Marina m. Ballestero. Palma
El Ministerio de Medio Ambiente acaba de adjudicar la construcción en Baleares de cuatro plantas desaladoras de agua marina por el proceso de ósmosis inversa. Las nuevas instalaciones estarán repartidas entre las tres islas principales: dos de ellas en Mallorca (en las localidades de Andratx y Alcudia), una en Ibiza (en Santa Eulalia) y la cuarta en Menorca (en Ciudadela), con un coste global de más de 198 millones de euros y una producción de 48.000 metros cúbicos de agua diarios.
Estas actuaciones forman parte del convenio que suscribió el Ministerio de Medio Ambiente con el Gobierno balear, el pasado abril, para la ejecución de obras hidráulicas en esta comunidad.
Adjudicaciones
La adjudicataria de la planta de Alcudia ha sido la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Sacyr y la Sociedad Anónima de Depuración y Tratamientos. La obra está presupuestada en 61,9 millones de euros y contará con ocho pozos que obtendrán agua del mar que, una vez desalada, servirá para el abastecimiento de esta localidad, de Pollença, Muro y de otras poblaciones de la zona norte de la isla. Esta planta producirá cada día 14.000 metros cúbicos de agua, aunque el proyecto podría ampliarse hasta 21.000 metros cúbicos.
La desaladora de Andratx, con una inversión de 51,9 millones de euros, está adjudicada a la UTE formada por Ondeo Degremont y Copisa Constructora Pirenaica, y tendrá ocho pozos que suministrarán agua tanto a este municipio como a otras poblaciones de la Bahía de Palma. La producción de la planta será igual que la anterior.
En Ibiza, se construirá una desaladora, que ha sido adjudicada a FCC. Este proyecto está presupuestado en 42,99 millones y proveerá agua desalada a esta población y a otras localidades del noroeste de la isla ibicenca. La planta obtendrá 10.000 metros cúbicos de agua diarios, que se podrán aumentar hasta 15.000 metros cúbicos.
La planta de Ciudadela (Menorca) ha sido otorgada a la UTE formada por las empresas Pridesa Proyectos y Servicios y Tolo Pons. La obra, con la misma capacidad que la de Ibiza, prevé una inversión de 41,8 millones euros y dispondrá de cuatro pozos que abastecerán a esta localidad menorquina.

En Mallorca, existe además una fuente natural que supondrá una inyección de agua importante: Sa Costera. Este histórico chorro de agua deja caer al mar una media de 40.000 metros cúbicos de agua al día, caudal que ahora está siendo canalizado a Palma.
Con el proyecto previsto, cuando la obra esté terminada, esta cantidad de agua pasará directamente a la red de distribución de la bahía de Palma. FCC se ha adjudicado esta actuación, con una inversión de 56 millones de euros.
Energía hidráulica
El Gobierno autonómico quiere instalar turbinas en la nueva canalización que bombeará el agua de Sa Costera hasta Palma, para obtener energía hidráulica. Esta fórmula permitiría rebajar el coste del bombeo del agua en un 15% al año.
En 2004, la producción de agua desalada en Baleares aumentó un 18,6%, hasta llegar a los 23,6 hectómetros cúbicos, según el Informe Económico y Social de las Islas Baleares, elaborado por la caja de ahorros Sa Nostra. La red de plantas desaladoras instalada hasta la fecha en las Islas ha demostrado ser insuficiente.
La producción de agua desalada aumentó un 18,6% en 2004
Cuádruple proyecto
Sacyr y la Sociedad Anónima de Depuración y Tratamientos se ha adjudicado la desaladora de Alcudia, por 61,9 millones de euros.
La UTE Ondeo Degremont-Copisa se encargará de la planta de Andratx.
FCC se ha adjudicado el proyecto de Santa Eulalia (Ibiza).
La planta de Ciudadela (Menorca) ha sido otorgada a la UTE formada por Pridesa y Tolo Pons.
El Gobierno balear quiere instalar turbinas en el proyecto de Sa Costera para rebajar el coste del bombeo.