Científicos advierten de que el agua es el problema más grave del siglo XXI

Mar, 05/09/2006

EFE

El coordinador del proyecto científico sobre gestión del agua en el Mediterráneo -MELIA, en sus siglas en inglés-, Rafael Rodríguez, advirtió hoy de que el uso racional del agua se ha convertido en "el problema más grave de la humanidad" en el siglo XXI.
Rodríguez, quien también es delegado del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en Andalucía, presidió hoy en Sevilla la puesta en marcha de este proyecto, financiado por el VI Programa Marco de la Comisión Europea con dos millones de euros.
El proyecto MELIA, en el que participan medio centenar de científicos de 16 países mediterráneos, durará cuatro años y sus conclusiones se adelantarán en la Exposición Universal de Zaragoza y se expondrán en la próxima conferencia mundial sobre el agua, que se celebrará en Turquía en 2010.
Rodríguez señaló a los periodistas que el principal problema para una gestión sostenible del agua no es tanto su déficit como su consumo descontrolado "como si fuese gratis y un bien inextinguible".
Sostuvo que los actuales recursos hídricos son suficientes para cubrir "las necesidades básicas de la población", pero advirtió de que el agua "se acaba, como todos los recursos", por lo que debe ser gestionada correctamente por los ciudadanos, "que tienen que ser conscientes de que no se puede consumir de manera ilimitada".
"El cambio global se está traduciendo en un aumento de las sequías y de las lluvias torrenciales, que está afectando a la distribución del agua en el planeta, que ya no es la que era, por lo que este recurso escaso se ha convertido en el problema más grave que tiene la humanidad para el siglo veintiuno", enfatizó.
Rodríguez explicó que el impacto climático del cambio global, con períodos de calor, sequía y lluvia torrencial "cada vez más frecuentes", han convertido en obsoletos los modelos tradicionales de predicción meteorológica.
Destacó el concepto "agua virtual", que analiza el valor del bien producido con el agua consumida, pues ha revelado casos de algún país mediterráneo "que cuando exporta un kilo de trigo, en realidad está exportando mil kilos de agua", lo que evidencia "que no tiene sentido hacer productos de bajo valor añadido utilizando mucha agua".
Explicó que la contaminación es un aspecto fundamental para el uso sostenible del agua, en especial en un mar como el Mediterráneo, en el que "los vertidos de los países del norte acaban afectando a los del sur".
El proyecto MELIA nace como una "acción de coordinación" impulsada por la UE para "aprovechar las experiencias de todos los proyectos de investigación sobre el agua en la cuenca mediterránea" mediante "una información transversal eficiente a través de internet", mediante la página www.meliaproject.eu.
"Contamos con una infinidad de documentación, pero no se traduce en soluciones concretas que puedan ser aprovechadas por los gestores de cuenca o por las administraciones", apostilló.
Mientras la UE dispone de una directiva marco del agua, existen países del Mediterráneo que carecen de legislación en esta materia, lo que, según Rodríguez, debería solucionarse antes de 2010, cuando entre en vigor el área mediterránea de libre comercio en la que las producciones agrarias deberían contar con condiciones de producción homogéneas.
MELIA intercambiará experiencias hidrológicas entre los países mediterráneos y aspira a erigirse en foro de encuentro de las demandas de agricultores, empresarios turísticos o ciudadanos, a través de diversas actividades de sensibilización.