que 'se han realizado esfuerzos con capital europeo incluido para evitar su extinción' y alega que únicamente se conocen ocho poblaciones a nivel mundial (seis en la Comunidad Valenciana y dos en Cataluña) y 'una población relicta muy amenazada en el Grau de Castellón', según el Atlas y Libro Rojo de los Peces Continentales de España, el CSIC y el Ministerio de Medio Ambiente. Según los ecologistas, el samaruc y el fartet son 'dos verdaderas joyas de la biodiversidad amenazadas de extinción a nivel mundial, estrictamente protegidas' por una legislación que 'se supera con impunidad absoluta, dejando en ridículo democrático' a quienes han de velar por su aplicación.
Así, han pedido a la fiscalía que solicite al Juzgado de Guardia 'la suspensión cautelar de las obras para impedir la continuación de la desecación y se tomen las medidas necesarias para garantizar la continuidad del hábitat y de las poblaciones de samaruc y fartet si actualmente perviven'.
El teniente alcalde en funciones del Grau, Joaquín Torres, ha apuntado que la desecación de este marjal es consecuencia de la sequía o de las obras de la autovía al puerto, inaugurada hace un año. Por su parte, el Grupo para el Estudio y la Conservación de los Espacios Naturales (GECEN) asegura que las obras que se realizan actualmente en esa zona de la ciudad para la ampliación de una de las industrias del polígono energético de El Serrallo y la construcción de un hotel en las inmediaciones son las verdaderas causas de la desaparición del agua. Por ello, y tras decenas de denuncias vecinales, el pasado mes de abril el colectivo presentó un escrito ante la fiscalía de Castellón, que ha abierto diligencias para determinar el origen del hecho e investigar si existe un posible delito ante la afección no sólo a una sino a dos especies en peligro de extinción (samaruc y fartet), y la extinción de ambas, un delito tipificado en el artículo 325 del Código Penal.
La Confederación Hidrográfica del Júcar también considera que la desecación de las acequias no se debe a causas naturales pero, de momento, está recogiendo informes con el fin de exponer una conclusión determinante. Mientras tanto, los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza también han visitado la zona para investigar si ha sido la acción humana la que ha provocado la desecación y, para los ecologistas, la afección 'drástica' al equilibrio del sistema natural y al hábitat de especies catalogadas en peligro de extinción 'eliminando sus poblaciones'.
Tras la apertura de las diligencias, GECEN ha aportado nueva documentación. Si en un principio sostuvo que la desecación se debía al bombeo de agua para la ampliación de Iberdrola en el Polígono el Serrallo, ahora considera que las obras de construcción de un nuevo hotel en la Avenida del Mar, que discurre entre el casco urbano de la capital de La Plana y El Grau, son las causantes de la desaparición el agua de las acequias. GECEN ha trasladado además a la fiscalía a decreto de protección especial del samaruc, especie sobre la que 'se han realizado esfuerzos con capital europeo incluido para evitar su extinción' y alega que únicamente se conocen ocho poblaciones a nivel mundial (seis en la Comunidad Valenciana y dos en Cataluña) y 'una población relicta muy amenazada en el Grau de Castellón', según el Atlas y Libro Rojo de los Peces Continentales de España, el CSIC y el Ministerio de Medio Ambiente. Según los ecologistas, el samaruc y el fartet son 'dos verdaderas joyas de la biodiversidad amenazadas de extinción a nivel mundial, estrictamente protegidas' por una legislación que 'se supera con impunidad absoluta, dejando en ridículo democrático' a quienes han de velar por su aplicación.
Así, han pedido a la fiscalía que solicite al Juzgado de Guardia 'la suspensión cautelar de las obras para impedir la continuación de la desecación y se tomen las medidas necesarias para garantizar la continuidad del hábitat y de las poblaciones de samaruc y fartet si actualmente perviven'.