El Congreso de los Diputados aprueba el rechazo definitivo al trasvase del Ebro

Vie, 03/06/2005

Europa Press

El Pleno del Congreso de los Diputados aprobó hoy el rechazo definitivo al trasvase del Ebro y dio luz verde al Programa A.G.U.A. de actuaciones urgentes para las Cuencas Mediterráneas, recogido en el proyecto de Ley de modificación del Plan Hidrológico Nacional (PHN). Todos los grupos parlamentarios, salvo el PP, se felicitaron porque ya no se llevará a cabo el trasvase del Ebro. El PP dijo que hoy se aprobó "la peor política del agua". Diversos miembros de la Plataforma de Defensa del Ebro siguieron el debate desde la Tribuna del Congreso de los Diputados.
La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, apuntó en el Pleno del Congreso que la Ley significa "cambios importantísimo" como, por ejemplo, que las obras de interés general necesitarán un informe que justifique su desarrollo y analice sus impactos, y se comprometió a seguir con las obras que ya están en marcha con un menor impacto ambiental.
Además, se obligará a controlar cuánta agua se consume, analizar la calidad del recurso hídrico, y a que las Confederaciones Hidrográficas realicen informes previos sobre nuevas urbanizaciones y sus demandas de agua, entre otros aspectos, indicó la titular de Medio Ambiente.
Narbona agradeció el apoyo en el proceso que comenzó en 2001 a los Grupos Mixto, CiU, PNV, ERC, Izquierda Verde y PSOE, así como al Consejo Asesor de Medio Ambiente, Fundación Nueva Cultura del Agua, Plataforma de Defensa del Ebro, asociaciones y expertos, y destacó que el proyecto de Ley aprobado significa "más racionalidad económica, menos conflicto social y más sostenibilidad ambiental".
INCORPORACIONES
El proyecto de Ley de modificación del PHN incorporó la supresión de los embalses de Santaliestra y Jánovas (Huesca) y la conexión CAT-Abrera, pero mantiene el trasvase del Júcar al Vinalopó. Además, se aprobó hoy en el Congreso que haya compensaciones de carácter ambiental y desarrollo socioeconómico de los municipios afectados negativamente en su desarrollo como consecuencia de la construcción de embalses.
Se aprobó que Aragón dispondrá de "una reserva de agua suficiente para cubrir las necesidades presentes y futuras de su territorio, tal y como establece el pacto de Agua de Aragón de 1992". Asimismo, se votó a favor de que "a propuesta del Gobierno de Aragón, las inversiones relativas a los embalses de más de cuatro hectómetros cúbicos, con fines de regulación interna, que sean aprobadas por la Comisión de Seguimiento del Pacto del Agua de Aragón, tendrán consideración de obras hidráulicas de interés general" según determinadas circunstancias.
Se aprobaron también la ampliación de la desaladora de aguas salobres de El Mojón y sus colectores, la ampliación de la depuradora de Murcia-Este y el interceptor de aguas pluviales del norte de Murcia, en la cuenca del Segura.
RECHAZADAS
Por el contrario, el texto final no incluye las enmiendas del Senado del PP como que se declaren de interés general todas las obras de los anexos II y III del PHN ni la obligación de que el Gobierno presente en tres meses, desde la aprobación del proyecto de Ley, un calendario de ejecución de las obras de los anexos II, III y IV del plan.
La diputada socialista Montserrat Colldeforns destacó la inclusión en la Ley de obras en el Levante, "dando prioridad a la cuenca del Segura". El proyecto de Ley dará "más agua y mucho antes" con el Programa A.G.U.A., se sabrá cuánta agua se utiliza y para qué, y se obligará a contar con un análisis económico y de viabilidad en las obras hidráulicas.
EL PP SEGUIRÁ DEFENDIENDO EL TRASVASE DEL EBRO
Por el contrario, la diputada del PP María Ángels Ramón-Llín consideró que se aprobó "la peor política del agua" y anunció que su partido "va a seguir defendiendo el PHN original hasta la saciedad, que era un todo en su conjunto con el trasvase del Ebro", y que si vuelve a ganar las elecciones volverá a aprobar el trasvase del Ebro. La diputada valenciana criticó que el Gobierno no sepa dónde se van a instalar las desaladoras y le calificó de "insostenible".
Josep María Guinart, de CiU, defendió que se debería haber incluido las obras de las Cuencas Internas de Cataluña como de interés general, y pidió al Gobierno que con la ley vigentes ponga en marcha con "la mayor celeridad" las infraestructuras recogidas.
Por parte de ERC, la diputada Rosa Bonás vestía una camiseta de la plataforma 'Xuquer viu' que reclama la paralización del trasvase Júcar-Vinalopó. Bonás dijo que el trasvase del Ebro era una obra innecesaria y en esta línea pidió a la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, que "reflexione" sobre el trasvase Júcar-Vinalopó y la "coherencia".
"FIN DE UN CALVARIO"
Joan Herrera, de Izquierda Verde, afirmó que hoy se votó el "fin de un largo camino o calvario" y "se finiquita de una vez por todas la vieja cultura del agua, y que se diga que la sequía se soluciona secando los ríos". Herrera dijo que "es un paso adelante" y que un "día feliz" para las Tierras del Ebro, pero advirtió de que "aún hoy hay infraestructuras que se ubican en la vieja cultura del agua, como el trasvase del Júcar-Vinalopó".
El diputado de la Chunta Aragonesista, Juan Antonio Labordeta, señaló que hoy "se pone el punto y final al trasvase del Ebro y a la irracionalidad de la gestión del agua" y criticó el anterior PHN del PP por "la ausencia de debate, errores en el análisis económico, incumplir directivas europeas, las serias dudas de la demanda para riego, insuficientes estudios previos y de las alternativas a los trasvases y carencia de estudios de impacto social". "El trasvase del Ebro provocaba desequilibrios territoriales", concluyó.