El presidente de Seiasa dice que un cambio en el trasvase Júcar-Vinalopó no provocará retrasos en la obra

Sáb, 13/08/2005

Europa Press

El presidente de la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias de la Meseta Sur SA (Seiasa), Francisco Rodríguez Mulero, aseguró hoy que la ejecución del trasvase Júcar-Vinalopó es "incuestionable", y apuntó que un posible cambio en una parte del trazado servirá para "asegurar el agua" y no provocará retrasos en los plazos de esta obra, que inicialmente estaba previsto que quedara finalizada en 2010.
Durante la presentación hoy en Alicante de las inversiones proyectadas por el Gobierno para la modernización de regadíos en la provincia, Rodríguez Mulero y la subdelegada del Gobierno en Alicante. Etelvina Andreu, recalcaron que el trasvase del Júcar-Vinalopó es un "compromiso incuestionable" del Gobierno central, y apostaron por "trabajar por la paz y el diálogo" en torno a este asunto.
El presidente de Seiasa recordó que el trasvase Júcar-Vinalopó es un proyecto "aprobado por ley" y por tanto "esa transferencia no es cuestionable, sino realizable". Según defendió, una posible modificación de parte del trazado "desde el punto de vista técnico puede traer más agua y asegurará entre 20 y 30 hectómetros cúbicos al año".
Además, Rodríguez Mulero también destacó que el Gobierno trabajará para que un posible cambio "no suponga un sobrecoste para los usuarios", y se mostró convencido de que tampoco supondrá cambios en los plazos de la obra, cuyo fin estaba previsto para 2010.
No obstante, Rodríguez Mulero reconoció que "sí es cierto que la calidad no sería igual que con el trazado original, sino que necesitaría un tratamiento potabilizador". En este supuesto, el presidente de Seiasa apuntó que todas las aguas trasvasadas requieren un tratamiento, y recordó que el agua que el PP preveía traer trasvasada del Ebro "tiene el doble de conductividad que la que se utilizaría en este trasvase".
Rodríguez Mulero también se refirió a las posturas en torno a la posible modificación del trazado del Júcar, y señaló que los regantes están de acuerdo con ello si se cumplen una serie condiciones que, según dijo, coinciden con las exigidas por el propio PSPV.
Estas condiciones, según apuntó, contemplarían la necesidad de asegurar el agua; el mantenimiento de su precio y los plazos de ejecución previstos, y la elaboración de unas normas de explotación que garanticen el consenso entre las cuencas emisoras y receptoras.
MODERNIZACIÓN DE REGADÍOS
Por otra parte, Rodríguez Mulero destacó hoy la importancia de la modernización de los regadíos como una de las vías para dotar a la provincia de los recursos hídricos necesarios. En esta línea, adelantó que en la actualidad y durante los próximos dos años se realizarán obras de modernización de regadíos por valor de 172.600.640 euros.
El presidente de Seisa resaltó que estas actuaciones pueden permitir un ahorro de 50 hectómetros cúbicos de agua al año en la provincia de Alicante, y recordó que, para paliar los daños producidos por la sequía, en junio el Gobierno central declaró obras de interés general localizadas en su mayor parte en la comarca alicantina de la Vega Baja, por valor de 341 millones de euros