Los trabajos de extracción de los 700.000 metros cúbicos de residuos tóxicos vertidos durante años al embalse de Flix (Ribera d'Ebre) por la empresa Erkimia se iniciarán antes del verano del año que viene. La operación tiene un presupuesto inicial de 155 millones de euros, que será sufragado por el Ministerio de Medio Ambiente. Así lo aseguró el consejero de Medio Ambiente, Francesc Baltasar, quien añadió que desde el pasado mes de julio ya se están extrayendo muestras de residuos para realizar pruebas piloto de los tratamientos que se van a seguir.
La comisión de seguimiento para la descontaminación del embalse de Flix aprobó el pasado mes de octubre la retirada total de los residuos que yacen en el lecho del pantano. Desde entonces, la sociedad Getinsa-Geocisa ha elaborado un proyecto de obras para la extracción de los vertidos. El director técnico del departamento de Hidráulica de esta sociedad, Mariano de Andrés, explicó ayer que 'las primeras pruebas piloto, con unas 400 toneladas de residuos, presentan resultados satisfactorios'. De Andrés añadió que las muestras con más concentración de sustancias contaminantes como el mercurio han sido sometidas, con éxito, a tratamientos de desorción térmica e inertización, procesos que eliminan o aíslan los componentes nocivos.
El calendario estimado por el consejero Baltasar prevé licitar las obras a principios del año que viene -ya con el nuevo Gobierno- para que, 'a poder ser antes del verano', se inicien los trabajos. La operación podría acabar en 2009.