Miles de personas sobreviven en el sur de Líbano sin el agua mínima para el uso doméstico, según ACH
Vie, 25/08/2006
Miles de personas sobreviven en el sur de Líbano sin el agua mínima para el uso doméstico, afirmó hoy la ONG humanitaria Acción contra el Hambre. Un equipo de hidrólogos de la organización que trabaja en la región de Qana, a 10 kilómetros de la frontera israelí, aseguró que sólo hay agua potable embotellada, inasequible para una población privada de recursos.
El equipo, del que también forma parte una especialista en nutrición, trabaja en la zona desde hace dos días, durante los cuales ha debido replegarse varias veces por incidentes entre ambos bandos.
Según los especialistas en agua y saneamiento, que la destrucción de redes de distribución del agua ha sido generalizada y que sólo quedan algunas reservas en el subsuelo, profundas y de difícil acceso, de las que se puede sacar agua mediante sondas activadas por un generador. Pero aseguran que estas fuentes están sobre explotadas, ya que surten a varios pueblos y pedanías a la vez.
En Kafra, a 6 kilómetros al sureste de Qana, no hay reservas de ningún tipo y es un vecino de un pueblo cercano que tiene acceso a un pozo privado, quien suministra 4.000 litros por semana de agua no potable, para cocinar y lavar, a los 3.000 habitantes de Kafra. Además la ONG intenta suministrar a cada vecino 15 litros de agua al día mediante depósitos de agua en camiones. Cada uno de estos viajes de reparto de agua supone un gasto de 20 euros.
El equipo, del que también forma parte una especialista en nutrición, trabaja en la zona desde hace dos días, durante los cuales ha debido replegarse varias veces por incidentes entre ambos bandos.
Según los especialistas en agua y saneamiento, que la destrucción de redes de distribución del agua ha sido generalizada y que sólo quedan algunas reservas en el subsuelo, profundas y de difícil acceso, de las que se puede sacar agua mediante sondas activadas por un generador. Pero aseguran que estas fuentes están sobre explotadas, ya que surten a varios pueblos y pedanías a la vez.
En Kafra, a 6 kilómetros al sureste de Qana, no hay reservas de ningún tipo y es un vecino de un pueblo cercano que tiene acceso a un pozo privado, quien suministra 4.000 litros por semana de agua no potable, para cocinar y lavar, a los 3.000 habitantes de Kafra. Además la ONG intenta suministrar a cada vecino 15 litros de agua al día mediante depósitos de agua en camiones. Cada uno de estos viajes de reparto de agua supone un gasto de 20 euros.