Las obras de Biscarrués podrían comenzar en el año 2007 aunque se reduzca el tamaño del embalse
Vie, 18/11/2005
Las obras para construir la presa de Biscarrués podrían comenzar en el año 2007 aunque se realicen algunas modificaciones en su tamaño. Miembros de la ponencia de la Comisión del Agua explicaron que no son necesarios ocho años para elaborar un nuevo proyecto del pantano y explicaron que tal y como se han planteado, las modificaciones previstas podrían estar listas y con su tramitación cumplimentada en unos meses. Fuentes de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) confirmaron estos datos. Además, existen recursos en la DGA y la CHE para acometer las obras complementarias de forma inmediata.
"Las obras podrían comenzar ya en aquellas cuestiones de tipo complementario y realizarse el modificado del proyecto mientras se llevan a cabo estos trabajos", señalaron fuentes de la Confederación citando el recrecimiento de Yesa como ejemplo. Esta posibilidad sería factible siempre que se llegara al consenso y no hubiera una oposición social fuerte, como sucede en la actualidad.
En el caso de Biscarrués serían necesarios unos meses para que las máquinas se pusieran a trabajar, por lo que el inicio de la construcción se aplazaría previsiblemente hasta el año 2007. Este tiempo no se debería al modificado del proyecto, sino a los cinco años que han pasado desde que se adjudicó la obra del embalse sin que haya comenzado la ejecución.
Los expertos consideran que no sería necesario realizar un nuevo proyecto si, como ha propuesto la Comisión del Agua, se reduce la altura de la presa de Biscarrués. Miembros de este organismo recordaron ayer que el sistema alternativo con las obras complementarias que se expusieron el viernes podrían proporcionar a Riegos del Alto Aragón un total de 350 hectómetros cúbicos en un plazo no superior a 5 años.
Por el momento, el embalse de Biscarrués lleva 5 años sin ejecutarse desde su adjudicación en el año 2000. Además, el Ministerio de Medio Ambiente ha expresado en repetidas ocasiones sus reticencias a construir un embalse que inundaría el municipio de Erés, por lo que muy pocos especialistas ven viable su ejecución en este momento.
En la hipótesis de que fuera necesario redactar un nuevo proyecto, fuentes de la CHE estimaron que el plazo estaría en unos tres años, tomando como ejemplo el caso de San Salvador (alternativa a Santaliestra), en donde la colaboración del organismo de cuenca, el Gobierno de Aragón y la Comunidad de Regantes ha reducido los trámites en más de un año.
No obstante, los responsables de la CHE no quisieron realizar ayer declaraciones públicas, dado que todavía no se ha dado traslado oficial de la propuesta al organismo de cuenca.
El Gobierno de Aragón reiteró su disposición a apoyar el acuerdo de consenso que surja de la Comisión del Agua "con medios técnicos y económicos". Sin citarlas, el Ejecutivo respondía a las peticiones formuladas por la Comisión del Agua para que, como en el caso de San Salvador, se haga cargo de los gastos de la redacción de los nuevos proyectos derivados del posible dictamen sobre Biscarrués. Entre ellos estaría el embalse de Marracos, sobre el que por el momento sólo se han realizado algunos estudios preliminares.
La fórmula implica que los proyectos serían encargados por la propia Comunidad de Riegos del Alto Aragón, los sufragaría el Gobierno de Aragón por medio de un convenio y la CHE adscribiría al proceso un ingeniero que actuaría como director técnico y supervisaría todos los pasos. Con este sistema, todos los plazos se recortarían en más de un año.
Por otro lado, este diario también ha podido saber que la Confederación Hidrográfica dispone en este momento de recursos económicos para realizar de inmediato todos los estudios necesarios sobre los múltiples embalses de pequeño tamaño que se deberían realizar en el interior del sistema de Monegros. Además, estos embalses se pueden acoger a la Ley de Riegos del Alto Aragón de 1915 en la que se otorgan condiciones de financiación muy favorables para los regantes.
"Las obras podrían comenzar ya en aquellas cuestiones de tipo complementario y realizarse el modificado del proyecto mientras se llevan a cabo estos trabajos", señalaron fuentes de la Confederación citando el recrecimiento de Yesa como ejemplo. Esta posibilidad sería factible siempre que se llegara al consenso y no hubiera una oposición social fuerte, como sucede en la actualidad.
En el caso de Biscarrués serían necesarios unos meses para que las máquinas se pusieran a trabajar, por lo que el inicio de la construcción se aplazaría previsiblemente hasta el año 2007. Este tiempo no se debería al modificado del proyecto, sino a los cinco años que han pasado desde que se adjudicó la obra del embalse sin que haya comenzado la ejecución.
Los expertos consideran que no sería necesario realizar un nuevo proyecto si, como ha propuesto la Comisión del Agua, se reduce la altura de la presa de Biscarrués. Miembros de este organismo recordaron ayer que el sistema alternativo con las obras complementarias que se expusieron el viernes podrían proporcionar a Riegos del Alto Aragón un total de 350 hectómetros cúbicos en un plazo no superior a 5 años.
Por el momento, el embalse de Biscarrués lleva 5 años sin ejecutarse desde su adjudicación en el año 2000. Además, el Ministerio de Medio Ambiente ha expresado en repetidas ocasiones sus reticencias a construir un embalse que inundaría el municipio de Erés, por lo que muy pocos especialistas ven viable su ejecución en este momento.
En la hipótesis de que fuera necesario redactar un nuevo proyecto, fuentes de la CHE estimaron que el plazo estaría en unos tres años, tomando como ejemplo el caso de San Salvador (alternativa a Santaliestra), en donde la colaboración del organismo de cuenca, el Gobierno de Aragón y la Comunidad de Regantes ha reducido los trámites en más de un año.
No obstante, los responsables de la CHE no quisieron realizar ayer declaraciones públicas, dado que todavía no se ha dado traslado oficial de la propuesta al organismo de cuenca.
El Gobierno de Aragón reiteró su disposición a apoyar el acuerdo de consenso que surja de la Comisión del Agua "con medios técnicos y económicos". Sin citarlas, el Ejecutivo respondía a las peticiones formuladas por la Comisión del Agua para que, como en el caso de San Salvador, se haga cargo de los gastos de la redacción de los nuevos proyectos derivados del posible dictamen sobre Biscarrués. Entre ellos estaría el embalse de Marracos, sobre el que por el momento sólo se han realizado algunos estudios preliminares.
La fórmula implica que los proyectos serían encargados por la propia Comunidad de Riegos del Alto Aragón, los sufragaría el Gobierno de Aragón por medio de un convenio y la CHE adscribiría al proceso un ingeniero que actuaría como director técnico y supervisaría todos los pasos. Con este sistema, todos los plazos se recortarían en más de un año.
Por otro lado, este diario también ha podido saber que la Confederación Hidrográfica dispone en este momento de recursos económicos para realizar de inmediato todos los estudios necesarios sobre los múltiples embalses de pequeño tamaño que se deberían realizar en el interior del sistema de Monegros. Además, estos embalses se pueden acoger a la Ley de Riegos del Alto Aragón de 1915 en la que se otorgan condiciones de financiación muy favorables para los regantes.