Las lluvias caídas durante la noche del viernes y el sábado en Cartagena provocaron varios problemas de tráfico en diferentes puntos de la ciudad, así como pequeñas inundaciones de viviendas, garajes y la caída de algunos árboles por diferentes puntos del término municipal.
Por la mañana, la ciudad quedó colapsada por las intensas lluvias, el fuerte viento y los cortes de varias carreteras. La zona más afectada volvió a concentrarse en torno a las calles aledañas a la rambla de Los Dolores, a la altura de los barrios de Cartagena y la Urbanización Mediterráneo, que permanecieron cerradas al tráfico hasta el mediodía.
Los afectados pasaron la mayor parte de la noche sin dormir mientras veían cómo la rambla se desbordaba a primeras horas de la mañana. «Se nos ha vuelto a inundar el barrio y esto es intolerable. No podemos ni salir a la calle», explicó Juan Antonio Conesa, un vecino de Nueva Cartagena.
Además, la carretera Francisco Martínez, desde el Bohío hasta Santa Ana, tuvo que ser cortada durante toda la mañana al tráfico hasta las 13.00 horas por la intensa lluvia.

64 litros

Bomberos, Policía Local y Protección Civil trabajaron intensamente para la seguridad en una zona que, según el Centro Regional de Meteorología, llegó a acumular 64 litros por metro cuadrado en algunas zonas.
De hecho, desde primeras horas de la mañana los efectivos del parque de bomberos de Cartagena efectuaron 20 salidas, la mayoría para achicar agua. Además, hubo cortes de luz intermitentes durante la madrugada y la mañana en todo el término municipal