Baltasar pacta con Narbona 27 millones de euros para limpiar el final del Llobregat

Jue, 04/05/2006

El País

La primera reunión celebrada entre la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, y el nuevo titular de la misma área del Gobierno catalán, Francesc Baltasar, terminó ayer con acuerdos de diverso calado en varios puntos. El principal de ellos consiste en que el ministerio destinará una partida de 27 millones de euros para arreglar el último tramo del Llobregat, desde Martorell hasta el delta. El seguimiento de esta inversión lo hará una comisión mixta integrada por representantes de ambos gobiernos. La obra se dividirá en dos tramos: el que va desde Martorell hasta el inicio del delta, muy castigado por vertidos históricos de empresas de toda laya, y la intervención final en el propio delta.
Además Baltasar y Narbona alcanzaron un acuerdo sobre el punto en el que se producirá la toma de agua marina para ser tratada en la desaladora del Llobregat. La toma se hará en la playa de El Prat. Esta solución, explicó ayer Baltasar poco después de entrevistarse con Narbona, resuelve varios problemas porque evita la afectación de fincas privadas. Así, la actuación de la depuradora garantiza la limpieza de la playa.
La entrevista, que se celebró en la sede del ministerio en Madrid y se prolongó a lo largo de tres horas, sirvió para acordar los puntos relativos al convenio sobre la cesión de los terrenos del antiguo club Med, en Cadaqués (Alt Empordà). La intención de ambas partes es firmar este convenio en breve, de modo que las obras para eliminar las construcciones se inicien antes del verano. Cabe la posibilidad de que se mantenga en pie uno de los edificios para destinarlo a albergar un centro para la observación de la naturaleza.
Narbona y Baltasar analizaron también la situación del parque nacional de Aigüestortes. Baltasar aportó un estudio sobre el coste que supera ampliamente los 1,1 millones de euros que ahora recibe el Gobierno catalán del ministerio y quedaron en revisar la cantidad al alza. El último asunto tratado en la reunión fue la creación de un Centro de Recuperación de Animales Marinos (CRAM) en la confluencia de El Prat y Viladecans.