Ecologistas en Acción considera la proliferación del mejillón cebra una de las mayores amenazas ecológicas

Sáb, 23/09/2006

Europa Press

La organización Ecologistas en Acción advirtió hoy de la gravedad que la colonización del mejillón cebra de todas las cuencas peninsulares tendría para nuestros ecosistemas fluviales, ante el fracaso de las medidas preventivas adoptadas para evitar la expansión del mejillón cebra, y el incremento del área de distribución del mismo en las cuencas del Ebro y del Júcar.
Ecologistas en Acción reclamó que la reunión del próximo martes entre los Consejeros de Medio Ambiente de las Comunidades Autónomas, hasta ahora afectadas, y el Ministerio de Medio Ambiente acuerde la elaboración, de forma participativa, de una estrategia estatal, para frenar la expansión de la especie en las cuencas del Ebro y del Júcar, y evitar su colonización de otras cuencas.
Además de forma urgente se deben endurecer, según los ecologistas, las actuales medidas de prevención, aumentar el control de la zona para asegurar su cumplimiento, e intensificar los esfuerzos de vigilancia y seguimiento en toda la cuenca del Ebro y del Júcar.
Desde que en agosto de 2001 se detectó la presencia del mejillón cebra (Dreissena polymorpha) en el bajo Ebro (Cataluña), entre Xerta y el embalse de Ribarroja, esta especie se ha extendido y se ha convertido en una de las introducciones de especies exóticas mas peligrosas en nuestro país. Se trata de un molusco de agua dulce originario de los mares Negro y Caspio, cuya presencia en el Ebro está confirmada desde el año 2001, y que reduce mucho la concentración de fitoplancton, del que depende la cadena trófica en los ríos. Además, produce una gran deposición de materia orgánica, lo que favorece el crecimiento de algas y bacterias perjudiciales. Por si fuera poco, su alta tasa reproductiva hace que sus poblaciones causen grandes problemas en todo tipo de infraestructuras hidráulicas.
El pasado 13 de septiembre se confirmó la presencia de larvas de esta especie invasora en el meandro de Ranillas (Zaragoza), donde se ha comprobado la concentración de 0,65 larvas por litro, lo que significa que existe al menos una población de ejemplares adultos instalada en algún punto aguas arriba de Zaragoza.
Más recientemente se ha constatado también la presencia de mejillón cebra adulto en el embalse de Sobrón, en la provincia de Burgos y aguas abajo del mismo, y en el salto hidroeléctrico de Puentelarrá, en Álava.
Ecologistas en Acción considera que este 'salto' de 100 kilómetros del mejillón cebra en la cuenca del Ebro supone el fracaso de las medidas adoptadas, siendo lo mas probable que esta propagación se haya debido al transporte de alguna embarcación o de algún equipo de pesca.
Pero no es solo la cuenca del Ebro la afectada, en septiembre de 2005 se detectaron los primeros ejemplares en la cuenca del Júcar, concretamente en el pantano de Sitjar, en Onda (Castelló). Posteriormente se ha detectado un aumento de la población de mejillón cebra en dicho embalse en el último año y recientemente los mejillones se han extendido al embalse de Santa Quitèria, en Vila-real, amenazando por tanto a todo el río Mijares.