Un estudio alerta de la baja calidad del agua y prevé un 25% más de consumo en diez años

Vie, 10/06/2005

Levante

El informe constata que el abastecimiento está garantizado hasta 2024, pero no la potabilidad a causa de la intrusión marina y la contaminación por nitratos. Cada año los acuíferos pierden 3 hm3
Sergi García, Dénia
«El sistema de recursos hídricos de abastecimiento a Dénia es complejo y con calidad no apta para el abastecimiento urbano a pesar de que los recursos disponibles, cifrados en 58 hm3/año superan a las demandas actuales y futuras, estimadas en 22 (año 2014) y 25 hm3/año (año 2024)». La conclusión del informe elaborado por la empresa Evren para la sociedad Aguas de Dénia, con el objetivo de evaluar el estado de los acuíferos y de la red hídrica de la ciudad, evidencia el deterioro de los recursos de agua de la capital de la Marina Alta y lo atribuye, en concreto, a tres causas: la «proximidad al mar y baja capacidad de regulación de los acuíferos», lo que «genera problemas de intrusión marina en ciclos prolongados de sequía y en los períodos de mayor demanda»; «la contaminación por nitratos y la mala calidad e irregularidad del caudal suministrado a la planta -potabilizadora- de Racons producto de la actividad agrícola desarrollada en la zona»; y «el balance global deficitario del sistema de recursos hídricos utilizados en abastecimiento». Asimismo, el informe incorpora las previsiones de la Confederación Hidrográfica del Xúquer (CHJ), por las que la demanda de agua habrá crecido un 25% en 2014.
El estudio, que será presentado hoy en el ayuntamiento, constata que Dénia tiene suficientes recursos para atender la demanda hasta el año 2.024, pero otra cuestión es que pueda garantizarse en condiciones de potabilidad. De hecho, sólo un 36% del total de recursos explotados corresponde a aguas superficiales, que son las que se emplean fundamentalmente para abastecimiento a través de las potabilizadoras; en cambio, un 64% procede de aguas subterráneas.
El informe analiza la situación de los cuatro acuíferos de los que se nutre la ciudad (Pego-Dénia, Montgó, Solana de la Llosa y Segària), que ofrecen un balance hídrico preocupante. Cada año se reduce en 3 hectómetros cúbicos el volumen de agua en los acuíferos, ya que éstos reciben una media anual de 49,33 hm3 y pierden 52,35. Sobre el total de agua que abandona el acuífero al año, 13,85 hm3 corresponde a bombeos urbanos y 24,21 a bombeos agrícolas; llama la atención que más de 8 hectómetros cúbicos se pierden en el mar cada año.
Esta pérdida de caudal en los acuíferos es otro de los fenómenos que favorece la intrusión marina en el litoral, que es apuntada como la principal problemática en el caso de tres de los cuatro acuíferos.
Asimismo, el estudio advierte de que la demanda de recursos hídricos por parte de la población, que en 2004 se situó en 9.542.000 m3/año, aumentaría un 25% en 10 años, según las previsiones del Plan Hidrológico de la Cuenca del Júcar, para situarse en 2014 en por encima de los 12 millones de metros cúbicos anuales. A estas cifras se añade una demanda agrícola de agua que se sitúa en 12.694.481 metros cúbicos anuales.
En lo relativo a la «problemática del abastecimiento urbano en Dénia», el trabajo encargado por Aguas de Dénia destaca la «competencia entre los usos urbanos, agrícolas y ecológicos por los recursos hídricos disponibles», la «demanda creciente» y la «disminución de la cantidad y la calidad de los recursos disponibles en las épocas intranuales de mayor demanda y con motivo de ciclos de sequía prolongada».