La modificación del trasvase obligará a los usuarios a renegociar su préstamo

Lun, 10/10/2005

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El presidente de la Junta Central del Júcar-Vinalopó, Andrés Martínez, reitera que «si Medio Ambiente cambia la toma a Cullera es imposible que podamos afrontar el sobrecoste»

F. J. BENITO

La modificación del proyecto para construir el trasvase Júcar-Vinalopó cambiando la toma del agua de Cortes de Pallás a Cullera obligará, además de a someter la nueva alternativa a la declaración de impacto ambiental que deberá aprobar la Generalitat, a renegociar las condiciones del crédito sindicado que concedieron los 12 bancos a la Junta Central de Usuarios para que ésta pudiera hacer frente al pago de los 75 millones de euros correspondientes a su parte. Los usuarios sólo han aportado 700.000 euros como comisión de apertura y deben 41 millones a Aguas del Júcar pero, técnicamente, tampoco pueden acceder hoy a un préstamo que no han utilizado, aunque por circunstancias ajenas a su voluntad: las incertidumbres provocadas por el anuncio de cambio del proyecto -el crédito concedido sirve para una actuación concreta, nunca es general- y la negociación abierta el pasado febrero con el Ministerio para cambiar la forma de pago de las obras.

El presidente de la Junta Central de Usuarios del Trasvase Júcar-Vinalopó-l´Alacantí-Marina Baixa, Andrés Martínez, ha convocado para la próxima semana una asamblea del pleno -16 miembros- de la junta para analizar la situación en la que ha quedado el proyecto tras las visitas a Bruselas de la propia Junta y del Ministerio de Medio Ambiente. Aunque la decisión final del cambio de toma y, por tanto, modificación del proyecto corresponde a la ministra Cristina Narbona, nadie duda ya de que el Ministerio tiene decidido trasladar el arranque del trasvase a Cullera tras recibir el respaldo comunitario a la financiación, aunque incorporando al proyecto el tramo I -impulsión de Cortes de Pallás- que se convertiría en una central hidroeléctrica propiedad de Aguas el Júcar y la Junta.
Una opción que tampoco satisface a los usuarios ya que, según manifestó ayer Andrés Martínez, «desde Cullera no nos salen las cuentas, por lo que ratifico lo que trasladamos a la UE: No podemos asumir un Júcar-Vinalopó que no tome el agua en Cortes de Pallás». Martínez subrayó, por otro lado, que «lo peor es que ya no nos creemos al Gobierno por muy buenas intenciones que demuestre. Es imposible que el Ministerio de Medio Ambiente pueda tramitar la nueva petición de ayudas (proyectos incluidos) en los próximos 9 meses, cuando el anterior Gobierno del PP tardó tres años en tramitarlo y eso que tenía mayoría absoluta en Madrid y la Comunidad Valenciana. Desgraciadamente ya no podemos creernos nada», lamentó Martínez.
El secretario de Estado para la Biodiversidad, Antonio Serrano, volverá a reunirse mañana en Madrid con el conseller José Ramón García Antón, su interlocutor con el Consell. Será el tercer encuentro en un mes pero no parece que vaya a avanzarse demasiado tras el fiasco de la reunión del pasado miércoles.

Por otra parte, la plataforma Mesa pel Xúquer y el colectivo alicantino Aigua i Diàleg instaron ayer al Gobierno a concluir de forma urgente y «lo antes posible» el «tema del trazado» del trasvase Júcar-Vinalopó para poder resolver los problemas del agua de estas dos zonas de la Comunidad. Tras la reunión que mantuvieron en Sueca ambas formaciones, el portavoz de Xúquer Viu -integrada en la Mesa pel Xúquer-, Francisco Sanz, aseguró que las dos entidades están de acuerdo en solicitar al Ministerio de Medio Ambiente una solución sobre el trazado del trasvase.