El Cinca y el Gállego desembalsarán agua para salvar el cereal de invierno
Sáb, 18/02/2006
La Comisión de Desembalse de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) aprobó ayer, en una reunión extraordinaria, el riego del cereal de invierno y hortalizas para los sistemas de los ríos Cinca y Gállego. También se llegó al acuerdo de llenar las balsas y mantener los turnos de riego establecidos a principios de la campaña. Estas medidas se mantendrán hasta que se siembren los cultivos de verano.
Muchos agricultores afectados por la sequía el año pasado optaron por cultivar cereal de invierno en vez del de verano pese a su menor rentabilidad para asegurarse un suministro que, aún así, ha tenido problemas. El objetivo es conseguir "salvar el máximo cultivo posible ante la situación del año pasado", aseguró el presidente de la CHE, José Luis Alonso.
Las decisiones adoptadas por la Comisión de Desembalse responden a una situación excepcional que se repite, en menor medida, por segundo año consecutivo. Ante la casi seguridad de no disponer de agua suficiente para regar en verano, los agricultores han optado por dedicar sus esfuerzos al cereal de invierno, a pesar de reducir sus beneficios.
Las zonas más afectadas
Una de las zonas más afectadas por la sequía es el sistema de Riegos del Alto Aragón. En esta zona, el pantano de El Grado registra 321 hectómetros cúbicos de agua almacenada; mientras que el de Mediano cuenta con 123. Cifras que son inferiores a las del año pasado por estas fechas.
Otro sistema donde hay problema de escasez de agua es el Canal de Aragón y Cataluña en la zona del Noguera Ribagorzana. Los embalses de esta zona, sobre todo el de Canelles, se usaron mucho en la campaña pasada, según Alonso, y "no se han recuperado".
El presidente de la CHE aseguró que todas las comunidades de regantes están trabajando en la misma línea que el año pasado y están realizando "cambio de cultivos, dando preferencia a los de invierno", una medida que se tomó ante la escasez de reservas de agua de la pasada campaña.
Esperando la lluvia y el deshielo
El presidente de CHE aseguró que todavía es pronto para saber la situación de este año pero "habrá que acostumbrarse" porque "la sequía es un problema estructural que cada vez se da con más frecuencia", informó Alonso.
José Luis Alonso explicó que "contra la sequía no se puede luchar, pero sí paliar los efectos negativos". Aunque para ello sea necesaria una "buena gestión de las reservas hídricas", aspecto en el que está trabajando la CHE.
Las reservas de nieve son mejores que las de la campaña pasada, pero siguen siendo inferiores a la media de los últimos cinco años. En el caso del Gállego, la reserva es un 20 % inferior; mientras que en el caso del Alto Cinca hay un 30 % menos de nieve.
Muchos agricultores afectados por la sequía el año pasado optaron por cultivar cereal de invierno en vez del de verano pese a su menor rentabilidad para asegurarse un suministro que, aún así, ha tenido problemas. El objetivo es conseguir "salvar el máximo cultivo posible ante la situación del año pasado", aseguró el presidente de la CHE, José Luis Alonso.
Las decisiones adoptadas por la Comisión de Desembalse responden a una situación excepcional que se repite, en menor medida, por segundo año consecutivo. Ante la casi seguridad de no disponer de agua suficiente para regar en verano, los agricultores han optado por dedicar sus esfuerzos al cereal de invierno, a pesar de reducir sus beneficios.
Las zonas más afectadas
Una de las zonas más afectadas por la sequía es el sistema de Riegos del Alto Aragón. En esta zona, el pantano de El Grado registra 321 hectómetros cúbicos de agua almacenada; mientras que el de Mediano cuenta con 123. Cifras que son inferiores a las del año pasado por estas fechas.
Otro sistema donde hay problema de escasez de agua es el Canal de Aragón y Cataluña en la zona del Noguera Ribagorzana. Los embalses de esta zona, sobre todo el de Canelles, se usaron mucho en la campaña pasada, según Alonso, y "no se han recuperado".
El presidente de la CHE aseguró que todas las comunidades de regantes están trabajando en la misma línea que el año pasado y están realizando "cambio de cultivos, dando preferencia a los de invierno", una medida que se tomó ante la escasez de reservas de agua de la pasada campaña.
Esperando la lluvia y el deshielo
El presidente de CHE aseguró que todavía es pronto para saber la situación de este año pero "habrá que acostumbrarse" porque "la sequía es un problema estructural que cada vez se da con más frecuencia", informó Alonso.
José Luis Alonso explicó que "contra la sequía no se puede luchar, pero sí paliar los efectos negativos". Aunque para ello sea necesaria una "buena gestión de las reservas hídricas", aspecto en el que está trabajando la CHE.
Las reservas de nieve son mejores que las de la campaña pasada, pero siguen siendo inferiores a la media de los últimos cinco años. En el caso del Gállego, la reserva es un 20 % inferior; mientras que en el caso del Alto Cinca hay un 30 % menos de nieve.