Los expertos alertan de la llegada de un ola de calor, que agravará la sequía
Jue, 22/06/2006
La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, pidió ayer «precaución» a la población ante la llegada de temperaturas «muy altas» en los próximos días y, «sobre todo», durante las noches». La ministra señaló que los ciudadanos «deben seguir los consejos» que se den desde los organismos responsables de la Administración porque las elevadas temperaturas que se esperan «pueden afectar a la salud, especialmente de los niños y las personas mayores».
Narbona hizo estas declaraciones a la prensa en el Congreso de los Diputados con ocasión de la inauguración de unas jornadas organizadas por el grupo parlamentario socialista sobre «el avance de los derechos ciudadanos: los derechos ambientales», donde subrayó que «hay que evitar hacer ejercicio durante las horas de más calor».
Y es que, según Ángel Rivera, portavoz del Instituto Nacional de Meteorología (INM), el verano de este año será en términos generales similar al anterior. Además, advirtió de que las temperaturas de las masas de aire sobre el norte de África son actualmente «bastante altas» y similares a las de 2003, por lo que si avanzaran hacia la Península «puede haber posibilidades» de que se dé una «ola de calor» como entonces.
Rivera indicó que «las temperaturas medias para este verano van a ser superiores a las normales en el sudoeste peninsular y prácticamente tendrán los valores normales en el resto de las regiones españolas». No obstante, esto «no quiere decir que no haya fechas con pulsaciones cálidas fuertes de dos o tres días».
En cuanto a las precipitaciones, el portavoz de Meteorología explicó que «si bien en el verano no cabe esperar nada de precipitaciones en España porque las tormentas no dejan gran cosa, parece que serán normales excepto en el valle del Ebro y en el suroeste peninsular, donde serían inferiores a las normales». Unas noticias poco halagüeñas si tenemos en cuenta las declaraciones de la ministra de Medio Ambiente en las que destacaba la «situación especialmente grave» de Murcia en cuanto al agua. «Los embalses están a bajo nivel y la situación del río Segura es la más severa de todo el mapa», añadió. Pero, pese a todo, Narbona afirmó que «de momento no habrá restricciones en el abastecimiento de agua a las poblaciones» en la región murciana.
Vigilar las cuencas. Insistió en que la situación más grave «se da en las cuencas del Júcar, el Segura, el Alto Tajo y el Guadalquivir», en las que hace ya más de un año se producen restricciones para el regadío con el fin de garantizar el suministro de agua para el consumo humano. Con respecto a la mejora de los niveles hidrológicos de otras zonas, resaltó la mejoría de las cuencas del Norte, del Duero y de Cataluña. Sin embargo, dijo que en el resto de las cuencas «hay que seguir ejerciendo la vigilancia» para, en su caso, adoptar medidas para garantizar el abastecimiento. Así, anunció que su Departamento lanzará «dentro de poco» una nueva campaña para fomentar el uso responsable del agua, ante el segundo año de sequía. Además, recordó que el Ministerio realiza de forma continuada campañas y llamamientos sobre el uso racional del agua.
Por último, la ministra manifestó que «hay que entender la protección del medio ambiente como un derecho de los ciudadanos, que está en la Constitución», pero que «no está suficientemente garantizado en España». Narbona recordó la importancia del medio ambiente en la salud humana, ya que la cuarta parte de las muertes en el mundo está asociadas a las deficiencias ambientales como en el agua o en el aire, y que la cuarta parte de las enfermedades laborales está relacionada con las deficientes condiciones ambientales del lugar de trabajo.
Narbona hizo estas declaraciones a la prensa en el Congreso de los Diputados con ocasión de la inauguración de unas jornadas organizadas por el grupo parlamentario socialista sobre «el avance de los derechos ciudadanos: los derechos ambientales», donde subrayó que «hay que evitar hacer ejercicio durante las horas de más calor».
Y es que, según Ángel Rivera, portavoz del Instituto Nacional de Meteorología (INM), el verano de este año será en términos generales similar al anterior. Además, advirtió de que las temperaturas de las masas de aire sobre el norte de África son actualmente «bastante altas» y similares a las de 2003, por lo que si avanzaran hacia la Península «puede haber posibilidades» de que se dé una «ola de calor» como entonces.
Rivera indicó que «las temperaturas medias para este verano van a ser superiores a las normales en el sudoeste peninsular y prácticamente tendrán los valores normales en el resto de las regiones españolas». No obstante, esto «no quiere decir que no haya fechas con pulsaciones cálidas fuertes de dos o tres días».
En cuanto a las precipitaciones, el portavoz de Meteorología explicó que «si bien en el verano no cabe esperar nada de precipitaciones en España porque las tormentas no dejan gran cosa, parece que serán normales excepto en el valle del Ebro y en el suroeste peninsular, donde serían inferiores a las normales». Unas noticias poco halagüeñas si tenemos en cuenta las declaraciones de la ministra de Medio Ambiente en las que destacaba la «situación especialmente grave» de Murcia en cuanto al agua. «Los embalses están a bajo nivel y la situación del río Segura es la más severa de todo el mapa», añadió. Pero, pese a todo, Narbona afirmó que «de momento no habrá restricciones en el abastecimiento de agua a las poblaciones» en la región murciana.
Vigilar las cuencas. Insistió en que la situación más grave «se da en las cuencas del Júcar, el Segura, el Alto Tajo y el Guadalquivir», en las que hace ya más de un año se producen restricciones para el regadío con el fin de garantizar el suministro de agua para el consumo humano. Con respecto a la mejora de los niveles hidrológicos de otras zonas, resaltó la mejoría de las cuencas del Norte, del Duero y de Cataluña. Sin embargo, dijo que en el resto de las cuencas «hay que seguir ejerciendo la vigilancia» para, en su caso, adoptar medidas para garantizar el abastecimiento. Así, anunció que su Departamento lanzará «dentro de poco» una nueva campaña para fomentar el uso responsable del agua, ante el segundo año de sequía. Además, recordó que el Ministerio realiza de forma continuada campañas y llamamientos sobre el uso racional del agua.
Por último, la ministra manifestó que «hay que entender la protección del medio ambiente como un derecho de los ciudadanos, que está en la Constitución», pero que «no está suficientemente garantizado en España». Narbona recordó la importancia del medio ambiente en la salud humana, ya que la cuarta parte de las muertes en el mundo está asociadas a las deficiencias ambientales como en el agua o en el aire, y que la cuarta parte de las enfermedades laborales está relacionada con las deficientes condiciones ambientales del lugar de trabajo.