Narbona asegura que las obras del trasvase Júcar-Vinalopó podrán estar terminadas 'antes de final de 2008'

Jue, 30/11/2006

Europa Press

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, aseguró hoy que las obras del trasvase Júcar-Vinalopó van "muy bien", lo cual la permitió avanzar que podrán estar terminadas "antes de final del año 2008". Respondió así a una pregunta parlamentaria de la diputada del Grupo Socialista, Juana Serna, quien se interesó sobre el desarrollo de las obras del trasvase Júcar-Vinalopó.


Así, explicó que, de los tramos que en estos momentos están en construcción -que suponen "que ya se ha ejecutado más de 108 millones de euros"- están en porcentajes avanzados. Según dijo, el tramo 5 está en un 91 por ciento; el tramo 6 en un 89 y el 7 en un 90,5 por ciento.


La diputada, por su parte, celebró que la Unión Europea vaya a dar la razón al Gobierno en el nuevo trazado del trasvase, decidido en Consejo de Ministros en marzo de este año, por entender, según sus palabras, que "garantiza de mejor manera el caudal ecológico".


Respecto a esta cuestión, Narbona apuntó que las empresas que se han presentado para la adjudicación de la obra de este nuevo diseño tienen hasta mañana para presentar sus ofertas concretas y, por tanto, "a partir de ahí se podrán adjudicar definitivamente estas obras y cumplir con el horizonte temporal", así como con el compromiso de poder aportar "hasta 80 hectómetros" cúbicos al Vinalopó, para resolver problemas que están causando una "gravísima sobre explotación de los acuíferos de la zona".


"Para contar con el apoyo de la UE es preciso tener en cuenta que el agua de los ríos no se tira al mar, que tiene que llegar en suficiente cantidad al mar como para mantener los equilibrios ecológicos, algo que no cumplía, por ejemplo, el derogado trasvase del Ebro, que tuvo toda una serie de informes negativos por parte de la Comisión Europea", explicó.


La ministra destacó, además, que está "completamente de acuerdo" con el PP cuando presenta un decálogo y dice a propósito de los trasvases que hay que tener en cuenta los usos preferentes de la cuenca cedente. Afirmó, por tanto, que no podrá haber trasvases en España "de aquí en adelante" si no hay un "acuerdo social pleno" con los usuarios de la cuenca cedente. A su juicio, "eso es, exactamente, lo que este Gobierno ha conseguido en la cuenca del Júcar".


Finalmente, indicó que para poder llevar a cabo los trasvases tienen que ser viables desde el punto de "vista técnico, económico y ambiental", pero también desde el "punto de vista social". "Eso es exactamente lo que se nos está reconociendo en el ámbito europeo", sentenció.