La Confederación Hidrográfica del Segura abre 567 expedientes sancionadores en 2006
Mié, 21/02/2007
(EUROPA PRESS)
La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) abrió durante 2006 un total de 567 expedientes sancionadores, de los que ha resuelto 346 y se encuentran en tramitación 221, todos ellos (son los más recientes) dentro de plazo y que se resolverán este mismo año, evitándose cualquier posible caducidad en la actividad sancionadora y, por consiguiente, el riesgo de impunidad.
En total, la CHS ha resuelto 540 expedientes durante 2006 (los citados 346 correspondientes a 2006 y 194 de los iniciados en 2005), por lo que continúa la línea de actuación emprendida por la actual dirección del organismo para que no caduque ninguno de ellos, según informó el organismo de cuenca en una nota de prensa.
Por tipologías, la CHS abrió en 2006 expedientes por construcción y explotación de pozos (99); riego ilegal (56); vertido a cauces (93); depósitos de escombros o inertes (15); obras y ocupación de cauces (177) y por otros motivos (127).
En el capítulo de otros motivos se incluyen acciones como el incumplimiento de una resolución, desobediencia a requerimientos, incumplimiento de condiciones, extracción de áridos, derivación de aguas, modificación de características, depósitos ilegales, y modificación de la "fase atmosférica".
Por categorías, el organismo de cuenca incoó 408 expedientes leves y 147 menos graves, en ambas categorías son resueltos por la propia CHS; once graves, que se remiten a la Ministra de Medio Ambiente; y uno muy grave, que debe ser resuelto por el Consejo de Ministros.
De los 12 expedientes graves o muy graves, cuatro fueron abiertos por "explotación de pozos"; cuatro por "riegos ilegales"; y cuatro más por incumplimiento de las obligaciones ("derivar más agua de la permitida").
Además, 34 expedientes han sido remitidos por la CHS a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Murcia, por si los hechos denunciados fuesen constitutivos de delito, de acuerdo con lo establecido en el Código Penal.
UNOS 560.000 EUROS
Durante 2006, los infractores han debido abonar a la CHS un total de 560.119 euros, que se desglosan en concepto de daños al Dominio Público Hidráulico (DPH) --30.140 euros-- y de sanciones, 530.078 euros. Esta cantidad se reinvierte íntegramente en acciones por parte de la CHS para la recuperación medioambiental del DPH.
El control sobre el DPH, unido a las medidas ejemplarizantes adoptadas por la CHS ha ido calando en los posibles infractores, detectándose una disminución de las irregularidades graves a pesar de la delicada situación que atraviesa la Cuenca en su tercer año consecutivo de grave sequía hidrológica.
El presidente de la CHS, José Salvador Fuentes Zorita, mostró su reconocimiento a los colectivos y organismos, las propias Comunidades de Regantes, el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil, Policías Municipales, entre otros, que han colaborado a la hora de denunciar cualquier tipo de actividad irregular en la cuenca del Segura, lo que permite, junto con la labor exhaustiva de la Guardería Fluvial de la CHS, realizar un control efectivo y real del DPH, tanto más necesaria en la situación actual.
La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) abrió durante 2006 un total de 567 expedientes sancionadores, de los que ha resuelto 346 y se encuentran en tramitación 221, todos ellos (son los más recientes) dentro de plazo y que se resolverán este mismo año, evitándose cualquier posible caducidad en la actividad sancionadora y, por consiguiente, el riesgo de impunidad.
En total, la CHS ha resuelto 540 expedientes durante 2006 (los citados 346 correspondientes a 2006 y 194 de los iniciados en 2005), por lo que continúa la línea de actuación emprendida por la actual dirección del organismo para que no caduque ninguno de ellos, según informó el organismo de cuenca en una nota de prensa.
Por tipologías, la CHS abrió en 2006 expedientes por construcción y explotación de pozos (99); riego ilegal (56); vertido a cauces (93); depósitos de escombros o inertes (15); obras y ocupación de cauces (177) y por otros motivos (127).
En el capítulo de otros motivos se incluyen acciones como el incumplimiento de una resolución, desobediencia a requerimientos, incumplimiento de condiciones, extracción de áridos, derivación de aguas, modificación de características, depósitos ilegales, y modificación de la "fase atmosférica".
Por categorías, el organismo de cuenca incoó 408 expedientes leves y 147 menos graves, en ambas categorías son resueltos por la propia CHS; once graves, que se remiten a la Ministra de Medio Ambiente; y uno muy grave, que debe ser resuelto por el Consejo de Ministros.
De los 12 expedientes graves o muy graves, cuatro fueron abiertos por "explotación de pozos"; cuatro por "riegos ilegales"; y cuatro más por incumplimiento de las obligaciones ("derivar más agua de la permitida").
Además, 34 expedientes han sido remitidos por la CHS a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Murcia, por si los hechos denunciados fuesen constitutivos de delito, de acuerdo con lo establecido en el Código Penal.
UNOS 560.000 EUROS
Durante 2006, los infractores han debido abonar a la CHS un total de 560.119 euros, que se desglosan en concepto de daños al Dominio Público Hidráulico (DPH) --30.140 euros-- y de sanciones, 530.078 euros. Esta cantidad se reinvierte íntegramente en acciones por parte de la CHS para la recuperación medioambiental del DPH.
El control sobre el DPH, unido a las medidas ejemplarizantes adoptadas por la CHS ha ido calando en los posibles infractores, detectándose una disminución de las irregularidades graves a pesar de la delicada situación que atraviesa la Cuenca en su tercer año consecutivo de grave sequía hidrológica.
El presidente de la CHS, José Salvador Fuentes Zorita, mostró su reconocimiento a los colectivos y organismos, las propias Comunidades de Regantes, el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil, Policías Municipales, entre otros, que han colaborado a la hora de denunciar cualquier tipo de actividad irregular en la cuenca del Segura, lo que permite, junto con la labor exhaustiva de la Guardería Fluvial de la CHS, realizar un control efectivo y real del DPH, tanto más necesaria en la situación actual.