El Gobierno impulsará la venta de derechos de agua para paliar la sequía del Segura y el Júcar
Mar, 11/10/2005
El Gobierno impulsará la compraventa de derecho de agua para paliar la sequía en las cuencas del Júcar y del Segura. El intercambio o cesión de derechos del agua entre diferentes cuencas hidrográficas fue una de las medidas tratadas ayer en una reunión entre los ministerios de Medio Ambiente y Agricultura, y los gobiernos de la Comunidad y Murcia con el fin de coordinar actuaciones contra la sequía. El consejero de Infraestructuras, José Ramón García Antón, afirmó que se estudia la reasignación de unos 100 hectómetros cúbicos para paliar el déficit del Segura y Júcar.
El secretario general para el Territorio y la Biodiversidad del ministerio, Antonio Serrano, señaló tras la reunión celebrada en Madrid que las confederaciones hidrográficas crearán comisiones técnicas para analizar 'todas las posibilidades' de aprovechamiento de agua con el fin de que el verano próximo se pueda 'afrontar con garantías' para el abastecimiento urbano y turístico en Murcia y la Comunidad Valenciana. Estas comisiones, en las que participarán ambas comunidades autónomas, se reunirá periódicamente para decidir medidas de coordinación y actuaciones concretas, incluidas las de emergencia, para afrontar la sequía, indicó Serrano. En esa línea, tanto la Confederación Hidrográfica del Segura como la del Júcar han elaborado los protocolos de sequía correspondientes, que prevén un 'amplio conjunto de actuaciones'.
Dentro de las medidas previstas, los responsables ministeriales y autonómicos trataron la implantación de los llamados centros de intercambio de derechos de agua, que permitirán la reasignación de recursos entre cuencas. Esta compraventa de agua, como anunció la semana pasada la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, permitirá a regantes y empresarios de Murcia y la Comunidad Valenciana adquirir agua en cuencas como la del Tajo. La puesta en marcha de este sistema precisa de un decreto ley que el ministerio prevé aprobar a finales de mes. El Gobierno ya aprobó en octubre de 2004 la creación de los centros de intercambio en las confederaciones del Júcar, Segura y Guadiana -los organismos hidrográficos controlarán la oferta pública de compra o cesión de derechos de agua- como antesala de los bancos de agua. Según explicó Serrano, el Gobierno busca ampliar el sistema de forma que las transacciones se realicen con aguas del Tajo, Júcar y Segura, y poner de acuerdo a usuarios de Madrid, Castilla-La Mancha, Murcia y Comunidad Valenciana.
El consejero de Infraestructuras, José Ramón García Antón, afirmó tras la reunión que los cálculos del ministerio apuntan a que hay posibilidades de reasignar unos 100 hectómetros cúbicos para combatir la sequía del Segura y también en el Júcar. 'A las cuencas del Segura y del Júcar podrían llegar volúmenes importantes', dijo el consejero, quien añadió que con los bancos de agua 'entre Tajo, Júcar y Segura no habría ningún problema para hablar de cientos de hectómetros cúbicos que se puedan mover de un sitio a otro'.
García Antón destacó que los bancos de agua serán posibles 'con conducciones' como el trasvase Tajo-Segura. El consejero también resaltó que se agotarán las posibilidades de ahorro y reutilización de aguas depuradas, de las que los regantes ya consumen unos 150 hectómetros cúbicos de forma directa y unos 300 a través de los aportes a los ríos. Además, criticó que la coordinación con el ministerio no se estableciera en estos términos antes de la sequía.
En Alicante, la falta de agua llevó ayer a la Comisión Provincial del Agua a aprobar por unanimidad pedir un riego de socorro para los agricultores del trasvase Tajo-Segura, según explicó el presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, al término de la segunda sesión de este órgano. Ripoll dijo: 'Aún reconociendo la prioridad del abastecimiento humano, la Comisión Provincial del Agua quiere pedir un riego de socorro para los agricultores del trasvase Tajo-Segura'. Ripoll apuntó que en el actual desembalse para el acueducto 'no se ha reconocido ni un solo hectómetro cúbico para el riego de los campos'.
Por su lado, el portavoz socialista Antonio Amorós exigió a Ripoll que muestre los informes sobre la calidad del agua en las dos tomas que se barajan para trasvasar del Júcar al Vinalopó. Los socialistas dijeron desconocer si el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, 'apoya o no a la Comisión de Agua y a su presidente, Ripoll', dado que este órgano no tiene una función ejecutiva 'ni soporte jurídico', y para ello Amorós propuso que Camps convoque la mesa autonómica del agua para lograr un pacto 'alejado de la confrontación'.
El secretario de Medio Ambiente del PSPV-PSOE, Francesc Signes, pidió a la Generalitat que apoye un 'pacto del agua' frente a la 'estrategia de crispación'.
El secretario general para el Territorio y la Biodiversidad del ministerio, Antonio Serrano, señaló tras la reunión celebrada en Madrid que las confederaciones hidrográficas crearán comisiones técnicas para analizar 'todas las posibilidades' de aprovechamiento de agua con el fin de que el verano próximo se pueda 'afrontar con garantías' para el abastecimiento urbano y turístico en Murcia y la Comunidad Valenciana. Estas comisiones, en las que participarán ambas comunidades autónomas, se reunirá periódicamente para decidir medidas de coordinación y actuaciones concretas, incluidas las de emergencia, para afrontar la sequía, indicó Serrano. En esa línea, tanto la Confederación Hidrográfica del Segura como la del Júcar han elaborado los protocolos de sequía correspondientes, que prevén un 'amplio conjunto de actuaciones'.
Dentro de las medidas previstas, los responsables ministeriales y autonómicos trataron la implantación de los llamados centros de intercambio de derechos de agua, que permitirán la reasignación de recursos entre cuencas. Esta compraventa de agua, como anunció la semana pasada la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, permitirá a regantes y empresarios de Murcia y la Comunidad Valenciana adquirir agua en cuencas como la del Tajo. La puesta en marcha de este sistema precisa de un decreto ley que el ministerio prevé aprobar a finales de mes. El Gobierno ya aprobó en octubre de 2004 la creación de los centros de intercambio en las confederaciones del Júcar, Segura y Guadiana -los organismos hidrográficos controlarán la oferta pública de compra o cesión de derechos de agua- como antesala de los bancos de agua. Según explicó Serrano, el Gobierno busca ampliar el sistema de forma que las transacciones se realicen con aguas del Tajo, Júcar y Segura, y poner de acuerdo a usuarios de Madrid, Castilla-La Mancha, Murcia y Comunidad Valenciana.
El consejero de Infraestructuras, José Ramón García Antón, afirmó tras la reunión que los cálculos del ministerio apuntan a que hay posibilidades de reasignar unos 100 hectómetros cúbicos para combatir la sequía del Segura y también en el Júcar. 'A las cuencas del Segura y del Júcar podrían llegar volúmenes importantes', dijo el consejero, quien añadió que con los bancos de agua 'entre Tajo, Júcar y Segura no habría ningún problema para hablar de cientos de hectómetros cúbicos que se puedan mover de un sitio a otro'.
García Antón destacó que los bancos de agua serán posibles 'con conducciones' como el trasvase Tajo-Segura. El consejero también resaltó que se agotarán las posibilidades de ahorro y reutilización de aguas depuradas, de las que los regantes ya consumen unos 150 hectómetros cúbicos de forma directa y unos 300 a través de los aportes a los ríos. Además, criticó que la coordinación con el ministerio no se estableciera en estos términos antes de la sequía.
En Alicante, la falta de agua llevó ayer a la Comisión Provincial del Agua a aprobar por unanimidad pedir un riego de socorro para los agricultores del trasvase Tajo-Segura, según explicó el presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, al término de la segunda sesión de este órgano. Ripoll dijo: 'Aún reconociendo la prioridad del abastecimiento humano, la Comisión Provincial del Agua quiere pedir un riego de socorro para los agricultores del trasvase Tajo-Segura'. Ripoll apuntó que en el actual desembalse para el acueducto 'no se ha reconocido ni un solo hectómetro cúbico para el riego de los campos'.
Por su lado, el portavoz socialista Antonio Amorós exigió a Ripoll que muestre los informes sobre la calidad del agua en las dos tomas que se barajan para trasvasar del Júcar al Vinalopó. Los socialistas dijeron desconocer si el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, 'apoya o no a la Comisión de Agua y a su presidente, Ripoll', dado que este órgano no tiene una función ejecutiva 'ni soporte jurídico', y para ello Amorós propuso que Camps convoque la mesa autonómica del agua para lograr un pacto 'alejado de la confrontación'.
El secretario de Medio Ambiente del PSPV-PSOE, Francesc Signes, pidió a la Generalitat que apoye un 'pacto del agua' frente a la 'estrategia de crispación'.