El Ministerio hará un nuevo proyecto para Biscarrués tras un informe jurídico
Mié, 28/03/2007
Un informe de la Abogacía del Estado ha llevado a la Confederación Hidrográfica del Ebro a redactar un nuevo anteproyecto para el embalse de 35 hectómetros cúbicos que se va a construir en el río Gállego a la altura de Biscarrués. Aunque en septiembre del año pasado el Gobierno central y la DGA acordaron aprovechar el documento inicial de 192 hectómetros adaptándolo a las peticiones de la Comisión del Agua, el Ministerio de Medio Ambiente se ha decantado por comenzar una nueva tramitación administrativa alegando las dudas planteadas por sus servicios jurídicos.
Fuentes de la CHE detallaron ayer que el informe, fechado el 11 de enero, se conoció hace mes y medio. Además, explicaron que el organismo de cuenca trabaja ya en la elaboración del nuevo anteproyecto para que pueda estar listo antes de verano. "Se está haciendo con medios propios para agilizarlo al máximo", señalaron.
Sin embargo, y aunque ese plazo se cumpla, el documento resultante todavía tendrá que pasar por varias fases administrativas como la declaración de impacto ambiental y la exposición pública, lo que puede llevar incluso años.
Las cuentas de la ministra
La decisión ya ha sido comunicada a los regantes de Riegos del Alto Aragón, que desde un primer momento rechazaron la redacción de otro anteproyecto alegando que esa opción retrasará en exceso el inicio de las obras de Biscarrués. Sin embargo, Cristina Narbona aseguró en una entrevista concedida a HERALDO el pasado mes de septiembre que elaborar un nuevo documento técnico es más rápido que continuar con la licitación de proyecto y obra adjudicada provisionalmente en el año 2000.
La ministra se basó en el hecho de que, a día de hoy, Biscarrués no tiene un proyecto adjudicado, sino un anteproyecto que antes de recibir el visto bueno definitivo por parte del Ministerio tiene que pasar por una fase "de perfeccionamiento" y otra de exposición pública. "Se tardaría un mínimo de ocho meses antes de poder adjudicar el contrato, y a partir de ahí habría que modificarlo", insistió Narbona. La ministra incluso dio plazos sobre lo que se tardaría en comenzar las obras: 31 meses si se aprovechaba el anteproyecto existente y 28 si se partía de uno nuevo.
A pesar de esas palabras, la presión ejercida por el Gobierno de Aragón hizo que Medio Ambiente accediera a aprovechar el anteproyecto del Biscarrués de 192 hectómetros adaptándolo a las necesidades de la presa de 35. En el acuerdo suscrito por el consejero Alfredo Boné y el presidente de la CHE, José Luis Alonso, ambas instituciones se comprometían a garantizar "la consistencia administrativa y jurídica" de las actuaciones que se lleven a cabo. Esa ha sido la razón alegada ahora por el Ministerio para cambiar de decisión, aunque HERALDO no tuvo acceso ayer al informe de la Abogacía del Estado.
La DGA no está de acuerdo
Quien sí ha recibido el documento es el Departamento de Medio Ambiente. Fuentes de la Consejería que dirige Alfredo Boné explicaron ayer que, tras recibir el informe, los servicios jurídicos del Instituto Aragonés del Agua han remitido al Ministerio de Medio Ambiente un escrito en el que afirman que hacer el embalse de Biscarrués de 35 hectómetros aprovechando el anteproyecto del de 192 es viable tanto técnica como jurídicamente.
"Es legalmente posible y pertinente (...) modificar el proyecto para instrumentar la propuesta de la Comisión del Agua, nunca abandonar el proyecto actual y elaborar uno nuevo partiendo de cero -sostiene el informe del Instituto Aragonés del Agua-. Sería posible la modificación del contrato con carácter previo a la aprobación del proyecto (de 192 hectómetros) para introducir las correcciones técnicas y estudios que justifiquen y proyecten la infraestructura para su ejecución en dos fases".
Con esta última afirmación, el Departamento de Medio Ambiente sigue queriendo dejar abierta una posibilidad que la ministra Narbona descartó rotundamente: que en una segunda fase hoy por hoy muy lejana el embalse de 35 hectómetros pueda recrecerse hasta los 192. Eso es lo que piden los regantes, y Boné ya dejó claro que su postura es la de Riegos del Alto Aragón.
Fuentes de la CHE detallaron ayer que el informe, fechado el 11 de enero, se conoció hace mes y medio. Además, explicaron que el organismo de cuenca trabaja ya en la elaboración del nuevo anteproyecto para que pueda estar listo antes de verano. "Se está haciendo con medios propios para agilizarlo al máximo", señalaron.
Sin embargo, y aunque ese plazo se cumpla, el documento resultante todavía tendrá que pasar por varias fases administrativas como la declaración de impacto ambiental y la exposición pública, lo que puede llevar incluso años.
Las cuentas de la ministra
La decisión ya ha sido comunicada a los regantes de Riegos del Alto Aragón, que desde un primer momento rechazaron la redacción de otro anteproyecto alegando que esa opción retrasará en exceso el inicio de las obras de Biscarrués. Sin embargo, Cristina Narbona aseguró en una entrevista concedida a HERALDO el pasado mes de septiembre que elaborar un nuevo documento técnico es más rápido que continuar con la licitación de proyecto y obra adjudicada provisionalmente en el año 2000.
La ministra se basó en el hecho de que, a día de hoy, Biscarrués no tiene un proyecto adjudicado, sino un anteproyecto que antes de recibir el visto bueno definitivo por parte del Ministerio tiene que pasar por una fase "de perfeccionamiento" y otra de exposición pública. "Se tardaría un mínimo de ocho meses antes de poder adjudicar el contrato, y a partir de ahí habría que modificarlo", insistió Narbona. La ministra incluso dio plazos sobre lo que se tardaría en comenzar las obras: 31 meses si se aprovechaba el anteproyecto existente y 28 si se partía de uno nuevo.
A pesar de esas palabras, la presión ejercida por el Gobierno de Aragón hizo que Medio Ambiente accediera a aprovechar el anteproyecto del Biscarrués de 192 hectómetros adaptándolo a las necesidades de la presa de 35. En el acuerdo suscrito por el consejero Alfredo Boné y el presidente de la CHE, José Luis Alonso, ambas instituciones se comprometían a garantizar "la consistencia administrativa y jurídica" de las actuaciones que se lleven a cabo. Esa ha sido la razón alegada ahora por el Ministerio para cambiar de decisión, aunque HERALDO no tuvo acceso ayer al informe de la Abogacía del Estado.
La DGA no está de acuerdo
Quien sí ha recibido el documento es el Departamento de Medio Ambiente. Fuentes de la Consejería que dirige Alfredo Boné explicaron ayer que, tras recibir el informe, los servicios jurídicos del Instituto Aragonés del Agua han remitido al Ministerio de Medio Ambiente un escrito en el que afirman que hacer el embalse de Biscarrués de 35 hectómetros aprovechando el anteproyecto del de 192 es viable tanto técnica como jurídicamente.
"Es legalmente posible y pertinente (...) modificar el proyecto para instrumentar la propuesta de la Comisión del Agua, nunca abandonar el proyecto actual y elaborar uno nuevo partiendo de cero -sostiene el informe del Instituto Aragonés del Agua-. Sería posible la modificación del contrato con carácter previo a la aprobación del proyecto (de 192 hectómetros) para introducir las correcciones técnicas y estudios que justifiquen y proyecten la infraestructura para su ejecución en dos fases".
Con esta última afirmación, el Departamento de Medio Ambiente sigue queriendo dejar abierta una posibilidad que la ministra Narbona descartó rotundamente: que en una segunda fase hoy por hoy muy lejana el embalse de 35 hectómetros pueda recrecerse hasta los 192. Eso es lo que piden los regantes, y Boné ya dejó claro que su postura es la de Riegos del Alto Aragón.