Las restricciones de agua podrían empezar a finales de septiembre

Mar, 23/08/2005

La Vanguardia

MEDIO AMBIENTE

Los aguaceros del fin de semana no alivian la sequía, pues no se dieron en las cabeceras de los ríos que tienen embalses

ANTONIO CERRILLO
barcelona. - Las restricciones domésticas de agua podrían iniciarse en Catalunya (especialmente, en la región de Barcelona) a finales de septiembre o principios de octubre, si no llueve, según las previsiones de la Agència Catalana de l'Aigua. Las lluvias del pasado fin de semana no han aliviado la situación ni han servido para mejorar el nivel de los embalses que abastecen Barcelona y Girona.
La Agència de l'Aigua trabaja en estos momentos en la elaboración de un segundo decreto contra la sequía, que incorporaría, en esta ocasión, las restricciones de agua de uso domiciliario, al constatarse que las reservas de agua en los grandes embalses del Ter y el Llobregat no experimentan cambios.
Este decreto podría ser aprobado por el Consell Executiu en su reunión del próximo 30 de agosto o en la del día 6 de septiembre, según informó ayer Jaume Solà, director de la Agència Catalana de l'Aigua. El decreto considerará las prioridades a la hora de gestionar la falta de agua en todo el territorio y tendrá en cuenta los planes de emergencia presentados por los ayuntamientos de más de 20.000 habitantes.
En estos momentos, en Catalunya está en vigor un primer decreto contra la sequía, que limita las dotaciones de agua en numerosos usos (agrícolas, hidroeléctricos, riego en campos de golf y usos más superfluos en la limpieza y jardinería urbana); y ahora, incluso, se está programando activar un segundo nivel de excepcionalidad de este primer decreto, que significaría, sobre todo, dar una nueva vuelta de tuerca a las dotaciones para riego agrícola.
Aun así, la Agència Catalana de l'Aigua no da por hecho ni mucho menos que se vayan a introducir las restricciones domésticas, convencida de que aún será posible que la situación se alivie con lluvias en un futuro inmediato. De hecho, el calendario anterior hacía temer un adelanto de las restricciones. Sin embargo, el acuerdo alcanzando con los regantes del canal de la margen derecha del Llobregat ha permitido ganar 20 días.
Mediante este acuerdo, los payeses del Baix Llobregat dejan de regar con agua del río y han empezado a hacerlo íntegramente con aguas residuales saneadas en las depuradoras de la comarca (en Sant Feliu y en El Prat).
Las precipitaciones de los últimos días no han contribuido a paliar la situación dramática que presentan los embalses de las cuencas catalanas. Tal y como se vaticinó el viernes, las tormentas se han registrado sobre todo en las zonas costeras y no en las cabeceras de los ríos, que son el lugar apropiado para que el caudal pueda acumularse en los embalses.
De hecho, el nivel de las reservas en Catalunya no se ha movido -aunque en los próximos días las filtraciones y escorrentías pueden comportar algunas aportaciones-. Los embalses del Llobregat ayer estaban al 25,18% de su capacidad máxima; y, en concreto, el de la Llosa del Cavall, al 17%. Catalunya guarda ahora sólo el 30% de las reservas de agua potenciales, frente al 79% que almacenaba el pasado año por estas mismas fechas.


Los embalses del Llobregat siguen al 25% de su capacidad y el de la Llosa del Cavall, sólo al 17%