La CHJ no garantiza agua del Júcar a partir de julio de 2006 si no se aplican restricciones

Mié, 09/11/2005

Levante

Los recortes en la agricultura ascenderían al 80% en el peor escenario analizado
J. Sierra, Valencia.
La Confederación Hidrográfica del Júcar no garantiza la satisfacción de las demandas en este río- del que dependen casi 50.000 hectáreas de regadío- si se repiten las mismas aportaciones a los embalses del pasado año, según información suministrada a los regantes y usuarios en la Junta de Gobierno de la CHJ celebrada ayer.
La Confederación ha trasladado a los regantes la necesidad de proyectar la próxima temporada de riegos sobre los datos del «peor escenario posible», es decir, considerando que se repitan las aportaciones de los ríos registrada en el 2004 «pero asumiendo una restricción mayor de las dotaciones de riego dejándolas en el 80% de las del año hidrológico 2004-2005». Solo así quedarían al final de la campaña, el 31 de octubre de 2006, 115 hm3 en el conjunto de los embalses de la confederación que garantizarían el suministro a poblaciones.
La CHJ subraya en el informe entregado a los regantes lo excepcional del año 2004-2005, que comenzó con el máximo volumen embalsado de los últimos diez años y ha terminado por debajo de la media.
Con la reserva de agua disponible al 31 de octubre, no habría problemas si el año hidrológico 2005-06 «tuviera un comportamiento medio, pero al existir el antecedente de la sequía, la historia dice que el año siguiente a uno de escasez puede ser y de hecho es más probable que sea seco también, lo que podría llevar a una situación extrema», según el informe que se entregó ayer a los miembros de la Junta de Gobierno de la CHJ.
Los escenarios
Los tres escenarios elaborados por la confederación hidrográfica y entregados ayer a los usuarios son:que se repitan las aportaciones y demandas de los últimos diez años, que se mantengan las aportaciones y las demandas satisfechas en el año hidrológico 2004/2005 y que se repitan las aportaciones del 2004-2005 pero asumiendo unas restricciones mayores de las dotaciones del riego dejándolas en el 80% de las del 2004-2005.
Estos tres escenarios, vigentes para el conjunto de la cuenca, se complican extraordinariamente si se aplican al Júcar, donde los recursos se agotarían antes de comenzar agosto de 2006 si no se aplican desde este mismo las restricciones previstas para el conjunto de la cuenca -hasta el 80%- pero aplicadas sobre volúmenes que ya incluyen una restricción del 50% sobre las demandas agrícolas satisfechas en el año 2004-2005.