La jornada internacional "El agua, una responsabilidad compartida", que se ha celebrado en Zaragoza, con motivo del lanzamiento de la versión en español del II Informe de Naciones Unidas sobre el desarrollo de los recursos hídricos en el mundo, ha permitido comprobar la situación del agua en el mundo en sus múltiples aspectos.


Este informe define los puntos de atención en la estrategia por el uso más sostenible del agua. Los ponentes los han situado en diferentes lugares del mundo. El debate no se agota, ya que éste es un proceso interactivo que debe adaptarse con flexibilidad a las incertidumbres ligadas a la crisis del agua, subrayan desde Expo Zaragoza 2008.


En cuanto a la gobernabilidad, los problemas claves y comunes que se han extraído en estas jornadas, a pesar de las diferencias en los sustratos ecogeográficos, culturales, políticos, sociales y económicos en los diferentes países, son varios.


Uno de ellos, ha sido la protección de las condiciones para la vida, ya sea el medio ambiente considerado como usuario o bien como requisito previo para la vida; el derecho universal al acceso al agua a través de políticas con soluciones diversas en el espacio y en el tiempo: sistema flexible para abordar las incertidumbres de orden cultural o debidos al cambio climático.


Asimismo, otro de los problemas es la creación de instrumentos legales e institucionales para la gestión; el desarrollo de infraestructuras y recursos financieros; la oportunidad para el desarrollo a través de la cooperación, la implicación responsable de todos los actores, y la incorporación de las tecnologías y el conocimiento. Para ello, se debe centrar las unidades de gestión en las cuencas, que es la base del sistema natural hídrico.


Por ello, en las jornadas se han propuesto unos determinados desafíos como mantener las condiciones para la vida y cerrar los ciclos hidrológicos que la propician; garantizar el acceso al agua potable, que aún no es universal, especialmente en el mundo rural y el hábitat disperso; procurar la extensión y generalización del saneamiento y reducir los problemas de contaminación del agua.


Así como introducir criterios de racionalidad económica más allá de los ciclos políticos y hacer "obras que no se ven y no se pueden inaugurar", como la modernización de las conducciones para evitar pérdidas, o los mecanismos para afrontar fenómenos extremos agravados por el cambio climático.


Otro de los desafíos es incorporar nuevas tecnologías y modelos de gestión más eficientes y sostenibles e incrementar el conocimiento con información suficiente y accesible.


CRITERIOS GENERALES


Como criterios generales se ha concluido implementar una gestión del agua integrada y sostenible con la gestión del territorio y el urbanismo; reducir la dependencia externa, moderar el consumo e incentivar el ahorro incluso en situación de abundancia como es el caso de la cuenca del Plata.


Además de coordinar eficientemente el entramado institucional de competencias. Como se ha dicho, el agua no conoce límites administrativos e institucionales y como servicio está sujeto a economías de escala.


También redistribuir el agua, recurso único, según criterios de equidad, eficiencia y sostenibilidad y tomar decisiones políticas y legislativas de forma transparente y hacer a los ciudadanos corresponsales de las mismas.


COMPROMISO DE LA EXPO ZARAGOZA 2008


Para que la gobernabilidad sea efectiva, debates expertos como éste deben llegar al gran público. Éste es uno de los objetivos principales de la Tribuna del Agua, que como pilar básico de la Expo 2008, utilizará el mayor acto público de diplomacia mundial, como se ha definido, para proyectar al mundo desde Zaragoza el compromiso por la innovación para la sostenibilidad de los recursos hídricos.


La Tribuna del Agua y su Plataforma de Información y comunicación, las exposiciones, los espectáculos se han concebido con este objetivo.


Una de las frases pronunciadas en estas jornadas resume bien este espíritu de la Expo: "Los problemas del agua deben ser vistos como una oportunidad para encontrar soluciones innovadoras, también en la participación e implicación de la ciudadanía".


GOBERNABILIDAD


Es un proceso que se puede representar en un diagrama complejo, en el que deben estar representados todos los actores y flujos que intervienen. Toda la sociedad está implicada. Los ciudadanos deben estar conectados e informados de las decisiones que se toman y por tanto implicados.


Los problemas de gobernabilidad del agua no dejan de ser la punta del iceberg de problemas de gobernabilidad más generales y de problemas sociales más profundos tanto en países desarrollados con en países en vías de desarrollo.


La mejora de la gobernabilidad es un reto y una responsabilidad global. Los Objetivos del Milenio son una respuesta a esta responsabilidad global y el uso de indicadores asociados al agua permiten valorar su evolución, informan desde Expo Zaragoza 2008 acerca de las conclusiones de estas jornadas.


RESPUESTAS A LOS DESAFÍOS


En la aplicación de soluciones se ha podido ver estudios de casos interesantes en América Latina y en España que permiten aprender unos de otros. Según las conclusiones extraídas de las jornadas "El agua, una responsabilidad compartida", no hay una respuesta única a los mismos desafíos sino que el sustrato ecogeográfico, cultural, económico, social y político debe ser considerado.


Uno de los desafíos de las jornadas es repensar e innovar, que significa en ocasiones recuperar sistemas más sostenibles del pasado, incluso milenarios (la recogida de agua de lluvia, que se está implantando en el norte de Europa, en los países más avanzados, y que encontramos ya en civilizaciones prehispánicas de América Latina).