La sequía ya ha ocasionado pérdidas de 423 millones de euros en el campo

Sáb, 06/08/2005

La Verdad

Un informe de COAG-IR señala que los daños más cuantiosos afectan a los cultivos de regadío y advierte de que si no llueve el arbolado de secano tardará cinco años en recuperarse FERNANDO SÁNCHEZ/MURCIA TALANDO ÁRBOLES. Dos agricultores arrancan y cortan sus frutales secos en la pedanía muleña de Yéchar. / VICENTE VICENS/AGM LAS CIFRAS CULTIVOS DE SECANO:

Pérdidas en producción: Cereal (61.049 hectáreas de superficie afectada, 82.416 toneladas métricas, 10.714,100 euros). Viñas (37.788 hectáreas, 84.465 tm, 30.472.243 euros). Almendro (66.420 hectáreas, 1,796 tm de grano, 4.840.920 euros). Olivar (15.638 hectáreas, 16.136 tm, 4.840.920 euros).

Pérdidas en plantaciones: Viñas (7.558 hectáreas, un 20% del total; 44.287.536 euros). Almendro (23.247 hectáreas, un 35% del total; 69.741.000 euros).

CULTIVOS DE REGADÍO:

Pérdidas en producción:

Hortalizas: 231.723 tm, 92.689.120 euros.

Cítricos: 170.000 tm, 59.500.000 de euros.

Frutales: 19.872.000 euros.

Viñedo, almendro, olivo: 39.806 tm, 13.887.542 euros.

Uva de mesa: 7.940.520 euros.

GANADERÍA:

Pérdidas económicas:

Ovino caprino: 39.411.240 euros.

Vacuno: 2.880.000 euros.

Porcino:12.000.000 euros.

Uva de mesa: 4.000.000 euros.

A perro flaco todo son pulgas. Este dicho popular se podría aplicar a la situación que viven los campos de la Región, ya que a los problemas derivados de las heladas del pasado invierno hay que unir ahora la incidencia que la sequía, que azota el sureste desde hace meses, está teniendo sobre la producción agrícola y ganadera. La asociación agraria COAG-IR presentó ayer un informe en el que analiza las pérdidas que la «grave sequía» ha originado en los cultivos de secano, de regadío y en la ganadería murciana y que ascienden a 423 millones de euros. De éstos, casi 194 millones corresponden a cultivos de regadío, 170,8 al secano y 58,2 a las explotaciones ganaderas.

El presidente de la Cámara Agraria y de COAG-Murcia, Pedro Lencina, instó al consejero de Agricultura, Antonio Cerdá, a que se realice un programa estratégico y que se dé prioridad a las actuaciones presupuestarias de desarrollo rural. También pidió que para «futuras situaciones de sequía» se disponga de un plan de actuación concreto que diera agua a los cultivos de regadío y que tuviese en cuenta a la agricultura de secano, que en la Región supone un total de 180.000 hectáreas de cultivos.

Lencina solicitó, además, un programa de actuación específico para el secano, «aunque no se pueda ayudar por decreto hay que priorizar las actuaciones económicas con un plan concreto para este sector», especificó.

El secretario de Agricultura de COAG-Murcia, Pedro García, indicó que si el arbolado de secano no recibe una aportación de lluvia podría tardar hasta cinco años en reponer su capacidad productiva. Además destacó el «importante papel social, económico y medioambiental» que tienen los cultivos de secano en la Región.

Medidas concretas

García incidió en que la situación de sequía hace que «se requieran actuaciones concretas para este sector, cuyas pérdidas en producción superan los 56 millones de euros». En cuanto a la incidencia directa sobre los productores explicó que «el agricultor no puede aguantar esta catástrofe». Por este motivo reclamó al Ministerio de Agricultura que tenga en cuenta las pérdidas de los leñosos.

El secretario de Ganadería de COAG-Murcia, Miguel Padilla, criticó que de los 400 hectómetros cúbicos de agua que debiera recibir el campo murciano por ley del trasvase del Tajo, este año hidrológico sólo se recibirán 241, «eso si le sumamos los 43 del Consejo de Ministros», manifestó.

Padilla incidió también en que zonas como el Valle del Guadalentín han perdido ya un 30% de la producción de hortalizas y que esta zona necesitaría «ocho hectómetros cúbicos de agua más».

En cuanto al sector ganadero, aclaró que está sufriendo un importante «sobrecoste», ya que los precios que se pagan por la paja y la alfalfa, que alimentan a 600.000 cabezas de ganado ovino y caprino, han aumentado en más de un 20%.

Las pérdidas superan los 58 millones de euros, de los que 40 afectan al sector ovino-caprino.