Las desalinizadoras tendrán filtros de alto rechazo para que el boro no dañe cultivos

Lun, 08/05/2006

La Verdad

La dos plantas para riego que licita Acuamed podrán producir hasta 180 hm3 en una segunda fase
M. BUITRAGO/MURCIA

El boro, uno de los peores enemigos de determinados cultivos, como los cítricos, se eliminará al máximo en las dos plantas desalinizadoras para riego de Águilas y Torrevieja que va a licitar en los próximos días la sociedad estatal Aguas de las Cuencas Mediterráneas (Acuamed). Para ello, en el proceso de ósmosis inversa se utilizarán las membranas que proporcionan mayor rechazo al boro.

Las fábricas de agua de Águilas y Torrevieja producirán en una primera fase 140 hectómetros cúbicos anuales, de los que 30 serán para los abastecimientos. El director general de Acuamed, Adrián Baltanás, ha explicado en Murcia -durante la firma de los convenios con los agricultores- que la planta de Torrevieja tiene vocación de ser la más grande del mundo cuando alcance una producción de 120 hectómetros. De esta forma superará a la de Ashkelon, en Israel.

Uno de los objetivos del Ministerio de Medio Ambiente es reducir el consumo energético de las desalinizadoras, para lo cual se instalará un sistema de cámaras hiperbáricas que permita recuperar el máximo de energía de rechazo. Esta opción, explica Acuamed, «permite reducir de forma apreciable el consumo de energía eléctrica aproximadamente en 0,34 kilovatios hora por metro cúbico respecto de las tecnologías convencionales».

Todo el programa de desalinización del Ministerio en el litoral mediterráneo requerirá de una producción de energía de 400 megavatios funcionando 5.000 horas al año, señaló Adrián Baltanás. Para evitar que esa producción eléctrica extraordinaria repercuta en el incremento de emisiones de CO2 a la atmósfera, se construirán numerosas plantas de energía eólica, solar térmica y fotovoltaica y de biomasa. Éstas últimas tienen una capacidad de entre 15 y 20 megavatios; mientras que las solares proyectadas serán de 30 a 50. Se traducirá al final en una docena de plantas que, para Baltanás, «no son muchas». Asimismo, las desalinizadoras contarán con instalaciones de energía fotovoltaica y térmica para su iluminación y los consumos propios de los edificios. Acuamed persigue construir desalinizadoras verdes para reducir los altos impactos, entre los que se incluye además la eliminación de la salmuera.

El Ministerio confía en iniciar las obras el próximo noviembre, para que estén en funcionamiento a finales del 2008. Las dos plantas suman una inversión total de 640 millones de euros, que representa la mayor licitación de una tacada que se realiza en la cuenca del Segura. Esta cantidad lleva incluidos los gastos de mantenimiento y explotación durante los próximos 15 años.