Los niños que estudiaban hace dos años en el colegio público Mare de Déu del Toro en Ciutadella conocen lo que es quedarse sin hora del patio a causa de la lluvia. Pero no precisamente por acabar empapados, sino por el riesgo de inundación que hasta hace poco corría su patio trasero.
Ahora, en cambio, los chavales pueden salir a jugar al parque infantil del Canal Salat, un espacio verde artificial en medio de la ciudad, que conforma un cinturón de vegetación, paseos, merenderos, zona lúdica y puntos verdes para la recogida de materiales reciclables.
Cuando en septiembre de 2003 el conseller de Medio Ambiente, Jaume Font, acudió a la llamada del Ayuntamiento para conocer el problema del Canal Salat «no dudó en ponerse en marcha», explicó a EL MUNDO/El Dia de Baleares la responsable de Medio Ambiente en el Ayuntamiento de Ciutadella, Eulalia Llufriu. La teniente alcalde admitió que antes de la inversión del Govern, el lugar «daba pena», pues se encontraba «absolutamente degradado, lleno de suciedad, malezas, desperdicios y escombros».
Llufriu comparó la obra con los jardines valencianos del antiguo cauce del río Turia, aunque a menor escala. Tras una gran inundación su cauce fue desviado y el antiguo tramo remodelado para crear un espacio de recreo natural a lo largo de la ciudad. Además, afirmó que un equipo se trasladó a Valencia para estudiar el terreno antes de comenzar con el proyecto para Ciutadella.
El pasado 15 de diciembre, quedó finalizada la segunda fase del Canal Salat, con la que se solventa el principal problema de las inundaciones en zona urbana. Queda para la tercera y última el resto del tramo, pero éste no atraviesa zonas habitadas sino solamente campos, por lo que «el mayor peligro ya está arreglado», comentó la teniente alcalde de urbanismo. Todavía quedan por ultimar algunos detalles como la instalación de más farolas que conecten los dos barrios y unas barreras de delimitación de los jardines, pero el Ayuntamiento prevé que estén solventados para principios de año.
Por su parte, el conseller Font se comprometió a prestar la asistencia técnica necesaria para redactar el proyecto de la tercera fase antes de que se agote la actual legislatura y dejarlo listo para comenzar las obras a principios de la próxima. Esta fase se centrará en la zona superior que va desde el centro de salud, al principio del torrente, hasta la ronda sur y continuará con la tarea de canalización de las aguas.
La segunda fase comenzó a realizarse en junio del año 2004 y concluyó hace escasos días. Le ha costado al Govern poco más de dos millones de euros. Se trata de una inversión mayor que la primera fase, que le costó 700.000 euros. El Consistorio también ha gastado 36.000 euros para iluminación, parque infantil, barbacoa y una serie de servicios añadidos a los jardines, mientras que el IBANAT se ha encargado de acondicionar las zonas de ocio ciudadano con mesas y bancos de tipo rústico.
Llufriu explicó que tienen pensado contratar a una empresa para que mantenga limpia la zona y conserve lo jardines, en los que a partir de la próxima primavera comenzarán a florecer. En este sentido, la teniente alcalde de Medio Ambiente quiso hacer un llamamiento a la sensibilidad de los ciudadanos para que «respeten» la zona verde.