El trasvase del Tajo Medio llevaría al Levante 200 hectómetros desde el río Tiétar y 300 desde el embalse de Azután
Lun, 04/09/2006
El presidente de la Comunidad de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, continúa con la idea de abastecer y desarrollar la zona del Levante español a costa del agua de Castilla-La Mancha, comunidad que se opone frontalmente a un proyecto que parece no ser visto con muy malos ojos por el Gobierno de Zapatero. Murcia pretende hacer nuevos trasvases desde el Tajo medio a través de una canalización que llegaría hasta la localidad de La Roda en Albacete, pasando por municipios de Ciudad Real como Alcázar de San Juan, o Azután y Navalcán, en Toledo. Gran parte de la Mancha se vería afectada.
Según el informe de análisis hidrológico realizado por la Región de Murcia, en la cuenca del Tajo medio hay caudales que no se usan y que son susceptibles de ser derivados en cuantía suficiente para satisfacer necesidades en el Júcar. Con la regulación existente, la suma total de disponibilidades trasvasables útiles directas es de unos 500 hectómetros cúbicos al año, 200 procedentes del Tiétar y 300 de Azután.
A pesar de las «bondades» que el Plan tendría para Castilla-La Mancha, analizando los caudales máximos derivables las diferencias siguen siendo notables, pues los 500 hectómetros cúbicos que puede aportar el medio Tajo al Levante son mínimos por la capacidad ilimitada de caudal que ofrecerían las desaladoras que permitirían a Murcia y Valencia derivar agua del mar, sin perjuicio a otras regiones.
Obviando las ventajas -que para algunos no son tales -que ofrecen las desaladoras, el trasvase desde el medio Tajo sigue siendo la primera opción para los dirigente levantinos, a pesar de la gran obra que habría que acometer. La cuenca del trasvase, derivada de dicha obra, tendría 485 kilómetros, que irían desde el río Tiétar hasta La Roda. Del total, 11 kilómetros corresponderían a impulsiones, 10 a sifones, 16 a acueductos, seis a túneles y los otros 441 kilómetros para canal.
La altura total de elevación estaría en 512 metros a lo largo de ocho elevaciones, mientras que la altura de la turbinación sería nula. Además, habría ocho estaciones de bombeo distribuidas a lo largo de los 485 kilómetros de la conducción, que permitirían la llegada de aguas hasta el Acueducto Tajo-Segura a la altura de La Roda.
Otra opción que se baraja es la de que el trasvase no comenzara en el río Tiétar, sino en el embalse de Azután, lo que reduciría la distancia a 393 kilómetros y requeriría una estación de bombeo menos, es decir, siete. Independientemente de acometerse desde Tiétar o Azután, la construcción requeriría la creación de un nuevo embalse en uso para regular en origen o, alternativamente, la toma y recarga de acuíferos.
El desembolso en una obra de tal magnitud sería elevado para las comunidades implicadas, por lo que desde Murcia sostienen que sería necesario subvencionar la inversión para que fuese viable, puesto que la capacidad de pago existente en las zonas receptoras en la Mancha no permite a los usuarios de regadío soportar todos los costes del agua trasvasada.
Los presupuestos hechos por Murcia aseguran que la infraestructura de conducción de Azután a La Roda ascendería a 601 millones de euros (cien mil millones de pesetas) que permitirían transportar 200 hectómetros cúbicos al año. Ese montante alcanzaría los 961 millones de euros (160.000 millones de pesetas) si la cantidad a trasvasar fueran 500 hectómetros cúbicos. Los costes unitarios desglosados totales supondrían 0.24 y 0.30 euros (40 y 50 pesetas) por metro cúbico, sin tratamientos adicionales en origen. De esa cantidad, 0.15 euros (25 pesetas) son el coste total de la explotación, y el resto, entre 0.09 y 0.15 euros (15 y 25 pesetas), corresponden a la amortización de la obra. Dentro de los 0.15 euros de explotación, el consumo energético supone más de la mitad del gasto, concretamente 0.09 euros (15 pesetas).
La calidad del agua juega un papel esencial en este proyecto para saber en qué zonas es más aprovechable el líquido elemento. Según el informe de la Comunidad de Murcia, en el curso alto del río Tiétar el agua se puede catalogar como de muy buena calidad, pues apenas le afecta la contaminación urbana y el contenido en sales es muy bajo, por lo que resulta apta para todos los usos.
La calidad del agua
Sin embargo, el agua del Tajo a su paso por Talavera es de calidad aceptable, pero no sería apta para todos los usos. A pesar de que en Toledo la calidad del agua es peor, ésta se ve mejorada en Azután por el efecto positivo de dilución del río Alberche. Además, el desarrollo de los planes de saneamiento y mejoras de la depuración en la cuenca del Tajo en Azután están haciendo que la calidad en esa zona aumente a un buen ritmo. De continuar esta tendencia, la calidad podría resultar aceptable. En el informe se observa que en el aspecto hidrológico pueden derivarse caudales tanto del río Tiétar como del embalse de Azután, pero son irregulares y de moderada cuantía, pues sólo garantizan entre 200 y 300 hectómetros cúbicos. Además, se requiere una cierta regulación en origen y/o recarga de acuíferos y uso de conjunto de aguas superficiales y subterráneas.
En el ámbito hidráulico, si el canal fuera de Azután a La Roda, tendría casi 400 kilómetros, contaría con siete bombeos con altura geométrica total de 373 kilómetros y su construcción sería a cielo abierto por terrenos llanos en su mayoría, lo que no supondría dificultades especiales. Si este canal se hiciera en tubería, el coste final sufriría un importante incremento.
Un coste que se elevaría a 601 millones de euros si la cantidad de agua trasvasada fuera de 200 hectómetros cúbicos, es decir, 0.24 euros el metro cúbico; o de 961 millones de euros de ser 500 hectómetros, 0.30 euros cada metro cúbico, de los que 0.15 euros suponen un coste fijo de operación, mantenimiento, administración, energía y afecciones, y el resto para amortizar la obra.
Estos presupuestos no podrían ser soportados por los regadíos manchegos salvo que estos sean subvencionados, teniendo en cuenta el beneficio medioambiental que supondría la obra, pues el trazado por el que discurriría es viable y puede evitar los espacios protegidos, sin afectarlos. A priori, el Plan que propone Murcia es beneficioso para todos pero, de ser así, en Castilla-La Mancha no se habrían alzado ya voces en contra.
Según el informe de análisis hidrológico realizado por la Región de Murcia, en la cuenca del Tajo medio hay caudales que no se usan y que son susceptibles de ser derivados en cuantía suficiente para satisfacer necesidades en el Júcar. Con la regulación existente, la suma total de disponibilidades trasvasables útiles directas es de unos 500 hectómetros cúbicos al año, 200 procedentes del Tiétar y 300 de Azután.
A pesar de las «bondades» que el Plan tendría para Castilla-La Mancha, analizando los caudales máximos derivables las diferencias siguen siendo notables, pues los 500 hectómetros cúbicos que puede aportar el medio Tajo al Levante son mínimos por la capacidad ilimitada de caudal que ofrecerían las desaladoras que permitirían a Murcia y Valencia derivar agua del mar, sin perjuicio a otras regiones.
Obviando las ventajas -que para algunos no son tales -que ofrecen las desaladoras, el trasvase desde el medio Tajo sigue siendo la primera opción para los dirigente levantinos, a pesar de la gran obra que habría que acometer. La cuenca del trasvase, derivada de dicha obra, tendría 485 kilómetros, que irían desde el río Tiétar hasta La Roda. Del total, 11 kilómetros corresponderían a impulsiones, 10 a sifones, 16 a acueductos, seis a túneles y los otros 441 kilómetros para canal.
La altura total de elevación estaría en 512 metros a lo largo de ocho elevaciones, mientras que la altura de la turbinación sería nula. Además, habría ocho estaciones de bombeo distribuidas a lo largo de los 485 kilómetros de la conducción, que permitirían la llegada de aguas hasta el Acueducto Tajo-Segura a la altura de La Roda.
Otra opción que se baraja es la de que el trasvase no comenzara en el río Tiétar, sino en el embalse de Azután, lo que reduciría la distancia a 393 kilómetros y requeriría una estación de bombeo menos, es decir, siete. Independientemente de acometerse desde Tiétar o Azután, la construcción requeriría la creación de un nuevo embalse en uso para regular en origen o, alternativamente, la toma y recarga de acuíferos.
El desembolso en una obra de tal magnitud sería elevado para las comunidades implicadas, por lo que desde Murcia sostienen que sería necesario subvencionar la inversión para que fuese viable, puesto que la capacidad de pago existente en las zonas receptoras en la Mancha no permite a los usuarios de regadío soportar todos los costes del agua trasvasada.
Los presupuestos hechos por Murcia aseguran que la infraestructura de conducción de Azután a La Roda ascendería a 601 millones de euros (cien mil millones de pesetas) que permitirían transportar 200 hectómetros cúbicos al año. Ese montante alcanzaría los 961 millones de euros (160.000 millones de pesetas) si la cantidad a trasvasar fueran 500 hectómetros cúbicos. Los costes unitarios desglosados totales supondrían 0.24 y 0.30 euros (40 y 50 pesetas) por metro cúbico, sin tratamientos adicionales en origen. De esa cantidad, 0.15 euros (25 pesetas) son el coste total de la explotación, y el resto, entre 0.09 y 0.15 euros (15 y 25 pesetas), corresponden a la amortización de la obra. Dentro de los 0.15 euros de explotación, el consumo energético supone más de la mitad del gasto, concretamente 0.09 euros (15 pesetas).
La calidad del agua juega un papel esencial en este proyecto para saber en qué zonas es más aprovechable el líquido elemento. Según el informe de la Comunidad de Murcia, en el curso alto del río Tiétar el agua se puede catalogar como de muy buena calidad, pues apenas le afecta la contaminación urbana y el contenido en sales es muy bajo, por lo que resulta apta para todos los usos.
La calidad del agua
Sin embargo, el agua del Tajo a su paso por Talavera es de calidad aceptable, pero no sería apta para todos los usos. A pesar de que en Toledo la calidad del agua es peor, ésta se ve mejorada en Azután por el efecto positivo de dilución del río Alberche. Además, el desarrollo de los planes de saneamiento y mejoras de la depuración en la cuenca del Tajo en Azután están haciendo que la calidad en esa zona aumente a un buen ritmo. De continuar esta tendencia, la calidad podría resultar aceptable. En el informe se observa que en el aspecto hidrológico pueden derivarse caudales tanto del río Tiétar como del embalse de Azután, pero son irregulares y de moderada cuantía, pues sólo garantizan entre 200 y 300 hectómetros cúbicos. Además, se requiere una cierta regulación en origen y/o recarga de acuíferos y uso de conjunto de aguas superficiales y subterráneas.
En el ámbito hidráulico, si el canal fuera de Azután a La Roda, tendría casi 400 kilómetros, contaría con siete bombeos con altura geométrica total de 373 kilómetros y su construcción sería a cielo abierto por terrenos llanos en su mayoría, lo que no supondría dificultades especiales. Si este canal se hiciera en tubería, el coste final sufriría un importante incremento.
Un coste que se elevaría a 601 millones de euros si la cantidad de agua trasvasada fuera de 200 hectómetros cúbicos, es decir, 0.24 euros el metro cúbico; o de 961 millones de euros de ser 500 hectómetros, 0.30 euros cada metro cúbico, de los que 0.15 euros suponen un coste fijo de operación, mantenimiento, administración, energía y afecciones, y el resto para amortizar la obra.
Estos presupuestos no podrían ser soportados por los regadíos manchegos salvo que estos sean subvencionados, teniendo en cuenta el beneficio medioambiental que supondría la obra, pues el trazado por el que discurriría es viable y puede evitar los espacios protegidos, sin afectarlos. A priori, el Plan que propone Murcia es beneficioso para todos pero, de ser así, en Castilla-La Mancha no se habrían alzado ya voces en contra.