La Comisión del Agua aprueba por unanimidad el pacto del Matarraña
Jue, 06/04/2006
Diez meses después de que regantes y ecologistas llegaran por sí mismos a un consenso, la Comisión del Agua de Aragón aprobó ayer por unanimidad -56 apoyos y una abstención- el acuerdo que permitirá regular la cuenca del Matarraña evitando por el momento la construcción del embalse de La Fresneda-Torre del Compte. A cambio, el dictamen elaborado por la ponencia de obras del Pacto del Agua propone la creación de dos balsas laterales en Torre del Compte y Mazaleón, otra en el río Algars y dos pequeñas regulaciones en el río Tastavins.
La decisión sobre este documento incluyó un voto particular que fue defendido por el presidente de los regantes de la cuenca, José María Puyol, presente en la Comisión en sustitución de un representante de UAGA. En su explicación del voto, Puyol dejó claro que los ayuntamientos de la zona y los usuarios del agua no renuncian a que el embalse de Torre del Compte pueda construirse algún día. No obstante, horas antes él mismo reconoció que, aunque "el corazón" le hace defender ese proyecto, "el cerebro" le indica que es muy complicado.
El pacto sobre la regulación del Matarraña se convierte así en el mejor ejemplo de que el consenso en materia hidráulica puede alcanzarse sin la intervención de actores externos, ya que fueron los regantes y los ecologistas quienes lideraron el proceso de diálogo y acuerdo. El conjunto de obras propuestas como alternativa al embalse de Torre del Compte garantiza reservas para toda la cuenca, mejora los sistemas de gestión y resulta más barato que la presa de 20 hectómetros cúbicos prevista inicialmente.
Además, el dictamen también incluye otras iniciativas como la petición de que el río Matarraña sea designado Lugar de Interés Comunitario o la creación de una marca de calidad agroambiental para los productos de la zona.
La decisión refrendada ayer es la tercera después de que la Comisión del Agua haya aprobado ya los dictámenes sobre el recrecimiento de Yesa hasta la cota media y sobre la optimización de San Salvador hasta los 125 hectómetros cúbicos como alternativa a Santaliestra. El reto pendiente ahora es encontrar una solución para Biscarrués y Mularroya.
Oposición de los ecologistas.
En la sesión, que duró seis horas, también se aprobó el dictamen de la ponencia de Bases de la Política del Agua en Aragón. Ese documento, llamado a sustituir o a complementar el Pacto del Agua, recibió el apoyo del 80 % de los asistentes con 48 votos a favor, 11 en contra y una abstención. La oposición al texto provino de los colectivos conservacionistas, que vieron cómo casi todas sus propuestas para mejorar las Bases fueron rechazadas.
En cambio, las modificaciones planteadas por los regantes sí se aceptaron una por una. El representante de CHA en la Comisión, Salvador Eriste, y otros miembros de los grupos ecologistas denunciaron la existencia de un pacto previo para asegurar el apoyo de los regantes al documento. De hecho, a última hora del lunes el presidente de los Riegos del Alto Aragón, César Trillo, anunció a HERALDO que este colectivo no podría votar a favor si el documento no sufría modificaciones.
El tercer gran dictamen aprobado ayer fue el de la ponencia del Plan de Infraestructuras Hidráulicas de Aragón. Al igual que las Bases, ahora el texto saldrá a información pública.
La decisión sobre este documento incluyó un voto particular que fue defendido por el presidente de los regantes de la cuenca, José María Puyol, presente en la Comisión en sustitución de un representante de UAGA. En su explicación del voto, Puyol dejó claro que los ayuntamientos de la zona y los usuarios del agua no renuncian a que el embalse de Torre del Compte pueda construirse algún día. No obstante, horas antes él mismo reconoció que, aunque "el corazón" le hace defender ese proyecto, "el cerebro" le indica que es muy complicado.
El pacto sobre la regulación del Matarraña se convierte así en el mejor ejemplo de que el consenso en materia hidráulica puede alcanzarse sin la intervención de actores externos, ya que fueron los regantes y los ecologistas quienes lideraron el proceso de diálogo y acuerdo. El conjunto de obras propuestas como alternativa al embalse de Torre del Compte garantiza reservas para toda la cuenca, mejora los sistemas de gestión y resulta más barato que la presa de 20 hectómetros cúbicos prevista inicialmente.
Además, el dictamen también incluye otras iniciativas como la petición de que el río Matarraña sea designado Lugar de Interés Comunitario o la creación de una marca de calidad agroambiental para los productos de la zona.
La decisión refrendada ayer es la tercera después de que la Comisión del Agua haya aprobado ya los dictámenes sobre el recrecimiento de Yesa hasta la cota media y sobre la optimización de San Salvador hasta los 125 hectómetros cúbicos como alternativa a Santaliestra. El reto pendiente ahora es encontrar una solución para Biscarrués y Mularroya.
Oposición de los ecologistas.
En la sesión, que duró seis horas, también se aprobó el dictamen de la ponencia de Bases de la Política del Agua en Aragón. Ese documento, llamado a sustituir o a complementar el Pacto del Agua, recibió el apoyo del 80 % de los asistentes con 48 votos a favor, 11 en contra y una abstención. La oposición al texto provino de los colectivos conservacionistas, que vieron cómo casi todas sus propuestas para mejorar las Bases fueron rechazadas.
En cambio, las modificaciones planteadas por los regantes sí se aceptaron una por una. El representante de CHA en la Comisión, Salvador Eriste, y otros miembros de los grupos ecologistas denunciaron la existencia de un pacto previo para asegurar el apoyo de los regantes al documento. De hecho, a última hora del lunes el presidente de los Riegos del Alto Aragón, César Trillo, anunció a HERALDO que este colectivo no podría votar a favor si el documento no sufría modificaciones.
El tercer gran dictamen aprobado ayer fue el de la ponencia del Plan de Infraestructuras Hidráulicas de Aragón. Al igual que las Bases, ahora el texto saldrá a información pública.