El temporal de lluvia y viento provoca inundaciones y cortes de luz en el norte.
Dom, 26/11/2006
Dos personas tuvieron que ser rescatadas en Salamanca cuando se encontraban aferradas a un árbol porque el río Tormes arrastró su coche Tráfico recomienda máxima prudencia en los desplazamientos COLPISA/VALLADOLID
El temporal de lluvias dejó a su paso por la mitad norte peninsular localidades inundadas y provocó numerosos cortes de luz y de carreteras. Castilla y León ha sido la comunidad más afectada, aunque las riadas también se dejaron sentir en Galicia, Asturias y norte de Extremadura.
A lo largo de la jornada del sábado las lluvias y el fuerte viento comenzaron a remitir, pero la situación era todavía muy complicada en el barrio de El Puente, en Ciudad Rodrigo (Salamanca), donde 25 familias tuvieron que ser desalojadas el viernes por la noche debido al desbordamiento del río Águeda.
Los vecinos trataron de salvar la mayor parte de sus pertenencias, pero los electrodomésticos, muebles y camas, de las viviendas más próximas al cauce quedaron arrasados por la inundación. Una treintena de personas tuvieron que ser alojadas en un colegio público de la localidad.
A primeras horas de la tarde de ayer sábado, el agua cortaba todavía tres calles. Sin embargo, la bajada del nivel había permitido abrir al tráfico la carretera que une Ciudad Rodrigo con la localidad de Sanjuanejo.
Dos rescatados
Asimismo, en Salamanca, dos personas tuvieron que ser rescatadas en la comarca de Los Arribes del Duero, cuando se aferraban a un árbol, después que su coche fuera arrastrado por la fuerza de las aguas desbordadas del río Tormes.
Los equipos de Protección Civil también tuvieron que emplearse a fondo en las provincias de León y Zamora, donde los desbordamiento y las caídas de árboles estuvieron a la orden del día.
La inundaciones volvieron a repetirse, una jornada más, en los municipios costeros de Galicia. En esta comunidad se recogieron cantidades de agua que rondaron los 70 litros por metro cuadrado. Una de las localidades más afectadas por las riadas fue Noia, en La Coruña, donde los vecinos tuvieron de nuevo que achicar agua de bajos y garajes.
En el País Vasco, comerciantes y particulares trataban que calcular los daños producidos por el apagón que desde las 23,00 horas del viernes afectaba a amplias zonas de la provincia de Vizcaya. El fuerte viento había derribado tendidos eléctricos, lo que dejó sin servicio a unos 14.000 abonados.
Pese a los trabajos de los operarios, a media mañana continuaban sin suministro unos 3.000 usuarios en la comarca del Duranguesado. El apagón también afectó a unos 200 abonados en la localidad alavesa de Luyando. Fuentes de la Dirección General de Tráfico (DGT) recomendaron máxima prudencia para circular por las carreteras de la mitad norte ante la acumulación de agua en los arcenes. A media tarde del sábado sólo estaba cortada al tráfico la carrera EP-0018, en el término municipal de Pontevedra.
El temporal de lluvias dejó a su paso por la mitad norte peninsular localidades inundadas y provocó numerosos cortes de luz y de carreteras. Castilla y León ha sido la comunidad más afectada, aunque las riadas también se dejaron sentir en Galicia, Asturias y norte de Extremadura.
A lo largo de la jornada del sábado las lluvias y el fuerte viento comenzaron a remitir, pero la situación era todavía muy complicada en el barrio de El Puente, en Ciudad Rodrigo (Salamanca), donde 25 familias tuvieron que ser desalojadas el viernes por la noche debido al desbordamiento del río Águeda.
Los vecinos trataron de salvar la mayor parte de sus pertenencias, pero los electrodomésticos, muebles y camas, de las viviendas más próximas al cauce quedaron arrasados por la inundación. Una treintena de personas tuvieron que ser alojadas en un colegio público de la localidad.
A primeras horas de la tarde de ayer sábado, el agua cortaba todavía tres calles. Sin embargo, la bajada del nivel había permitido abrir al tráfico la carretera que une Ciudad Rodrigo con la localidad de Sanjuanejo.
Dos rescatados
Asimismo, en Salamanca, dos personas tuvieron que ser rescatadas en la comarca de Los Arribes del Duero, cuando se aferraban a un árbol, después que su coche fuera arrastrado por la fuerza de las aguas desbordadas del río Tormes.
Los equipos de Protección Civil también tuvieron que emplearse a fondo en las provincias de León y Zamora, donde los desbordamiento y las caídas de árboles estuvieron a la orden del día.
La inundaciones volvieron a repetirse, una jornada más, en los municipios costeros de Galicia. En esta comunidad se recogieron cantidades de agua que rondaron los 70 litros por metro cuadrado. Una de las localidades más afectadas por las riadas fue Noia, en La Coruña, donde los vecinos tuvieron de nuevo que achicar agua de bajos y garajes.
En el País Vasco, comerciantes y particulares trataban que calcular los daños producidos por el apagón que desde las 23,00 horas del viernes afectaba a amplias zonas de la provincia de Vizcaya. El fuerte viento había derribado tendidos eléctricos, lo que dejó sin servicio a unos 14.000 abonados.
Pese a los trabajos de los operarios, a media mañana continuaban sin suministro unos 3.000 usuarios en la comarca del Duranguesado. El apagón también afectó a unos 200 abonados en la localidad alavesa de Luyando. Fuentes de la Dirección General de Tráfico (DGT) recomendaron máxima prudencia para circular por las carreteras de la mitad norte ante la acumulación de agua en los arcenes. A media tarde del sábado sólo estaba cortada al tráfico la carrera EP-0018, en el término municipal de Pontevedra.