Aguas del Júcar aprueba el nuevo trazado del trasvase al Vinalopó
Jue, 23/02/2006
La toma por el Azud de la Marquesa ahorra siete millones y medio de euros y está previsto que finalice en el 2008, según acordó ayer la sociedad estatal
LA VERDAD/VALENCIA
TERRENOS. Moragues (centro) y Marugán (dcha.), junto a un técnico, en la Balsa de San Diego. / EFE
EL PROYECTO
Presupuesto: 231 millones.
Plazo de ejecución: 2008.
Modificaciones: el proyecto aprobado ayer varía sustancialmente los tramos C y D del trasvase entre el Júcar y el Vinalopó.
Sin túneles: se eliminan los túneles que debían atravesar las sierras de Requena y Grossa.
Balsas: se eliminan los estanques de Barxeta, Canals y La Mortera.
Estaciones de bombeo: se retiran las de Barxeta y Canals.
Opción 'Xàtiva norte': transcurre en sifón por el norte de Genovés y Xàtiva, cruza la autovía de Almansa, a la altura de Llanera de Ranes, donde se construirá una nueva balsa y una estación de bombeo.
Autovía: transcurrirá paralela a la autovía.
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El consejo de administración de la sociedad estatal Aguas del Júcar aprobó ayer el proyecto informativo y el estudio de impacto ambiental del trasvase Júcar-Vinalopó con toma en el Azud de la Marquesa, cuyo presupuesto asciende a 231,5 millones de euros, 7,5 menos de lo previsto, y que debe estar finalizado en el año 2008, según fuentes de la citada sociedad.
El proyecto, que será sometido a información pública durante todo el mes de marzo, incorpora «muchas de las sugerencias realizadas por gran parte de las entidades consultadas, con el fin de reducir al máximo el impacto medioambiental de las obras».
Además, añadieron, «el proyecto definitivo tiene un presupuesto sensiblemente inferior al previsto inicialmente». De hecho, explicaron desde la sociedad, «mientras el anteproyecto contaba con un presupuesto de 239 millones de euros, el trazado definitivo costará 7,5 millones menos».
El trazado definitivo del trasvase Júcar-Vinalopó implica cambios sustanciales en los tramos C y D del anteproyecto. En la propuesta inicial, la conducción atravesaba con túneles la Sierra de Requena (Genovés) y la Sierra Grossa (Xàtiva) y, a continuación, se ubicaban las balsas de Canals y La Mortera, así como la correspondiente estación de bombeo. De ahí remontaba hasta que cruzaba al lado norte de la autovía de Almansa. Además, entre ambos túneles, la conducción atravesaba espacios protegidos del río Albaida, en las inmediaciones de la presa de Bellús.
Cambios
En el proyecto informativo aprobado ayer se suprimen los túneles que atravesaban ambas sierras (Requena y Grossa); se eliminan las balsas de Barxeta, Canals y La Mortera («de compleja ejecución por su ubicación montañosa y de especial clasificación ante riesgo de rotura»); y se eliminan también las estaciones de bombeo de Barxeta y Canals.
La dirección técnica de Aguas del Júcar ha propuesto la opción denominada Xàtiva norte, que transcurre en sifón por el norte de los términos municipales de Genovés y Xàtiva y cruza la autovía de Almansa a la altura de Llanera de Ranes, donde se construirá una nueva balsa y una estación de bombeo.
Dicha estación de bombeo queda además a una distancia «muy reducida de la subestación eléctrica más cercana, lo que acorta de forma sustancial el tendido de alta tensión necesario». A partir de ese punto, «la gran ventaja de este trazado es que discurre en paralelo a la autovía».
Junto con el proyecto informativo, el consejo de administración de Aguas del Júcar también aprobó adaptar los pliegos técnicos y administrativos del concurso de licitación de proyecto y obra del nuevo trazado. De esta forma, «se facilita también la participación de empresas de la Comunidad Valenciana en la construcción del nuevo trasvase Júcar-Vinalopó, ya que, con las mejoras incorporadas, en algunos tramos no se hace imprescindible, por ejemplo, acreditar experiencia en la construcción de presas».
Según explicó el consejero delegado de Aguas del Júcar, José María Marugán, «esta es una muestra más del compromiso incuestionable del Ministerio de Medio Ambiente con la Comunidad Valenciana, y en especial con la provincia de Alicante. El Júcar-Vinalopó se va a hacer, pese a quien pese. Y se va hacer en tiempo y forma. Seguimos el calendario previsto, lo que permitirá que las obras del nuevo trazado comiencen a finales de este año y estén concluidas en el 2008».
Este compromiso, añadió Marugán, «implica además importantes ventajas para los usuarios del Júcar-Vinalopó, ya que sólo tendrán que pagar el agua cuando la reciban. Nuestro objetivo prioritario es ofrecer una solución urgente a la necesidad de agua que tiene Alicante, dando las máximas garantías a todos los usuarios, permitiendo así que se recuperen los acuíferos del Vinalopó y respetando el caudal ecológico del río Júcar».
«Hemos trasladado a todas las comunidades de regantes de Alicante que pueden ser beneficiarias del trasvase nuestra disposición a ofrecerles directamente toda la información disponible sobre el nuevo trazado del trasvase Júcar-Vinalopó», dice el consejero, que añade: «Los regantes han mostrado ya su voluntad de llegar a acuerdos con el Ministerio. Nuestro objetivo es conseguir que el agua llegue a Alicante lo antes posible, y nadie nos va a parar».
Financiación
La aprobación del nuevo trasvase se produce días después de que el propio consejero delegado de Aguas del Júcar ya diese por segura la financiación de la obra, que presumiblemente correrá a cargo de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM).
Por su parte, fuentes de la Conselleria de Infraestructuras no quisieron pronunciarse más allá del discurso que siempre ha mantenido la Generalitat: «No hay razones técnicas ni medioambientales para cambiar el trazado del trasvase, que ha decidido el Ministerio de forma unilateral», afirmó un portavoz del departamento de García Antón.
LA VERDAD/VALENCIA
TERRENOS. Moragues (centro) y Marugán (dcha.), junto a un técnico, en la Balsa de San Diego. / EFE
EL PROYECTO
Presupuesto: 231 millones.
Plazo de ejecución: 2008.
Modificaciones: el proyecto aprobado ayer varía sustancialmente los tramos C y D del trasvase entre el Júcar y el Vinalopó.
Sin túneles: se eliminan los túneles que debían atravesar las sierras de Requena y Grossa.
Balsas: se eliminan los estanques de Barxeta, Canals y La Mortera.
Estaciones de bombeo: se retiran las de Barxeta y Canals.
Opción 'Xàtiva norte': transcurre en sifón por el norte de Genovés y Xàtiva, cruza la autovía de Almansa, a la altura de Llanera de Ranes, donde se construirá una nueva balsa y una estación de bombeo.
Autovía: transcurrirá paralela a la autovía.
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El consejo de administración de la sociedad estatal Aguas del Júcar aprobó ayer el proyecto informativo y el estudio de impacto ambiental del trasvase Júcar-Vinalopó con toma en el Azud de la Marquesa, cuyo presupuesto asciende a 231,5 millones de euros, 7,5 menos de lo previsto, y que debe estar finalizado en el año 2008, según fuentes de la citada sociedad.
El proyecto, que será sometido a información pública durante todo el mes de marzo, incorpora «muchas de las sugerencias realizadas por gran parte de las entidades consultadas, con el fin de reducir al máximo el impacto medioambiental de las obras».
Además, añadieron, «el proyecto definitivo tiene un presupuesto sensiblemente inferior al previsto inicialmente». De hecho, explicaron desde la sociedad, «mientras el anteproyecto contaba con un presupuesto de 239 millones de euros, el trazado definitivo costará 7,5 millones menos».
El trazado definitivo del trasvase Júcar-Vinalopó implica cambios sustanciales en los tramos C y D del anteproyecto. En la propuesta inicial, la conducción atravesaba con túneles la Sierra de Requena (Genovés) y la Sierra Grossa (Xàtiva) y, a continuación, se ubicaban las balsas de Canals y La Mortera, así como la correspondiente estación de bombeo. De ahí remontaba hasta que cruzaba al lado norte de la autovía de Almansa. Además, entre ambos túneles, la conducción atravesaba espacios protegidos del río Albaida, en las inmediaciones de la presa de Bellús.
Cambios
En el proyecto informativo aprobado ayer se suprimen los túneles que atravesaban ambas sierras (Requena y Grossa); se eliminan las balsas de Barxeta, Canals y La Mortera («de compleja ejecución por su ubicación montañosa y de especial clasificación ante riesgo de rotura»); y se eliminan también las estaciones de bombeo de Barxeta y Canals.
La dirección técnica de Aguas del Júcar ha propuesto la opción denominada Xàtiva norte, que transcurre en sifón por el norte de los términos municipales de Genovés y Xàtiva y cruza la autovía de Almansa a la altura de Llanera de Ranes, donde se construirá una nueva balsa y una estación de bombeo.
Dicha estación de bombeo queda además a una distancia «muy reducida de la subestación eléctrica más cercana, lo que acorta de forma sustancial el tendido de alta tensión necesario». A partir de ese punto, «la gran ventaja de este trazado es que discurre en paralelo a la autovía».
Junto con el proyecto informativo, el consejo de administración de Aguas del Júcar también aprobó adaptar los pliegos técnicos y administrativos del concurso de licitación de proyecto y obra del nuevo trazado. De esta forma, «se facilita también la participación de empresas de la Comunidad Valenciana en la construcción del nuevo trasvase Júcar-Vinalopó, ya que, con las mejoras incorporadas, en algunos tramos no se hace imprescindible, por ejemplo, acreditar experiencia en la construcción de presas».
Según explicó el consejero delegado de Aguas del Júcar, José María Marugán, «esta es una muestra más del compromiso incuestionable del Ministerio de Medio Ambiente con la Comunidad Valenciana, y en especial con la provincia de Alicante. El Júcar-Vinalopó se va a hacer, pese a quien pese. Y se va hacer en tiempo y forma. Seguimos el calendario previsto, lo que permitirá que las obras del nuevo trazado comiencen a finales de este año y estén concluidas en el 2008».
Este compromiso, añadió Marugán, «implica además importantes ventajas para los usuarios del Júcar-Vinalopó, ya que sólo tendrán que pagar el agua cuando la reciban. Nuestro objetivo prioritario es ofrecer una solución urgente a la necesidad de agua que tiene Alicante, dando las máximas garantías a todos los usuarios, permitiendo así que se recuperen los acuíferos del Vinalopó y respetando el caudal ecológico del río Júcar».
«Hemos trasladado a todas las comunidades de regantes de Alicante que pueden ser beneficiarias del trasvase nuestra disposición a ofrecerles directamente toda la información disponible sobre el nuevo trazado del trasvase Júcar-Vinalopó», dice el consejero, que añade: «Los regantes han mostrado ya su voluntad de llegar a acuerdos con el Ministerio. Nuestro objetivo es conseguir que el agua llegue a Alicante lo antes posible, y nadie nos va a parar».
Financiación
La aprobación del nuevo trasvase se produce días después de que el propio consejero delegado de Aguas del Júcar ya diese por segura la financiación de la obra, que presumiblemente correrá a cargo de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM).
Por su parte, fuentes de la Conselleria de Infraestructuras no quisieron pronunciarse más allá del discurso que siempre ha mantenido la Generalitat: «No hay razones técnicas ni medioambientales para cambiar el trazado del trasvase, que ha decidido el Ministerio de forma unilateral», afirmó un portavoz del departamento de García Antón.