Aragón cobra el canon de saneamiento más caro de España
Lun, 24/10/2005
Aragón es la Comunidad Autónoma que cobra el canon de saneamiento más caro de todas las que aplican este impuesto ecológico para financiar la depuración de sus aguas residuales. El tributo, que ha llegado a triplicar el recibo en algunos municipios aragoneses, como Tauste, supone ya en algunos casos hasta tres cuartes partes de lo que se paga en total por el servicio de abastecimiento del agua.
El mismo consejero de Medio Ambiente, Alfredo Boné, reconocía este problema el viernes en un congreso del Consejo de Europa, en Estrasburgo. "Los costes de depurar aguas residuales en Aragón son más altos que en cualquier otra Comunidad, por nuestra extensión, dispersión territorial y baja densidad de población, lo que obliga a construir cientos de instalaciones, que además se ven encarecidas por la orografía", dijo. El consejero recordó que "son precisas 171 grandes obras para sanear las aguas residuales de unas 200.000 personas y en otras Comunidades basta una sola para hacer lo mismo".
El impuesto de saneamiento -que se compone de una cuota fija y de un tipo variable-, duplica en algunos casos al que se paga en otras Comunidades. En Aragón, la ley establece un fijo para usos domésticos de 3,66 euros por abonado y mes (43,92 euros al año), y uno variable de 0,44 euros por cada metro cúbico de agua consumida.
Estas cifras -fijadas tras un incremento muy polémico del 100% para este año-, superan ampliamente a las vigentes en otras regiones. En Murcia, el Ejecutivo cobra 25,70 euros por abonado y año, y 0,21 euros por metro cúbico. En Cantabria, donde se aplica el mismo modelo, el canon supone 4,27 euros por abonado al año y un tipo de 0,21 euros por metro cúbico. Navarra, La Rioja, Asturias o Galicia, sólo cargan en el recibo un gravamen variable y no repercuten al usuario un gasto fijo. Y el concepto variable es también inferior al aragonés: 0,27; 0,26 y 0,24 y 0,194 euros por metro cúbico, respectivamente.
Especial es la tarifa que repercute la Comunidad Valenciana a los usuarios por la depuración de sus aguas. Aunque la Generalitat también la divide en una cuota fija y otra variable, ambas son progresivas en función del número de habitantes de la población, a diferencia de Aragón, donde el canon es igual para todos. Así, por ejemplo, para una población entre 500 y 3.000 habitantes, la cuota fija es de 12,97 euros al año y la variable, de 0,128 euros. Ambas van creciendo hasta alcanzar la más alta, aquella que afecta a los municipios de más de 100.000 habitantes y que se sitúa en 23,87 euros al año y en 0,238 euros por metro cúbico consumido.
La competencia en depuración es municipal, por lo que no todas las Comunidades se responsabilizan del saneamiento de las aguas. En Andalucía y Madrid, son los Ayuntamientos los que la asumen y cobran el canon si deciden aplicarlo (en Aragón, son meros recaudadores).
El Ayuntamiento de Sevilla cobra 0,084 euros por metro cúbico desde este año y hasta 2.016 para financiar nuevas infraestructuras del agua. El de Madrid tiene un canon progresivo en función del consumo. Hasta 30 metros cúbicos, el gravamen es de 0,31 euros; de 20 a 60, de 0,33 euros; y para más de 60, 0,35 euros. En este caso, el canon supone en torno al 20% del importe del recibo, muy lejos del 75% que alcanza en algunos municipios aragoneses.
Superávit
La DGA reconoció hace unos días a HERALDO que, con los ingresos previstos, el sistema del canon de depuración tendrá superávit hasta que se finalice, por lo menos, la primera fase del Plan de Depuración, que incluye 90 obras a punto de adjudicarse. Por esta razón, el Ejecutivo anunció también que el impuesto se congelará el próximo año y que tampoco se propondrán subidas en las Cortes para 2007.
Algunos expertos consultados por este periódico consideran que la DGA debería haber optado por otro sistema en el caso de municipios pequeños y con pocas industrias. como los denominados filtros verdes (choperas o pequeñas lagunas en cascada que absorben el nitrógeno del agua y hasta los metales pesados), con menos costes de realización y de mantenimiento que las depuradoras. Con este método, usado en Castilla León y Castilla-La Mancha, también se evita otro problema de las depuradoras: la generación de gran cantidad de lodos.
Aunque Aragón aplica el canon de saneamiento más elevado de España, el precio del agua en la Comunidad es de los más bajos. El coste medio del metro cúbico es de 0,66 euros, menos de la mitad de lo que se paga en Canarias (1,68 euros), Islas Baleares (1,42 euros) y el País Vasco (1,15 euros)
El mismo consejero de Medio Ambiente, Alfredo Boné, reconocía este problema el viernes en un congreso del Consejo de Europa, en Estrasburgo. "Los costes de depurar aguas residuales en Aragón son más altos que en cualquier otra Comunidad, por nuestra extensión, dispersión territorial y baja densidad de población, lo que obliga a construir cientos de instalaciones, que además se ven encarecidas por la orografía", dijo. El consejero recordó que "son precisas 171 grandes obras para sanear las aguas residuales de unas 200.000 personas y en otras Comunidades basta una sola para hacer lo mismo".
El impuesto de saneamiento -que se compone de una cuota fija y de un tipo variable-, duplica en algunos casos al que se paga en otras Comunidades. En Aragón, la ley establece un fijo para usos domésticos de 3,66 euros por abonado y mes (43,92 euros al año), y uno variable de 0,44 euros por cada metro cúbico de agua consumida.
Estas cifras -fijadas tras un incremento muy polémico del 100% para este año-, superan ampliamente a las vigentes en otras regiones. En Murcia, el Ejecutivo cobra 25,70 euros por abonado y año, y 0,21 euros por metro cúbico. En Cantabria, donde se aplica el mismo modelo, el canon supone 4,27 euros por abonado al año y un tipo de 0,21 euros por metro cúbico. Navarra, La Rioja, Asturias o Galicia, sólo cargan en el recibo un gravamen variable y no repercuten al usuario un gasto fijo. Y el concepto variable es también inferior al aragonés: 0,27; 0,26 y 0,24 y 0,194 euros por metro cúbico, respectivamente.
Especial es la tarifa que repercute la Comunidad Valenciana a los usuarios por la depuración de sus aguas. Aunque la Generalitat también la divide en una cuota fija y otra variable, ambas son progresivas en función del número de habitantes de la población, a diferencia de Aragón, donde el canon es igual para todos. Así, por ejemplo, para una población entre 500 y 3.000 habitantes, la cuota fija es de 12,97 euros al año y la variable, de 0,128 euros. Ambas van creciendo hasta alcanzar la más alta, aquella que afecta a los municipios de más de 100.000 habitantes y que se sitúa en 23,87 euros al año y en 0,238 euros por metro cúbico consumido.
La competencia en depuración es municipal, por lo que no todas las Comunidades se responsabilizan del saneamiento de las aguas. En Andalucía y Madrid, son los Ayuntamientos los que la asumen y cobran el canon si deciden aplicarlo (en Aragón, son meros recaudadores).
El Ayuntamiento de Sevilla cobra 0,084 euros por metro cúbico desde este año y hasta 2.016 para financiar nuevas infraestructuras del agua. El de Madrid tiene un canon progresivo en función del consumo. Hasta 30 metros cúbicos, el gravamen es de 0,31 euros; de 20 a 60, de 0,33 euros; y para más de 60, 0,35 euros. En este caso, el canon supone en torno al 20% del importe del recibo, muy lejos del 75% que alcanza en algunos municipios aragoneses.
Superávit
La DGA reconoció hace unos días a HERALDO que, con los ingresos previstos, el sistema del canon de depuración tendrá superávit hasta que se finalice, por lo menos, la primera fase del Plan de Depuración, que incluye 90 obras a punto de adjudicarse. Por esta razón, el Ejecutivo anunció también que el impuesto se congelará el próximo año y que tampoco se propondrán subidas en las Cortes para 2007.
Algunos expertos consultados por este periódico consideran que la DGA debería haber optado por otro sistema en el caso de municipios pequeños y con pocas industrias. como los denominados filtros verdes (choperas o pequeñas lagunas en cascada que absorben el nitrógeno del agua y hasta los metales pesados), con menos costes de realización y de mantenimiento que las depuradoras. Con este método, usado en Castilla León y Castilla-La Mancha, también se evita otro problema de las depuradoras: la generación de gran cantidad de lodos.
Aunque Aragón aplica el canon de saneamiento más elevado de España, el precio del agua en la Comunidad es de los más bajos. El coste medio del metro cúbico es de 0,66 euros, menos de la mitad de lo que se paga en Canarias (1,68 euros), Islas Baleares (1,42 euros) y el País Vasco (1,15 euros)