La CHD investiga un nuevo vertido en el Bernesga al parecer por las obras de construcción de los túneles del AVE
Sáb, 08/04/2006
La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ha enviado sus equipos a tomar muestras al río Bernesga tras detectarse en la tarde de ayer que las aguas del río bajaban "muy turbias" a la altura del Pola de Gordón (León).
Según informaron a Europa Press fuentes de la CHD, los primeros análisis realizados por los laboratorios del propio Organismo de Cuenca han encontrado en las muestras recogidas sólidos en suspensión, limos y arcillas "que, en principio, no afectan al normal abastecimiento de la población ni a la vida piscícola".
En todo caso, garantizaron las mismas fuentes, la guardería fluvial y los equipos toma muestras continuarán vigilando el estado de las aguas para ver su evolución.
Desde la Confederación Hidrográfica del Duero explicaron que todo parece indicar que el vertido se ha producido a consecuencia de las obras que se realizan en la zona para la construcción de los túneles por donde circularán los trenes de Alta Velocidad.
"Al igual que ha ocurrido en otras ocasiones, los trabajos de construcción podrían haber perforado las oquedades naturales de las rocas calizas, en las que se almacena agua con materiales en suspensión como limos y arcillas, lo que habría provocado que se hayan vertido estos materiales a lo largo de los túneles hasta llegar al río", añadieron.
Para evitar los vertidos al río la empresa constructora de los túneles había instalado unas balsas de contención que, sin embargo, "ahora se ha demostrado que son insuficientes para tratar la cantidad de agua que están recibiendo".
Ante esta situación, la CHD ha incoado un expediente sancionador y ha obligado a la empresa a construir nuevas balsas para aumentar el volumen de decantación, "unas balsas que ya se están construyendo y que evitarán que el agua almacenada en las rocas llegue al río".
"El compromiso de la constructora es que este mismo mes estarán ya en funcionamiento las nuevas balsas de contención", informaron desde la CHD, organismo que aseguró que desde las estaciones de alerta de Cuadros y de Alija del Infantado se está llevando a cobo un control continuo de los posibles vertidos y de cualquier cambio que pueda afectar a la calidad de las aguas.
Según informaron a Europa Press fuentes de la CHD, los primeros análisis realizados por los laboratorios del propio Organismo de Cuenca han encontrado en las muestras recogidas sólidos en suspensión, limos y arcillas "que, en principio, no afectan al normal abastecimiento de la población ni a la vida piscícola".
En todo caso, garantizaron las mismas fuentes, la guardería fluvial y los equipos toma muestras continuarán vigilando el estado de las aguas para ver su evolución.
Desde la Confederación Hidrográfica del Duero explicaron que todo parece indicar que el vertido se ha producido a consecuencia de las obras que se realizan en la zona para la construcción de los túneles por donde circularán los trenes de Alta Velocidad.
"Al igual que ha ocurrido en otras ocasiones, los trabajos de construcción podrían haber perforado las oquedades naturales de las rocas calizas, en las que se almacena agua con materiales en suspensión como limos y arcillas, lo que habría provocado que se hayan vertido estos materiales a lo largo de los túneles hasta llegar al río", añadieron.
Para evitar los vertidos al río la empresa constructora de los túneles había instalado unas balsas de contención que, sin embargo, "ahora se ha demostrado que son insuficientes para tratar la cantidad de agua que están recibiendo".
Ante esta situación, la CHD ha incoado un expediente sancionador y ha obligado a la empresa a construir nuevas balsas para aumentar el volumen de decantación, "unas balsas que ya se están construyendo y que evitarán que el agua almacenada en las rocas llegue al río".
"El compromiso de la constructora es que este mismo mes estarán ya en funcionamiento las nuevas balsas de contención", informaron desde la CHD, organismo que aseguró que desde las estaciones de alerta de Cuadros y de Alija del Infantado se está llevando a cobo un control continuo de los posibles vertidos y de cualquier cambio que pueda afectar a la calidad de las aguas.