El director general de Agua del Ministerio de Medio Ambiente, Jaime Palop, hizo hoy un llamamiento para un uso más racional del agua a la sociedad española y a "la población inmigrante que trabaja en nuestro país y lo hace más rico y que está en proceso de integración en la sociedad española".
Palop hizo estas declaraciones a la prensa con motivo del Día Mundial de la Desertización y la Sequía durante la presentación de la campaña "Acercándonos por el Agua", en la que participó también Carlos Payá, vicepresidente de Cruz Roja, y representantes de las Embajadas de Marruecos, Argelia, Bolivia, Ecuador y Colombia.
Jaime Palop explicó que España "está atravesando una situación de sequía, en la que algunas cuencas hidrográficas están al límite, como son las del Júcar, el Segura, la cabecera del Tajo y la del Guadalquivir".
De momento no está en peligro el abastecimiento de agua a las poblaciones, pero "hay que estar prevenidos" y "hacer un uso más racional y un consumo no excesivo del agua" con el objetivo de que no sea necesario hacer restricciones, como ya son necesarias en los regadíos.
En España "estamos habituados a episodios de sequía -ya se registraron una en los años 80 y otra en los 90-, pero no así la población inmigrante, a la que va dirigido este llamamiento", agregó Palop.
"Tenemos que estar todos juntos como una piña en la gestión racional de los recursos y el ahorro de agua y no levantar el pie del acelerador", agregó Palop.
También Carlos Payá se refirió a la necesidad de "sensibilizar a la población inmigrante que tiene menos conocimiento de España y sus carencias" hacia el problema del agua.
El vicepresidente de Cruz Roja reveló que los 8.000 voluntarios de esta ONG en Madrid y el total de 170.000 que existen en España ayudarán al Ministerio de Medio Ambiente a sensibilizar a este segmento de población hacia la necesidad de "ser cautelosos en el uso del agua".
La campaña de sensibilización "Acercándonos por el Agua" se desarrollará a lo largo de los meses de verano en Madrid, Andalucía, y Alicante con una serie de actividades y talleres educativos que se realizarán en espacios públicos, parques o jardines.
La campaña denuncia la relación entre sequía y pérdida y deterioro de la salud, que causa problemas como la malnutrición, enfermedades de origen hídrico (mala calidad de las aguas), graves consecuencias para la salud derivadas del incremento de población desplazada de zonas rurales a las ciudades en los países en vías de desarrollo.
Al estar dirigida a la población inmigrante "por ser en general la que menos información recibe sobre el uso y gestión del agua", Cruz Roja ha editado un Decálogo del Agua en cuatro idiomas: castellano, francés, inglés y árabe.
También Greenpeace alertó hoy sobre la influencia del hombre en la desertización, a la que calificó en un comunicado como "una de las mayores amenazas a escala mundial".
España es "el país más árido de Europa, con un tercio de su superficie con una tasa muy elevada de desertificación y un 6% en el que ya se ha degradado de forma irreversible".
Según Greenpeace, las zonas más afectadas son la vertiente mediterránea y las Islas Canarias", donde son responsables de esta situación "la sobreexplotación de los recursos hídricos, la tala indiscriminada de bosques, la agricultura extensiva, el sobrepastoreo, los incendios y la ocupación del suelo para el negocio inmobiliario".
La organización internacional Ashkoka, presente en 60 países, se sumó al llamamiento a la lucha contra la Desertización y la Sequía con un comunicado, en el que propone "sencillos sistemas de almacenamiento de agua de lluvia" para zonas afectadas por la sequía.
La propuesta de Ashkoka para evitar la desertización y paliar la degradación del territorio incluye la "recogida de semillas autóctonas y una firme política sobre la tala de árboles furtiva en los bosques y la lucha contra los incendios".