El alcalde de Daimiel anuncia una moción para pedir un trasvase a Las Tablas

Mié, 03/01/2007

ABC

Los alcaldes de las localidades ciudadrealeñas de Daimiel y Villarrubia de los Ojos, José Díaz del Campo y Fernando García Santos, respectivamente, presentarán una moción institucional para solicitar de nuevo un trasvase para el Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel, con el objetivo de reforzar las peticiones, ya planteadas por el Patronato del parque y la Comisión Mixta de Gestión de Parques Nacionales de Castilla-La Mancha, al Ministerio de Medio Ambiente. Díaz del Campo afirmó, a través de un comunicado, que no es contrario al trasvase -aprobado en el último Consejo de Ministros- de 12 hectómetros cúbicos para garantizar el consumo humano en la Cuenca del Segura, pero exigió que «si hay agua también llegue al humedal». En este sentido, añadió que Las Tablas necesitan «solución más global y universal», más allá de ir adquiriendo terrenos próximos al Parque para incrementar el número de hectáreas e ir comprando los derechos compartidos de agua que tienen esas tierras.
La economía, en juego
Pese a que desde el Ministerio dirigido por Cristina Narbona se está actuando en esa línea, el primer edil de Daimiel destacó que la regeneración de infraestructuras es otro apartado importante en el que se está trabajando desde el Plan Especial del Alto Guadiana, aunque necesita de las derivaciones del trasvase. Así, según recordó durante una rueda de prensa celebrada la semana pasada junto con García Santos, Las Tablas no reciben agua desde el año 2004, pero, desde octubre de 2005, se han trasvasado 210 hectómetros cúbicos a Murcia. «Una parte proporcional del agua trasvasada debe ir dirigida al medio ambiente y la ecología», manifestó al respecto el alcalde de Daimiel, quien añadió que Las Tablas necesitan agua porque «se trata de un recurso económico para la zona», ya que hay muchas empresas de servicios turísticos que trabajan en el marco del parque nacional. No obstante, Díaz del Campo reconoció que las decisiones en esta cuestión son muy difíciles de tomar, «partiendo de la base de que la cabecera del Tajo se encuentra en los límites mínimos legales que tiene establecidos para poder trasvasar agua», cuyo destino debe ser el consumo humano, aspecto que, según dijo, «debe de tener en cuenta cualquier persona que se encargue de la gestión política». Por último, el primer edil resaltó que «el agua que va a llegar a Murcia debe ir destinada al abastecimiento humano» y reclamó que «no se especule con ella».