Los expertos reivindican que se incremente el precio del agua ante el agravamiento de las sequías
Sáb, 07/04/2007
El informe advierte de que el turismo en el litoral verá reducido su atractivo por el empeoramiento de las condiciones climáticas
M. J. C./
VALENCIA
La disminución de las precipitaciones en los próximos años convertirán el agua en un bien escaso y motivo de disputas. En las regiones áridas y semiáridas, como la Comunitat Valenciana, descenderá el nivel de los recursos hídricos y las tensiones que ya existen se verán agravadas.
Los expertos advierten por tanto de que ya se deben tomar medidas para paliar la falta de agua. El director del Instituto Tecnológico del Agua en la Universidad Politécnica de Valencia, Enrique Cabrera, criticó que España todavía está muy lejos de gestionar el agua de una forma integral y eficaz. “El Gobierno debe hacer frente a la escasez teniendo en cuenta las aguas superficiales, las subterráneas y cualquier recurso hídrico disponible, de forma conjunta”.
Entre las medidas que Cabrera reivindica está el incremento en el precio del agua. “El usuario debe saber lo que cuesta, pagar por ello y valorarlo”.
El documento sostiene que se reducirá el nivel de agua disponible, los recursos acuíferos, el turismo estival y, en general, la productividad de las cosechas. Enrique Cabrera cree que, aunque no existe la certeza científica, todo indica que la tendencia es clara: va dirigida a que se reducen las precipitaciones.
El anterior informe cifró en un 30% esa disminución en el Mediterráneo. Cabrera cree que los Gobiernos deben comenzar ya a trabajar para mitigar los efectos de un cambio que muchos científicos califican de devastador. Lo principal es poner en marcha alternativas a la actual gestión del agua.
El gasto hídrico ha crecido de forma imparable en la última década pese a que en los años 90 la Comunitat Valenciana tuvo que hacer frente a una sequía que obligó a restringir el abastecimiento. “Tenemos que ser más conscientes de que la falta de agua es un problema muy grave y que hay que modificar los planteamientos actuales, hacer una reconversión del agua como ya se hizo a nivel industrial”, asegura Cabrera.
María José Sanz, que ha participado en la redacción de los informes de Naciones Unidas, también alerta de que la falta de agua es uno de los principales problemas de la Comunitat en el futuro. “Desde el Centro de Estudios Ambientales hemos estudiado que las consecuencias climáticas van a ser más graves en esta región por el cambio en los usos del suelo”, asegura Sanz.
El turismo, según los expertos, será uno de los sectores más afectados porque con el calentamiento verá reducido su atractivo.
M. J. C./
VALENCIA
La disminución de las precipitaciones en los próximos años convertirán el agua en un bien escaso y motivo de disputas. En las regiones áridas y semiáridas, como la Comunitat Valenciana, descenderá el nivel de los recursos hídricos y las tensiones que ya existen se verán agravadas.
Los expertos advierten por tanto de que ya se deben tomar medidas para paliar la falta de agua. El director del Instituto Tecnológico del Agua en la Universidad Politécnica de Valencia, Enrique Cabrera, criticó que España todavía está muy lejos de gestionar el agua de una forma integral y eficaz. “El Gobierno debe hacer frente a la escasez teniendo en cuenta las aguas superficiales, las subterráneas y cualquier recurso hídrico disponible, de forma conjunta”.
Entre las medidas que Cabrera reivindica está el incremento en el precio del agua. “El usuario debe saber lo que cuesta, pagar por ello y valorarlo”.
El documento sostiene que se reducirá el nivel de agua disponible, los recursos acuíferos, el turismo estival y, en general, la productividad de las cosechas. Enrique Cabrera cree que, aunque no existe la certeza científica, todo indica que la tendencia es clara: va dirigida a que se reducen las precipitaciones.
El anterior informe cifró en un 30% esa disminución en el Mediterráneo. Cabrera cree que los Gobiernos deben comenzar ya a trabajar para mitigar los efectos de un cambio que muchos científicos califican de devastador. Lo principal es poner en marcha alternativas a la actual gestión del agua.
El gasto hídrico ha crecido de forma imparable en la última década pese a que en los años 90 la Comunitat Valenciana tuvo que hacer frente a una sequía que obligó a restringir el abastecimiento. “Tenemos que ser más conscientes de que la falta de agua es un problema muy grave y que hay que modificar los planteamientos actuales, hacer una reconversión del agua como ya se hizo a nivel industrial”, asegura Cabrera.
María José Sanz, que ha participado en la redacción de los informes de Naciones Unidas, también alerta de que la falta de agua es uno de los principales problemas de la Comunitat en el futuro. “Desde el Centro de Estudios Ambientales hemos estudiado que las consecuencias climáticas van a ser más graves en esta región por el cambio en los usos del suelo”, asegura Sanz.
El turismo, según los expertos, será uno de los sectores más afectados porque con el calentamiento verá reducido su atractivo.