Los regantes informarán a la UE de la paralización del trasvase
Lun, 29/08/2005
Los usuarios del Vinalopó advertirán a la Comisión Europea de la pérdida de los 80 millones concedidos como subvenciones
A. P.
La Junta Central de Usuarios del Vinalopó, l´Alacantí y Consorcio de Aguas de la Marina Baixa está preparando un informe técnico que remitirá a la Comisión Europea en las próximas semanas para comunicar a esta institución los últimos acontecimientos ocurridos en el último mes sobre el proyecto del trasvase de agua del Júcar al Vinalopó, subvencionado con fondos Feder con 80 millones de euros.
Esta entidad -que aglutina a regantes y a usuarios del suministro urbano- tiene intención de enviar a Bruselas antes del 15 de septiembre un informe detallado sobre la propuesta del cambio de toma de agua de la conducción que estudia ahora el Gobierno, así como de la paralización temporal de parte de las obras del proyecto, autorizado por la Unión Europea y ejecutado en un 43%. Del mismo modo, también se remitirán los informes de Aguas del Júcar y de la Fundación Nueva Cultura del Agua sobre las diferencias en el trazado y se comunicará la demanda en curso interpuesta por el presidente de la Junta Central de Usuarios del Vinalopó, Andrés Martínez, contra la decisión de detener las obras de la conducción durante dos meses
«Vamos a hacer llegar a Europa nuestra opinión de lo que está sucediendo porque deben saber que si se cambia algo del proyecto será por capricho del Gobierno, no por ninguna otra causa», apunta Martínez, que añade que «nuestra obligación es defender los fondos europeos que se dieron para ese proyecto, y no otro, que ahora están en peligro de perderse si se cambiara el trazado».
El representante de los usuarios recuerda que las ayudas concedidas deben certificarse como gasto ante la Unión Europea antes del 31 de diciembre de 2008, un plazo que sólo podría cumplirse de mantenerse el proyecto actual, ya que, en caso de modificarse, el propio informe de la empresa estatal Aguas del Júcar de abril de 2005 señalaba que un cambio implicaría al menos tres años de retraso en la ejecución de la obra, siendo «optimistas».
«Creemos que debemos hacer llegar a Europa nuestra preocupación ante el riesgo que hay de perder las subvenciones», concluyó Andrés Martínez, que agregó que el mismo informe se remitirá también al Ministerio de Hacienda, por las repercusiones económicas que un cambio tendría en la sociedad Aguas del Júcar, ya que, según su propio informe, le conduciría a la «quiebra técnica».
A. P.
La Junta Central de Usuarios del Vinalopó, l´Alacantí y Consorcio de Aguas de la Marina Baixa está preparando un informe técnico que remitirá a la Comisión Europea en las próximas semanas para comunicar a esta institución los últimos acontecimientos ocurridos en el último mes sobre el proyecto del trasvase de agua del Júcar al Vinalopó, subvencionado con fondos Feder con 80 millones de euros.
Esta entidad -que aglutina a regantes y a usuarios del suministro urbano- tiene intención de enviar a Bruselas antes del 15 de septiembre un informe detallado sobre la propuesta del cambio de toma de agua de la conducción que estudia ahora el Gobierno, así como de la paralización temporal de parte de las obras del proyecto, autorizado por la Unión Europea y ejecutado en un 43%. Del mismo modo, también se remitirán los informes de Aguas del Júcar y de la Fundación Nueva Cultura del Agua sobre las diferencias en el trazado y se comunicará la demanda en curso interpuesta por el presidente de la Junta Central de Usuarios del Vinalopó, Andrés Martínez, contra la decisión de detener las obras de la conducción durante dos meses
«Vamos a hacer llegar a Europa nuestra opinión de lo que está sucediendo porque deben saber que si se cambia algo del proyecto será por capricho del Gobierno, no por ninguna otra causa», apunta Martínez, que añade que «nuestra obligación es defender los fondos europeos que se dieron para ese proyecto, y no otro, que ahora están en peligro de perderse si se cambiara el trazado».
El representante de los usuarios recuerda que las ayudas concedidas deben certificarse como gasto ante la Unión Europea antes del 31 de diciembre de 2008, un plazo que sólo podría cumplirse de mantenerse el proyecto actual, ya que, en caso de modificarse, el propio informe de la empresa estatal Aguas del Júcar de abril de 2005 señalaba que un cambio implicaría al menos tres años de retraso en la ejecución de la obra, siendo «optimistas».
«Creemos que debemos hacer llegar a Europa nuestra preocupación ante el riesgo que hay de perder las subvenciones», concluyó Andrés Martínez, que agregó que el mismo informe se remitirá también al Ministerio de Hacienda, por las repercusiones económicas que un cambio tendría en la sociedad Aguas del Júcar, ya que, según su propio informe, le conduciría a la «quiebra técnica».