Las fuertes lluvias y el granizo provocan graves inundaciones y daños en Madrid y Valladolid

Lun, 21/05/2007

El Diario Montañés

Emergencias 112 ha recibido 125 avisos en una hora a causa de la tormenta, la lluvia y las inundaciones registradas en Madrid desde poco antes de las 19.00 horas.

Fuentes de Emergencias 112 situaron la zona con mayores complicaciones en el sur de Madrid, sobre todo en Chinchón, Villaconejos, Colmenar de Oreja, Campo Real y Fuenlabrada.

Los bomberos de la Comunidad de Madrid tuvieron que realizar más de 20 salidas en este espacio de tiempo, sobre todo a causa de las ramas de los árboles caídas por el viento, pero también por inundaciones .

Fuentes de los bomberos indicaron que a la altura del kilómetro 8 de la A-6 se ha producido una balsa de agua, que también ha requerido su intervención.

Por su parte, los Bomberos del Ayuntamiento tuvieron que incrementar su trabajo entre las 19.00 horas y las 20.30 horas y en la zona noroeste de la capital, según informaron fuentes de Emergencias Madrid.

Señalaron que veinte dotaciones de bomberos del Ayuntamiento tuvieron que realizar 61 salidas de forma simultánea y 'se emplearon a fondo' por los daños causados por la tormenta y la lluvia.

Tuvieron que sanear árboles y ramas, además de desaguar sótanos y garajes y bolsas de agua en la vía pública.

Una de las salidas ''más significativas', según las fuentes, los Bomberos de la capital la realizaron debido a las dificultades de acceso, a causa de la tormenta, a las Urgencias del hospital de Puerta de Hierro.

Además, los bomberos actuaron, 'especialmente' en algunas calles de la zona noroeste como las de Nueva Zelanda, Ramón Castroviejo, Villamil, así como en el enlace de la M-40 con la A-6

En la capital vallisoletana y en los municipios de Santa Eufemia del Arroyo, Villafrechós, Pozuelo de la Orden, Cabreros del Monte y Villanueva de los Caballeros, la jornada tanto del sábado como la de ayer ,domingo, no se olvidará tan facilmente.

El cielo se puso negro, según aseguran los del lugar, y una gran granizada de entre diez y veinte minutos atravesó las uralitas de naves ganaderas y agrícolas, arrasó cosechas y huertas, rompió cristales en viviendas y otros edificios y resquebrajó las lunas de varios vehículos.

Estos pueblos anunciaron ayer que pedirán la declaración de zona catastrófica una vez que hayan evaluado los destrozos.

Según narran los vecinos, al principio el granizo que caía era seco, sin lluvia y «algunas de las bolas que caían del cielo tenían el tamaño de un huevo de gallina» y después se desató una gran tormenta de agua que inundó las calles impidiendo el tránsito y la circulación. De hecho, la gente del pueblo aún conserva alguna de las piedras caídas en el frigorífico.

Las uralitas de las naves han quedado seriamente dañadas, así como la chapa y lunas de los coches a los que la tormenta sorprendió estacionados en plena calle, al menos quince, según el edil.

Incluso en más de una explotación el fuerte granizo perforó el techo de uralita «como un colador» y hubo que sacar a los animales fuera de la nave.