El regadío del Segura aumenta 78.000 hectáreas de 1984 a 2004, un 8 por ciento menos de lo previsto en el Plan de cuenca
Mié, 28/03/2007
(EUROPA PRESS) -
El área de regadío (la realmente regada) de la cuenca del Segura aumentó unas 78.000 hectáreas en 20 años (de 1984 a 2004), pasando de 166.629 hectáreas a 244.693 (un 47 por ciento más), aunque no alcanzó las 265.000 hectáreas previstas en el Plan Hidrológico de Cuenca, quedándose a 8,2 puntos porcentuales de la previsión, según un estudio de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS)
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), José Salvador Fuentes Zorita, presentó hoy, en rueda de prensa, una estimación de superficies en regadío en la cuenca del Segura, un análisis mediante teledetección de la superficie regada en el periodo 1984-2004.
Los resultados obtenidos detectan un crecimiento de la superficie regada entre 1984 y 2004, que se localiza fundamentalmente en las zonas que se corresponden con la puesta en regadío de los terrenos ligados a las infraestructuras del postrasvase Tajo-Segura: Vegas Alta, Media y Baja (14.730 hectáreas), Campo de Cartagena (23.574 hectáreas) y Suroeste y Valle del Guadalentín (21.037 hectáreas).
El máximo de superficie regada en el periodo analizado se corresponde con 2004, en el que se detectaron 244.689 hectáreas frente a las 265.969 hectáreas que se contemplan en el vigente Plan Hidrológico de la Cuenca del Segura.
En este sentido, Fuentes Zorita reiteró que "el total de la superficie de riego en 2004 (244.689 hectáreas) está por debajo de lo que preveía el Plan Hidrológico de la cuenca del Segura, que se establecía en torno a las 265.000 hectáreas", por lo que "la superficie en regadío real es inferior y está dentro de las previsiones del Plan Hidrológico de Cuenca que fue aprobado en 1999, concretamente es un 92 por ciento de las cifra prevista".
Esta cifra se corresponde estrictamente con el ámbito de planificación de la cuenca del Segura, en el que únicamente no se computa en el análisis la superficie que se atiende a través del acueducto Tajo-Segura en el Bajo Almanzora (Almería).
En el ámbito de la cuenca del Segura se estimó un incremento de la superficie en regadío de 78.064 hectáreas entre 1984 y 2004, lo que supone un incremento del 47 por ciento de la superficie en los 20 años, de las que la mayor parte se corresponden con la puesta en regadío de nuevas superficies o redotación con recursos procedentes del acueducto Tajo-Segura.
En términos absolutos, el mayor incremento de la superficie de regadío corresponde a la Región de Murcia, con 67.791 hectáreas. Este aumento se localiza en las comarcas del Campo de Cartagena (23.574 hectáreas), seguida de Suroeste y Valle del Guadalentín (21.037 nuevas hectáreas) y Río Segura con 14.730 hectáreas. Estas tres comarcas representan el 76 por ciento del incremento total entre 1984 y 2004.
Los términos municipales con mayor incremento de la superficie en regadío son los de Cartagena (9.523 hectáreas), Murcia (6.206), Torre Pacheco (6.177), Fuente Álamo de Murcia (5.874), Alhama de Murcia (5.417), Lorca (4.906), Cieza (4.515), Totana (3.584), Orihuela (Alicante) unos 2.587 hectáreas y Águilas (2.543).
De igual forma, Fuentes Zorita apuntó que los datos de 2006 están siendo analizados, "sobre todo para conocer los efectos que está teniendo la sequía en las áreas de riego", pero aventuró que los datos "no variarán mucho", ya que, explicó, lo que interesa son los máximos, y 2004, desde el punto de vista hidrográfico, "no fue malo, tanto para la cuenca del Segura como para la cabecera del Tajo".
De hecho, defendió que "apenas se ha notado la sequía en el área de regadío real, debido al esfuerzo realizado en los primeros años de sequía, buscando alternativas", pero "probablemente se empiece a notar los efectos en el tercer año de sequía, que es este en el que nos encontramos", auguró.
PROGRAMA ALBERCA
El presidente de la CHS aclaró que con este estudio se ha determinado el número de hectáreas de regadío real hay en la cuenca, pero ahora hay que comprobar "si todo lo que se ha regado tiene título para ser regado, y de eso se encarga el Programa Alberca".
Fuentes Zorita apuntó que Comisaría de Aguas está desarrollando "un ambicioso programa, el denominado 'Alberca', en el que hemos invertido 2,5 millones de euros entre 2004-06 y en el que pensamos invertir tres millones de euros más entre 2007-09".
Con este programa, continuó, "hemos procedido a identificar varios miles de aprovechamientos, más de 2.600 inspecciones 'in situ' en la cuenca, que llevamos el 70 por ciento analizados de expedientes, fundamentalmente de aguas subterráneas" y será ese programa el que dará "la imagen de cuál es la situación legal de cada una de estas hectáreas en regadío".
No obstante, reconoció que "existen regadíos ilegales" en la cuenca, y lo demuestra "los expedientes enviados a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia, lo que ocurre que hay que saber cuál es la magnitud de esa ilegalidad", argumentó.
EL ESTUDIO
El estudio se enmarca dentro de las estimaciones previas que se están llevando a cabo para el nuevo proceso de planificación hidrológica iniciado bajo los principios que determina la Directiva Marco del Agua.
Así, estos trabajos se realizan, explicó el encargado de llevarlo a cabo, Salomón Montesinos, doctor en Ingeniería Geológica por la Universidad Complutense y director general de Geocys, empresa especializada en sistemas de información geográfica aplicada a recursos hídricos, utilizando la respuesta al infrarrojo que se capta mediante los sensores instalados en el satélite Landsat.
De esta forma, los cultivos con un alto vigor vegetal son detectados, pudiendo determinar la superficie de los terrenos que en ese momento están cultivados.
En este sentido, explicó que dado que a lo largo de un año los cultivos hortícolas presentan una importante rotación, se han realizado cuatro imágenes por año, lo que supone poder cubrir la mayoría de los periodos de desarrollo vital que se dan en los citados cultivos.
Montesinos comentó que se realizaron cuatro fotos por año, ya que "si echamos la foto en verano sólo se refleja lo que se está regando en ese periodo, por lo que la superficie en regadío es el sumatorio de esas cuatro áreas regadas a lo largo del año", señaló.
En 1984 en la totalidad de la cuenca se detectaron 166.629 hectáreas y en 2004 244.693 hectáreas, lo que supone un incremento de 78.000 hectáreas en ese periodo en lo que es una superficie de regadío para lo que es una superficie regable de 354.864 hectáreas.
Sobre este punto, diferenció entre terrenos que potencialmente pueden estar en regadío, es lo que denominó áreas regables (las 354.864 hectáreas), frente a los terrenos que realmente demandan agua porque en ese momento están cultivando las 244.693 hectáreas en 2004).
Esta actuación, junto con las iniciativas del Proyecto Alberca, realizado por la Comisaría de Aguas, va a permitir identificar todas las parcelas regables sobre un sistema e información geográfica, cuyo análisis permitirá un mejor conocimiento de la demanda agraria actual de cara a la redacción del nuevo Plan Hidrológico, que ha iniciado la CHS.
El área de regadío (la realmente regada) de la cuenca del Segura aumentó unas 78.000 hectáreas en 20 años (de 1984 a 2004), pasando de 166.629 hectáreas a 244.693 (un 47 por ciento más), aunque no alcanzó las 265.000 hectáreas previstas en el Plan Hidrológico de Cuenca, quedándose a 8,2 puntos porcentuales de la previsión, según un estudio de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS)
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), José Salvador Fuentes Zorita, presentó hoy, en rueda de prensa, una estimación de superficies en regadío en la cuenca del Segura, un análisis mediante teledetección de la superficie regada en el periodo 1984-2004.
Los resultados obtenidos detectan un crecimiento de la superficie regada entre 1984 y 2004, que se localiza fundamentalmente en las zonas que se corresponden con la puesta en regadío de los terrenos ligados a las infraestructuras del postrasvase Tajo-Segura: Vegas Alta, Media y Baja (14.730 hectáreas), Campo de Cartagena (23.574 hectáreas) y Suroeste y Valle del Guadalentín (21.037 hectáreas).
El máximo de superficie regada en el periodo analizado se corresponde con 2004, en el que se detectaron 244.689 hectáreas frente a las 265.969 hectáreas que se contemplan en el vigente Plan Hidrológico de la Cuenca del Segura.
En este sentido, Fuentes Zorita reiteró que "el total de la superficie de riego en 2004 (244.689 hectáreas) está por debajo de lo que preveía el Plan Hidrológico de la cuenca del Segura, que se establecía en torno a las 265.000 hectáreas", por lo que "la superficie en regadío real es inferior y está dentro de las previsiones del Plan Hidrológico de Cuenca que fue aprobado en 1999, concretamente es un 92 por ciento de las cifra prevista".
Esta cifra se corresponde estrictamente con el ámbito de planificación de la cuenca del Segura, en el que únicamente no se computa en el análisis la superficie que se atiende a través del acueducto Tajo-Segura en el Bajo Almanzora (Almería).
En el ámbito de la cuenca del Segura se estimó un incremento de la superficie en regadío de 78.064 hectáreas entre 1984 y 2004, lo que supone un incremento del 47 por ciento de la superficie en los 20 años, de las que la mayor parte se corresponden con la puesta en regadío de nuevas superficies o redotación con recursos procedentes del acueducto Tajo-Segura.
En términos absolutos, el mayor incremento de la superficie de regadío corresponde a la Región de Murcia, con 67.791 hectáreas. Este aumento se localiza en las comarcas del Campo de Cartagena (23.574 hectáreas), seguida de Suroeste y Valle del Guadalentín (21.037 nuevas hectáreas) y Río Segura con 14.730 hectáreas. Estas tres comarcas representan el 76 por ciento del incremento total entre 1984 y 2004.
Los términos municipales con mayor incremento de la superficie en regadío son los de Cartagena (9.523 hectáreas), Murcia (6.206), Torre Pacheco (6.177), Fuente Álamo de Murcia (5.874), Alhama de Murcia (5.417), Lorca (4.906), Cieza (4.515), Totana (3.584), Orihuela (Alicante) unos 2.587 hectáreas y Águilas (2.543).
De igual forma, Fuentes Zorita apuntó que los datos de 2006 están siendo analizados, "sobre todo para conocer los efectos que está teniendo la sequía en las áreas de riego", pero aventuró que los datos "no variarán mucho", ya que, explicó, lo que interesa son los máximos, y 2004, desde el punto de vista hidrográfico, "no fue malo, tanto para la cuenca del Segura como para la cabecera del Tajo".
De hecho, defendió que "apenas se ha notado la sequía en el área de regadío real, debido al esfuerzo realizado en los primeros años de sequía, buscando alternativas", pero "probablemente se empiece a notar los efectos en el tercer año de sequía, que es este en el que nos encontramos", auguró.
PROGRAMA ALBERCA
El presidente de la CHS aclaró que con este estudio se ha determinado el número de hectáreas de regadío real hay en la cuenca, pero ahora hay que comprobar "si todo lo que se ha regado tiene título para ser regado, y de eso se encarga el Programa Alberca".
Fuentes Zorita apuntó que Comisaría de Aguas está desarrollando "un ambicioso programa, el denominado 'Alberca', en el que hemos invertido 2,5 millones de euros entre 2004-06 y en el que pensamos invertir tres millones de euros más entre 2007-09".
Con este programa, continuó, "hemos procedido a identificar varios miles de aprovechamientos, más de 2.600 inspecciones 'in situ' en la cuenca, que llevamos el 70 por ciento analizados de expedientes, fundamentalmente de aguas subterráneas" y será ese programa el que dará "la imagen de cuál es la situación legal de cada una de estas hectáreas en regadío".
No obstante, reconoció que "existen regadíos ilegales" en la cuenca, y lo demuestra "los expedientes enviados a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia, lo que ocurre que hay que saber cuál es la magnitud de esa ilegalidad", argumentó.
EL ESTUDIO
El estudio se enmarca dentro de las estimaciones previas que se están llevando a cabo para el nuevo proceso de planificación hidrológica iniciado bajo los principios que determina la Directiva Marco del Agua.
Así, estos trabajos se realizan, explicó el encargado de llevarlo a cabo, Salomón Montesinos, doctor en Ingeniería Geológica por la Universidad Complutense y director general de Geocys, empresa especializada en sistemas de información geográfica aplicada a recursos hídricos, utilizando la respuesta al infrarrojo que se capta mediante los sensores instalados en el satélite Landsat.
De esta forma, los cultivos con un alto vigor vegetal son detectados, pudiendo determinar la superficie de los terrenos que en ese momento están cultivados.
En este sentido, explicó que dado que a lo largo de un año los cultivos hortícolas presentan una importante rotación, se han realizado cuatro imágenes por año, lo que supone poder cubrir la mayoría de los periodos de desarrollo vital que se dan en los citados cultivos.
Montesinos comentó que se realizaron cuatro fotos por año, ya que "si echamos la foto en verano sólo se refleja lo que se está regando en ese periodo, por lo que la superficie en regadío es el sumatorio de esas cuatro áreas regadas a lo largo del año", señaló.
En 1984 en la totalidad de la cuenca se detectaron 166.629 hectáreas y en 2004 244.693 hectáreas, lo que supone un incremento de 78.000 hectáreas en ese periodo en lo que es una superficie de regadío para lo que es una superficie regable de 354.864 hectáreas.
Sobre este punto, diferenció entre terrenos que potencialmente pueden estar en regadío, es lo que denominó áreas regables (las 354.864 hectáreas), frente a los terrenos que realmente demandan agua porque en ese momento están cultivando las 244.693 hectáreas en 2004).
Esta actuación, junto con las iniciativas del Proyecto Alberca, realizado por la Comisaría de Aguas, va a permitir identificar todas las parcelas regables sobre un sistema e información geográfica, cuyo análisis permitirá un mejor conocimiento de la demanda agraria actual de cara a la redacción del nuevo Plan Hidrológico, que ha iniciado la CHS.