Narbona anuncia que la mejora de los riegos de Marchena estará lista en octubre de 2006
Mar, 06/09/2005
Insistió en que la modernización supondrá un ahorro de unos 10 hectómetros cúbicos La titular de Medio Ambiente hizo una visita a la zona en obras P. W. R. / A. S./LORCA DE CHARLA. Narbona conversa con el alcalde Miguel Navarro y Fuentes Zorita, ayer durante la visita a las obras del ministerio en Lorca. / PACO ALONSO / AGM XXX
LOS DATOS DE LA OBRA Actuación: Redes de riegos, desagües y caminos Sector VIII, subsector III, Marchena.
Superficie neta de riego: 2.341,5 hectáreas.
Dotación: 1 litro por segundo y hectárea.
Presión de servicio: 3 kilogramos por centímetro cuadrado.
Total tubería de riego: 34.260 metros.
Tipos de tubería: Hormigón armado con camisa de chapa en más de 3 kilómetros; poliéster reforzado con fibra de vidrio en 5 kilómetros y PVC en
Total entubado brazales: 4.150 metros.
Tipo de tubería: Hormigón armado.
Caminos de servicio: Tienen una anchura que oscila entre 5 y 6 metros.
Inicio de las obras: Abril de 2005.
Plazo de ejecución: 24 meses según la adjudicación.
Inversión: 21 millones de euros.
Promotor: Ministerio de Medio Ambiente a través de la Confederación Hidrográfica del Segura.
Regantes beneficiados: 1.207
La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, dedico ayer tarde varias horas a visitar las obras de modernización del regadío que se vienen realizando desde el pasado mes de abril en el sector de Marchena, tras su declaración de emergencia por el Consejo de Ministros.
La noticia positiva, de cara al problema de sequía que padece esta zona es que, según anunció la ministra, las obras marchan a un ritmo tal que estarán terminadas antes de lo previsto, que era en el 2007. Narbona aventuró que lo más probable es que se pueda utilizar la nueva red en octubre del próximo año.
En una agobiante rueda de prensa, a casi 40 grados de temperatura, dentro del edificio de la Casa Mata, que es el centro de distribución de los riegos en Lorca, Narbona afirmó que «he querido venir a lo que es el corazón del regadío donde se puede ver muy bien como conviven muchos miles de hectáreas que están absolutamente modernizadas, donde se puede controlar perfectamente cuánta agua se consume, qué calidad tiene ese agua, si se detecta cualquier tipo de fuga o pérdida, y esos regadíos modernos, ultra modernos, diría yo, conviven todavía con más de 3.000 hectáreas de regadíos que hay que modernizar».
La ministra agregó que «conviene recordar que las obras de modernización que se han hecho aquí en esta comarca, se hicieron básicamente bajo gobierno socialista, que dejó incluso adjudicadas algunas de las obras, que ha sido lo único que se ha hecho en estos últimos ocho años. Pero, estas obras que ahora visito, las obras de modernización que estaban pendientes, este gobierno las está ejecutando por la vía de emergencia, lo cual significa que van a poder estar terminadas antes de los previsto. La buena noticia es que estas obras, que tenían inicialmente como plazo para terminar el 2007, podrían estar acabadas en octubre de 2006».
La titular de Medio Ambiente insistió en este detalle y apunto que «todo el conjunto de obras que van a hacer aquí, en Lorca, suponen una inversión para el Ministerio de más de 60 millones de euros y van a permitir disponer de 10 hectómetros cúbicos más de agua. Por lo tanto, el Ministerio ha querido acentuar al máximo el trabajo sobre la modernización que estaba pendiente, y hoy, voy a ver esas obras en curso, que como digo, van más rápidas que lo que teníamos inicialmente previsto».
La segunda etapa del recorrido de la ministra por el campo lorquino fue en la diputación de Pulgara, justo en la zona en que la tubería general que abastecerá los riegos de Marchena, está a punto de atravesar la carretera para entrar en la zona a mejorar. Al igual que en la Casa Mata, Narbona, que estaba acompañada por el presidente de la Confederación Hidrográfica, José Salvador Fuentes Zorita; el alcalde, Miguel Navarro; y el secretario regional del PSOE, Pedro Saura, entre otros, escuchó las explicaciones de los técnicos. Después visitó también otros tramos en obras de riegos secundarios y tuvo ocasión de comprobar en directo la desastrosa situación del campo lorquino en este momento.
Agua desalada
Tanto la Comunidad de Regantes como la organización COAG, con cuya junta directiva se reunió la ministra al finalizar su recorrido por el campo, han mostrado su preocupación por el precio que tendrá el agua procedente de las desaladoras. En ambos casos ponen como tope los treinta céntimos de euro por metro cúbico, cuando se baraja un precio en torno a los 45 céntimos.
Estas cantidades aportadas por el Ministerio de Medio Ambiente no son «reales», según los regantes, ya que los precios que se aportan se refieren al agua en planta, y no se contempla los costes añadidos de elevación e impulsión, que en el caso de Lorca, desde la depuradora de Águilas podrían suponer hasta un incremento de 18 céntimos el metro cúbico. Incluso los regantes han llegado a plantearse si podrían sacar adelante sus cosechas a esos precios, y qué podría producirse para que luego fuera rentable en los mercados.
Preguntada sobre este particular Cristina Narbona indicó que «creo que hace ya muchos meses, cuando se aprobó el programa AGUA para las cuencas mediterráneas que había una horquilla de precios que, como máximo, será de 30 céntimos de euro el metro cúbico. Aplicar este precio a la agricultura significa subvencionar el coste del agua en un 33%, porque el coste real del agua desalada es de 45 céntimos».
Soluciones
En cuanto a otros medios para aliviar la situación en el Alto Guadalentín, la ministra afirmó que «estamos trabajando en identificar esas soluciones que permitan, entre otras cosas, que en los acuíferos que han sido explotados por usuarios incluso de otros territorios, poder en primer lugar recuperar esas aguas que se están utilizando y que corresponden a los regantes del Alto Guadalentín».
Para la ministra «existe un abanico de posibilidades que abre la desalación para intercambiar agua. Ese es el caso de los regantes de ÁÁguilas que están extrayendo una cantidad significativa de agua de pozos del acuífero del Alto Guadalentín y que ya están de acuerdo en dejar de extraerla cuando tengan la desaladora».
En este sentido, la ministra apuntó que la desaladora de ÁÁguilas va a salir muy pronto a información pública porque, como ya saben, hay un acuerdo y un proyecto por parte del Ministerio. Luego, vamos a trabajar como venimos haciendo con todas las organizaciones. Yo agradezco a COAG la actitud constructiva que está teniendo».
LOS DATOS DE LA OBRA Actuación: Redes de riegos, desagües y caminos Sector VIII, subsector III, Marchena.
Superficie neta de riego: 2.341,5 hectáreas.
Dotación: 1 litro por segundo y hectárea.
Presión de servicio: 3 kilogramos por centímetro cuadrado.
Total tubería de riego: 34.260 metros.
Tipos de tubería: Hormigón armado con camisa de chapa en más de 3 kilómetros; poliéster reforzado con fibra de vidrio en 5 kilómetros y PVC en
Total entubado brazales: 4.150 metros.
Tipo de tubería: Hormigón armado.
Caminos de servicio: Tienen una anchura que oscila entre 5 y 6 metros.
Inicio de las obras: Abril de 2005.
Plazo de ejecución: 24 meses según la adjudicación.
Inversión: 21 millones de euros.
Promotor: Ministerio de Medio Ambiente a través de la Confederación Hidrográfica del Segura.
Regantes beneficiados: 1.207
La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, dedico ayer tarde varias horas a visitar las obras de modernización del regadío que se vienen realizando desde el pasado mes de abril en el sector de Marchena, tras su declaración de emergencia por el Consejo de Ministros.
La noticia positiva, de cara al problema de sequía que padece esta zona es que, según anunció la ministra, las obras marchan a un ritmo tal que estarán terminadas antes de lo previsto, que era en el 2007. Narbona aventuró que lo más probable es que se pueda utilizar la nueva red en octubre del próximo año.
En una agobiante rueda de prensa, a casi 40 grados de temperatura, dentro del edificio de la Casa Mata, que es el centro de distribución de los riegos en Lorca, Narbona afirmó que «he querido venir a lo que es el corazón del regadío donde se puede ver muy bien como conviven muchos miles de hectáreas que están absolutamente modernizadas, donde se puede controlar perfectamente cuánta agua se consume, qué calidad tiene ese agua, si se detecta cualquier tipo de fuga o pérdida, y esos regadíos modernos, ultra modernos, diría yo, conviven todavía con más de 3.000 hectáreas de regadíos que hay que modernizar».
La ministra agregó que «conviene recordar que las obras de modernización que se han hecho aquí en esta comarca, se hicieron básicamente bajo gobierno socialista, que dejó incluso adjudicadas algunas de las obras, que ha sido lo único que se ha hecho en estos últimos ocho años. Pero, estas obras que ahora visito, las obras de modernización que estaban pendientes, este gobierno las está ejecutando por la vía de emergencia, lo cual significa que van a poder estar terminadas antes de los previsto. La buena noticia es que estas obras, que tenían inicialmente como plazo para terminar el 2007, podrían estar acabadas en octubre de 2006».
La titular de Medio Ambiente insistió en este detalle y apunto que «todo el conjunto de obras que van a hacer aquí, en Lorca, suponen una inversión para el Ministerio de más de 60 millones de euros y van a permitir disponer de 10 hectómetros cúbicos más de agua. Por lo tanto, el Ministerio ha querido acentuar al máximo el trabajo sobre la modernización que estaba pendiente, y hoy, voy a ver esas obras en curso, que como digo, van más rápidas que lo que teníamos inicialmente previsto».
La segunda etapa del recorrido de la ministra por el campo lorquino fue en la diputación de Pulgara, justo en la zona en que la tubería general que abastecerá los riegos de Marchena, está a punto de atravesar la carretera para entrar en la zona a mejorar. Al igual que en la Casa Mata, Narbona, que estaba acompañada por el presidente de la Confederación Hidrográfica, José Salvador Fuentes Zorita; el alcalde, Miguel Navarro; y el secretario regional del PSOE, Pedro Saura, entre otros, escuchó las explicaciones de los técnicos. Después visitó también otros tramos en obras de riegos secundarios y tuvo ocasión de comprobar en directo la desastrosa situación del campo lorquino en este momento.
Agua desalada
Tanto la Comunidad de Regantes como la organización COAG, con cuya junta directiva se reunió la ministra al finalizar su recorrido por el campo, han mostrado su preocupación por el precio que tendrá el agua procedente de las desaladoras. En ambos casos ponen como tope los treinta céntimos de euro por metro cúbico, cuando se baraja un precio en torno a los 45 céntimos.
Estas cantidades aportadas por el Ministerio de Medio Ambiente no son «reales», según los regantes, ya que los precios que se aportan se refieren al agua en planta, y no se contempla los costes añadidos de elevación e impulsión, que en el caso de Lorca, desde la depuradora de Águilas podrían suponer hasta un incremento de 18 céntimos el metro cúbico. Incluso los regantes han llegado a plantearse si podrían sacar adelante sus cosechas a esos precios, y qué podría producirse para que luego fuera rentable en los mercados.
Preguntada sobre este particular Cristina Narbona indicó que «creo que hace ya muchos meses, cuando se aprobó el programa AGUA para las cuencas mediterráneas que había una horquilla de precios que, como máximo, será de 30 céntimos de euro el metro cúbico. Aplicar este precio a la agricultura significa subvencionar el coste del agua en un 33%, porque el coste real del agua desalada es de 45 céntimos».
Soluciones
En cuanto a otros medios para aliviar la situación en el Alto Guadalentín, la ministra afirmó que «estamos trabajando en identificar esas soluciones que permitan, entre otras cosas, que en los acuíferos que han sido explotados por usuarios incluso de otros territorios, poder en primer lugar recuperar esas aguas que se están utilizando y que corresponden a los regantes del Alto Guadalentín».
Para la ministra «existe un abanico de posibilidades que abre la desalación para intercambiar agua. Ese es el caso de los regantes de ÁÁguilas que están extrayendo una cantidad significativa de agua de pozos del acuífero del Alto Guadalentín y que ya están de acuerdo en dejar de extraerla cuando tengan la desaladora».
En este sentido, la ministra apuntó que la desaladora de ÁÁguilas va a salir muy pronto a información pública porque, como ya saben, hay un acuerdo y un proyecto por parte del Ministerio. Luego, vamos a trabajar como venimos haciendo con todas las organizaciones. Yo agradezco a COAG la actitud constructiva que está teniendo».